Italia: Nápoles asfixiada por los incendios de basuras
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Unos 90 incendios de basura se registraron en la madrugada del lunes en Nápoles y sus alrededores, en el sur de Italia, dos días antes del primer consejo de ministros del gobierno de Silvio Berlusconi para aprobar medidas urgentes contra las toneladas de desechos en esa región.
La mayor capital del sur de Italia se encuentra de nuevo sumergida por toneladas de basura y el olor nauseabundo, multiplicado por el calor, que impregna a objetos y personas, por lo que la población decidió incendiar centenares de montañas de desperdicios.
Equipos de bomberos y policías intervinieron para apagar los incendios, pese a los ataques de grupos de personas que desde motocicletas les lanzaron piedras.
"Tenemos que intervenir cada 6 ó 7 minutos", explicó el comandante de los bomberos de Nápoles, Ugo Bonessio.
La empresa de aseo local, Asia, decidió aplicar un dispositivo especial para la recolecta de desechos.
Se calcula que unas 3.500 toneladas de basura se acumulan aún en las calles de Nápoles, frente a las 5.000 toneladas del sábado.
"Están por partir varios trenes con desechos hacia Alemania", anunció Pasquale Losa, presidente de Asia.
Más de 100.000 toneladas de basura serán exportadas hacia ese país para ser sometidas a tratamientos especiales.
Según el diario La Repubblica, el nuevo jefe de gobierno, Silvio Berlusconi, tiene programado abrir unos diez vertederos en la región de Campaña.
"Hay que movilizarse y hacer de todo para 'obligar' a los alcaldes a aceptar la apertura de los nuevos vertederos", declaró el domingo. El consejo de ministros confirmará el papel del ejército para resolver la crisis tal como lo hizo a inicios de año el precedente gobierno de centro izquierda presidido por Romano Prodi.
Los militares han sido movilizados para ayudar a recoger los desperdicios que se acumulan frente a las escuelas y las oficinas públicas.
El presidente del Colegio de Médicos de Nápoles, Giuseppe Scalera, calificó de "dramática" la situación sanitaria de esa ciudad, sobre todo por el aumento de las ratas, que transmiten a través de la orina la leptospirosis, una enfermedad que entra en el organismo por la piel o las mucosas y se disemina por la sangre atacando diversos órganos.
