¿Son de verdad los Cowboys?

ARLINGTON.- El triunfo más completo de la temporada para los Cowboys de Dallas ocurrió justo cuando el equipo busca quedarse con el liderato de la Conferencia Nacional.

¿Qué tan completo fue?

Los Cowboys consiguieron touchdowns en ofensiva, defensiva y con los equipos especiales por primera vez en un mismo partido en nueve años, y aplastaron el domingo por 56-14 a Washington.

Dak Prescott esparció sus cuatro pases de anotación, todos en la primera mitad, a un corredor, un receptor, tight end y liniero ofensivo. El único otro quarterback en lograrlo fue Kurt Warner con San Luis en el juego de playoffs conocido como el “Greatest Show on Turf” en 1999.

Los Cowboys tuvieron a cuatro receptores con al menos 50 yardas en la primera mitad por primera vez desde 1981, de acuerdo con información del propio equipo.

Prescott nunca dirá que estuvo en crisis, pero sus números dicen lo contrario. Ya no lo está y los Cowboys (11-4) suman cuatro victorias consecutivas antes de visitar el domingo a un tambaleante Arizona (10-5).

Dallas, que aseguró el título del Este de la NFC una hora antes de enfrentar a Washington, se ubica un juego detrás del líder de la Conferencia Green Bay a falta de dos partidos. Están igualados con los Rams de Los Ángeles y Tampa Bay.

“Es bueno celebrar una meta que nos pusimos al inicio del año”, admitió Prescott, quien lanzó para 330 yardas y los Cowboys terminaron con la mayor cantidad de yardas (497) desde su racha de seis al inicio de la campaña.

“Nos dirigimos en la dirección correcta para alcanzar la meta, lo que realmente queremos hacer”, agregó. “Entonces fue una buena celebración, pero como dije, nadie está satisfecho sólo con esta celebración”.

Los Cowboy empataron el récord de franquicia con su tercer bloqueo a un patada de despeje esta temporada. Fue el segundo balón recuperado para un touchdown, convenientemente el bloqueo de Corey Clement rebotó en dirección a Chauncey Golston en la línea de gol para tomar ventaja 49-7 en el tercer cuarto.

La percepción de la historia de Terence Steele. El tacle suplente estaba tan emocionado por su atrapada de una yarda para anotar que lanzó tan fuerte el balón al piso que terminó en las gradas. El corredor Ezekiel Elliott, un veterano de las celebraciones, recuperó el balón mientras todos se le amontonaron a Steele.

“Un reconocimiento a Zeke debido a que quiero el balón”, dijo Steele, quien abrazó tan fuerte a Mike McCarthy y le dio una gran sacudida. “Es algo que voy a atesorar por siempre”.