Un temporal de nieve y viento azota a España
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Madrid.- Cuando parecía que el tiempo primaveral había llegado ya a España, un temporal puso hoy a todo el país en alerta por nieve, viento o fuertes olas, según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología.
La cota de nieve en el norte se situó a entre 400 y 500 metros, mientras que el litoral cantábrico y el atlántico se veían afectados por un fuerte oleaje que obligó a quedarse amarrada a gran parte de la flota. El viento soplaba fuerte en casi todo el país, con rachas previstas de hasta 120 kilómetros por hora en la cornisa cantábrica.
Las Islas Baleares y el archipiélago canario también se vieron afectados por el temporal. En Palma de Mallorca, la fuerza del viento hizo moverse a un crucero y causó la rotura de la pasarela de acceso cuando los pasajeros abandonaban el barco en una escala.
Tres pasajeros cayeron al agua y fueron rescatados por dos miembros de la tripulación que se tiraron detrás de ellos. Tres de estas personas fueron trasladados al hospital con hipotermia y uno con un traumatismo craneal.
Entre tanto, la nieve obligó al cierre de varios puertos en el norte del país y causó estragos en el tráfico.
Los bomberos tuvieron que intervenir esta mañana en Madrid, donde un cartel de grandes dimensiones instalado sobre una azotea dobló a causa del fuerte viento y amenazaba con caer a la calle.
En el enclave español de Melilla, situado en el norte de Africa, el viento causó la caída de una parte de la verja fronteriza con Marruecos, lo que obligó a la Guardia Civil a reforzar la vigilancia en esa zona.
En Ceuta, también en el norte africano, 15.000 escolares se quedaron hoy sin clase por precaución ante el temporal. También en Cantabria, en el norte, las clases quedaron suspendidas como medida de precaución tras romperse por el viento una cubierta exterior en un colegio de Santander.
En enero, un temporal de nieve y frío colapsó el país. La Unidad Militar de Emergencias (UME), perteneciente al Ejército, tuvo que desplegarse en Madrid, Valencia y Zaragoza para hacer frente a las consecuencias de las nevadas.