Cédulas profesionales
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Ernesto Villanueva
La publicidad de las cédulas profesionales no está todavía plenamente garantizada. En el ámbito federal y en el Distrito Federal hay un pleno acceso a la información relativa a las cédulas profesionales, pero no es el caso de muchos Estados de la República (entre ellos Puebla, Michoacán y Chiapas). No se trata de una cosa menor. Veamos por qué.
Primero. La cédula profesional es el instrumento legal a través de la cual la autoridad competente reconoce que una persona cuenta con los conocimientos suficientes para ejercer una actividad sujeta a registro y control. Por ende, toda persona que no posea la cédula respectiva tiene prohibido llevar a cabo o prestar servicios propios de una profesión reglada, so pena de incurrir en un delito con sanción consistente en privación de la libertad y multa. Se trata de manera enunciativa de médicos, abogados, ingenieros, entre otros. Formalmente, el registro y expedición de cédulas profesionales es potestad de cada Estado en virtud de que existe una normatividad concurrente; es decir, a nivel federal y del Distrito Federal y para cada uno de los Estados. Lo cierto, sin embargo, es que prácticamente todos los Estados (desconozco un solo caso que no sea así) han firmado acuerdos con la federación y es la Secretaría de Educación Pública la que expide las cédulas profesionales a través de la Dirección General de Profesiones. Esta circunstancia posibilita el monitoreo público y la rendición mínima de cuentas.
Segundo. El acceso a las cédulas profesionales debe ser público por varias razones: a) Porque se trata de una patente que otorga el Estado a una persona que le garantiza ejercer una actividad que le impide a los demás. La cédula profesional deviene de un acto de autoridad, la cual está sujeta al escrutinio social.; b) Porque la cédula profesional asegura un conocimiento medido y regulado en aras del interés público. La persona que ejerce la medicina y que carece de cédula profesional pone en riesgo la integridad de sus pacientes. Quien ejerce la ingeniería civil y no cuenta con la cédula para ello pone en peligro la vida de las personas al no haber garantía que los edificios, las escuelas o los puentes están construidos con las especificaciones debidas. Y así se puede elaborar un amplio rubro de ejemplos más; y c) Porque hay servidores públicos que por ley deben contar con una cédula profesional como los jueces, magistrados, agentes del ministerio público, procuradores de justicia, notarios públicos, directivos y médicos de hospitales, entre muchos más. En estos casos la exigencia de publicidad es doble porque se trata de actividades regladas por ley y porque se trata de servidores públicos quienes deben predicar con el ejemplo.
Tercero. En varios Estados al solicitar información sobre las cédulas profesionales se ha respondido en sentido negativo aduciendo que se trata de datos personales y que, por tal razón, se trata de información confidencial. Por supuesto que las cédulas profesionales contienen datos personales. Ello no implica, empero, que se trate de información confidencial. Por el contrario, la publicidad de las cédulas profesionales constituye una herramienta de seguridad jurídica en la medida en que la sociedad puede saber con certeza que los profesionistas efectivamente cuentan con los conocimientos con los que se ostentan. En el sector público debería incluso seguirse el ejemplo del Estado de Morelos donde la cédula de los servidores públicos que por ley deban contar con una es información pública de oficio. Hoy falta mucho por hacer, pero se han dado algunos pasos importantes. La SEP ha habilitado la página www.cedulaprofesional.sep.gob.mx donde se pueden verificar la autenticidad de cédulas profesionales. El problema es que la persona debe conocer el número de cédula profesional, pero al menos sirve para corroborar los datos de los médicos, por ejemplo, donde con el número de cédula profesional que aparece en la receta junto con el nombre y apellidos del médico se puede entrar a la página de internet citada y comprobar en segundos si todo está bien o, por el contrario, se está frente a la comisión de un delito.
evillanueva99@yahoo.com  Â