- 22 abril 2024
Sefardíes, miel cruda de abejas y otras historias de Nadadores (2/2)
El conformar un apellido así proviene de la edad media, cuya costumbre era indicar el origen geográfico de los naturales de la zona
Los huertos y jardines que hay en Nadadores, como otros de nuestro país, tienen su origen en la Persia antigua y pasaron a Egipto hasta llegar al imperio árabe y migrar a España, por donde prosiguieron en su avance de clorofila hasta nosotros. Es el caso de rosas, jazmines, naranjos, granados, duraznos, higueras, palmas datileras y otros prodigios que ahora vemos como un recuadro de belleza tal vez un poco habitual.
En Nadadores, de esos huertos y jardines interpolados, mi madre me cuenta que su madre Esperanza Guadalupe sacaba granadas y las ponía a secar. Cortaba las granadas “con el cabo larguito y las colgaba en racimos, así como los elotes tiernos para hacer los chicales. Entonces, de cortarlas en agosto, esperábamos cuarto meses para comerlas, de septiembre hasta diciembre. La cáscara quedaba muy dura pero adentro estaba todo muy rico. No, no se batalla, nada más se le corta la coronita y ya después te las comes”, así dijo Agripina María cuyo apellido materno es Montemayor.
Montemayor es un apellido de origen toponímico, es decir, refiere al lugar o territorio. Y procede de los lugares llamados Montemayor en las provincias de Valencia, Albacete y Córdoba. El conformar un apellido así proviene de la edad media, cuya costumbre era indicar el origen geográfico de los naturales de la zona. Montemayor nace al unir monte y mayor que refiere simplemente a un monte mucho mayor que el resto, a simple vista.
Los Montemayor por parte materna eran sefardíes y por el lado paterno estaban los Fuentes que eran ateos. Al contarme eso, mi madre recuerda que siempre se llevaron bien mi abuela con sus prácticas religiosas y mi abuelo con su particular cosmogonía. Había armoniosa convivencia entre ellos. Añade: “como todos en estas familias vivíamos cerca, era una relación, haz de cuenta, como si fuéramos una sola familia”.
En una esquina a la entrada de Nadadores, vivía su tío Luis Montemayor, en la otra su tío Eduardo Montemayor a quien le llamaban coronel Montes porque su abuelo era Montemayor Montes de Oca. Eduardo Montemayor había participado en la revolución y fue dos veces presidente de Nadadores.
En la otra esquina vivía su tío Saturnino Vázquez: “él tenía dos tienditas, una mirando para una calle y la otra mirando para la otra. En la que llamábamos tienda vendía de todo y él también comparaba nueces y otras cosas que le llevaban a vender. Yo también iba y le vendía tinitas de nueces. Una tinita era un kilo. Y ¡n´ombre!, mi tío tenía dulces de frijolitos riquísimos y las colaciones que se daban en Navidad, de esas que adentro tenían semillas de cilantro. La otra tienda era una carnicería.
En este verdor, se acuerda de los camotes tan ricos que se daban en el patio de su abuelo Loreto Montemayor: “A veces así nomás quitándoles la tierra, nos los comíamos crudos. Y esos camotes le sobrevivieron a mi tío muchos años, porque como quedan las raicitas, vuelven a brotar. Así que solo dejábamos que alcanzaran cierto tamaño y los sacábamos para disfrutarlos”.
El vocablo granada proviene del latín malum o manzana y granatum o grano. Y significa manzana con grano.
Encuesta Vanguardia
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