‘Todavía en pañales’, infraestructura para personas con discapacidad en el Centro Histórico de Saltillo
“Mi discapacidad me ha llevado a luchar toda la vida con esta situación. No somos visibles ni a la gente ni al funcionario. Por esa falta de visibilidad no se ponen en los zapatos de uno ni en Saltillo ni en ninguna parte” mencionó Carlos Vargas, miembro honorario de Amever
La infraestructura vial de la Zona Centro de Saltillo se encuentra en pañales respecto a su funcionalidad para personas con discapacidad visual.
En un recorrido realizado por VANGUARDIA, se observó que sobre la calle de Allende del Centro Histórico de Saltillo, permanecen estructuras metálicas que se colocaron en 2016 durante la remodelación de la vialidad.
Las mismas incluían el nombre de las calles escrito en sistema Braille para que los pudieran leer las personas con discapacidad visual.
Sin embargo se observó que ninguno permanece con esa característica, algunos ya no tienen el nombre de la calle y otros tantos mantienen la tipografía y logos de la administración municipal del periodo 2014-2017.
Al respecto y en entrevista para VANGUARDIA, Gabriela Ramos Gil, tesorera de la mesa directiva y maestra de la Asociación Mexicana de Enfermedades Visuales y Estudios de la Retina A. C. (Amever), declaró que en su momento se les consultó para colocarlos y “sí fueron muy útiles”.
Detalló que “cuando vas caminando por ahí pues es bueno ver en qué calle estás pero si ya estabas acostumbrado a que ahí estaba el letrero pues por cualquier cosa ibas y lo checabas y luego ya no, pues sí te desubicas un poquito, pero luego ya te vas acostumbrando”.
Ramos agregó que “prácticamente luego luego” que se instalaron los letreros, dejaron de tener el relieve en Braille.
En ese sentido, contó que las personas débiles visuales se ubican con las tiendas o contando cuadras para saber por dónde están caminando. “Tienes que emplear otras cosas si ya no tienes ese recurso, pero si está pues se facilita”.
No obstante, Ramos Gil mencionó que lo ideal para las personas débiles visuales es que el nombre de las calles pueda escucharse, es decir que puedan presionar un botón y una grabación les diga el cruce de las calles.
Puntualizó que lo anterior se debe a que muchas de las personas débiles visuales que acuden a cursos o acompañamiento en Amever, son diabéticas, por lo que pierden sensibilidad en la piel e incluso con el sistema Braille les es complicado leer.
“Si pudiéramos hacer una propuesta, sería esa, que fuera así, con el nombre grabado en voz”, mencionó Ramos.
De acuerdo a reportes periodísticos del 2016, además de la nomenclatura, se colocaron pasos podotáctil y semáforos peatonales auditivos.
La línea podotáctil está presente en varias otras calles del Centro Histórico, mientras que los semáforos auditivos solamente en Victoria y Allende.
José Luis, un hombre ciego que se dedica a recorrer las calles del Centro Histórico pidiendo dinero, mencionó para VANGUARDIA que “sí hace falta infraestructura para nosotros”.
Detalló que él se ubica en la Zona Centro pues se ha aprendido las calles, aunque sería de mucha ayuda poder recorrer otras calles si hubiese la misma infraestructura, particularmente en los bulevares Emilio Carranza y V. Carranza.
Respecto a los semáforos auditivos, mencionó que “esos son de ley”, refiriéndose a que son de gran ayuda para saber cuándo puede cruzar las calles.
Asimismo, Ramos Gil mencionó que la línea podotáctil “está más o menos pues aunque es muy útil, a veces te topas con un poste, o a veces la gente no la respeta y va caminando por ahí y otras veces cruzas y en la siguiente banqueta no está en la misma línea y tienes que volver a buscarla”.
También en ese sentido, Carlos Vargas, miembro honorario de Amever, mencionó que en 2016 la remodelación tuvo aspectos positivos como ampliar el espacio de las banquetas, quitar las cabinas telefónicas, los obstáculos de las esquinas y las canastillas para la basura.
No obstante, coincidió con Ramos Gil en que las líneas podotáctiles “no funcionan muy bien” pues “es como tratar de manejar un teléfono con un guante puesto”.
En general, Vargas calificó que la infraestructura del Centro Histórico para personas con discapacidad “está en pañales” pues reporta que algunos semáforos de la calle de Victoria “ya no funcionan como antes, como que alguien les metió mano para que dejaran de sonar”.
Detalló que la infraestructura que se necesita es para todas las personas con distintas discapacidades, pues “es un todo, no solo para nosotros los ciegos”. En ese sentido, mencionó que deberían cuidarse cosas como las rampas en todas las esquinas.
“Sí hace falta esa infraestructura porque quieres llegar a una esquina para enterarte dónde estás. Los ciegos, si a algo le tenemos harto miedo es a perdernos, a no saber dónde estamos, es lo peor que nos puede suceder. Entonces todo es un complemento y todo debe de ir en el mismo paquete.”
Puntualizó diciendo “mi discapacidad me ha llevado a luchar toda la vida con esta situación. No somos visibles ni a la gente ni al funcionario. Por esa falta de visibilidad no se ponen en los zapatos de uno ni en Saltillo ni en ninguna parte.”