Negocian acuerdo con Texas: ¡y lo consiguen!
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TORREÓN, COAH.- La entrevista de los gobernadores mexicanos con su homólogo de Texas, Greg Abbott, sirvió para arreglar lo que no arregló el Gobierno Mexicano: “ni nos extorsionaron o nos trataron mal y se retiraron las revisiones que retenían el flujo”, dijo Miguel Riquelme.
Se trató de una acción rápida del gobierno de Coahuila, por lo que Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, debería reconocer a los gobernadores que fueron a Texas y enfrentaron una problemática ajena, que no está dentro de sus funciones, pero las asumen.
Las gestiones que realizó, dijo, las hizo por Coahuila, dada las consecuencias económicas graves que estaba ocasionando la revisión de tráileres que ingresaban a Estados Unidos.
De lo que sucedió, el Gobierno de México todavía no mide el impacto económico, cuando lo más conveniente es trabajar de manera coordinada para enfrentar lo que venga.
Los gobernadores tuvieron que ir a negociar y ver cuál es la problemática, que en el caso de Coahuila es el tema migratorio y la seguridad de la frontera con Texas, justificó.
El paso de migrantes nada tiene que ver con nuestra entidad, vienen del sur y en ese sentido pasan por muchos Estados del país antes de llegar a Coahuila; sin embargo, se les da un trato apegado a sus derechos humanos.
Explicó que actualmente se tiene vigilancia en las márgenes con otros Estados, como Chihuahua, Durango, Nuevo León y Tamaulipas y Zacatecas, que es por donde están dando la vuelta los migrantes en su paso hacia Estados Unidos.
Coahuila emprendió un operativo para mantener la seguridad en esa zona, derivado no del fenómeno migratorio, sino del tráfico de migrantes y se ha estado trabajando para salvaguardar la vida y derechos de los migrantes.
GOBIERNO FEDERAL AUSENTE
Es preocupante lo que se está generando y la Secretaría de Relaciones Exteriores no se está dando cuenta de ello.
“Me hubiera gustado que el canciller me marcara cuando Texas detuvo todos los camiones y se nos hicieron alrededor de 17 kilómetros de fila porque no podían pasar al estado de Texas”, dijo Riquelme Solís.
Agregó, “que en esa ocasión muchos productos se echaron a perder y que empresas coahuilenses con contratos en los Estados Unidos fueron objeto de multas por los retrasos y durante más de 36 horas se vieron rotas las cadenas de suministro de la industria automotriz, y a los gobernadores el gobierno federal nunca nos habló.”
“¿Pregúntame si recibí una llamada del Gobierno de México? Nunca!. Los gobernadores tuvimos que ir a negociar y ver cuál es la problemática.
La problemática es el tema migratorio en el caso de Coahuila y la seguridad de nuestra frontera con Texas”, concluyó el mandatario.
