Un regalito de Navidad
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Esperanza Dávila SotaHe pensado que quizás yo tenga algún lector y hoy quiero darle un obsequio. Un regalo para recordar y celebrar juntos el nacimiento del Niño Jesús, y caminar con los pastores hacia Belén llevando presentes al niño y a María, la madre del recién nacido Redentor.
Juan del Enzina vivió en la segunda mitad del siglo 15 y el primer cuarto del 16. Fue gran poeta, músico y autor de teatro del Prerrenacimiento español en la época de los Reyes Católicos. Este es un hermoso villancico de su amplia obra poética, al que seguramente también le compuso música para ser cantado en los días de la Navidad. Lo tomé del “Libro de Horas. Juan del Encina. Villancicos”, Corona Editores, 1916. Modernicé algún término de la composición para entenderlo plenamente, y con mis mejores deseos, es mi regalo para quien lea esta columna:
Anda acá pastor a ver al Redentor.
Anda acá Minguillo,
deja tu ganado,
toma el caramillo [flauta de caña]
zurrón y cayado.
Vamos sin temor
a ver al Redentor.
No nos aballemos [movamos]
sin llevar presente;
mas ¿qué llevaremos?
Dilo tú Llorente,
¿qué será mejor
para el Redentor?
Yo quiero llevarle
leche y mantequilla
y para empañarle
algunas mantillas,
por ir con amor
“a ver al Redentor”.
Con aquel cabrito
de la cabra mocha
darle algún quesito
y una miga cocha
[carne de cerdo]
que le dará sabor
“sabor al Redentor”.
No piense que vamos
su madre graciosa
sin que le ofrezcamos
más alguna cosa;
que es de gran valor
“madre del Redentor”.
En cantares nuevos
gocen sus orejas:
miel y muchos huevos
para hacer torrejas,
aunque sin dolor
“parió al Redentor”.
