Mayor Iglesia protestante de EU, Convención Bautista del Sur, rinde cuentas tras décadas de abusos
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La Convención Bautista del Sur, considerada la mayor iglesia protestante de Estados Unidos, publicó un informe en el que se detalla décadas de abuso y encubrimiento por parte de sus líderes.
Gordon Lunceford de Kentucky, John Leming de Tennessee y James Robinson de Texas; son algunos de los cientos de agresores sexuales que la Convención Bautista del Sur se vio obligada a da a conocer en su informe y que forman parte de una lista que la Convención había estado negando durante años sobre su existiera hasta que una investigación realizada de manera independiente y que solicitada por el propio grupo reveló cómo los líderes bautistas ocultaron las denuncias de abuso hacia sus feligreses, llegando incluso a intimidarlos.
En este sentido, Christa Brown quien fue violada por un pastor bautista cuando era niña, precisa que ese listado existe desde 2007, sim embargo durante todo este tiempo la Iglesia sostuvo que no podía recopilar este tipo de datos, “que mantener una lista así iba en contra de su religión”.
Brown es una de las más reconocibles en la lucha de los supervivientes de abusos sexuales por obligar a la Convención Bautista del Sur a reconocer y reparar el daño provocado durante años a fieles.
Siendo así, que en respuesta a una investigación, los responsables de las iglesias bautistas del sur tuvieron que hacer hicieron pública una lista, que hasta ahora se mantenía como secreta, con cientos de pastores y otras personas afiliadas a la institución acusadas de abusos sexuales.
La base de datos consta de de 205 páginas y se hizo publica pasado el jueves en la que se incluye más de 700 entradas de casos ocurridos en su mayoría entre 2000 y 2019.
Pos su parte, la firma independiente Guidepost Solutions, autora de la investigación descibe cómo el Comité Ejecutivo de la Convención Bautista del Sur manejó de forma errónea las acusaciones de abuso sexual, y cómo a su vez puso obstáculos a muchos sobreviviente y priorizó la protección de la CBS ante posibles responsabilidades.
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En un comunicado conjunto, los líderes del Comité Ejecutivo, Rolland Slade y Willie McLaurin, precisaron que la publicación del listado es en sí “un paso inicial, pero importante, para abordar el flagelo del abuso sexual y aplicar reformas en la Convención”. “Cada entrada en esta lista nos recuerda la devastación y la destrucción causadas por los abusos sexuales”, agregaron. “Nuestra oración es que los sobrevivientes de estos actos atroces encuentren esperanza y curación, y que las iglesias utilicen esta lista de forma proactiva para proteger y cuidar a los más vulnerables entre nosotros”, continúa el comunicado.
En tanto que Christa Brown explicó que “algunos de nosotros ya hemos pasado por esto antes”.
En este sentido, la escritora y activista evocó un suceso en el año 2007, cuando la cadena ABC emitió un programa sobre los abusos sexual en la Convención Bautista del Sur, y en el que pensó en ese entonces que las cosas estaban a punto de cambiar.
“Pero no lo hicieron”, dijo. “Esperaron a que los medios dejaran de cubrir el tema, hicieron mucho lavado de imagen, dijeron muchas cosas buenas, pero en cuanto a cambio institucional, apenas hubo nada”, añadió Brown.
Por otra parte, el pastor J.D. Greear, líder de la Iglesia de la Cumbre (Summit Church) y expresidente de la Convención Bautista del Sur, comprende el escepticismo, sin embargo opina en que el hecho de que el informe haya surgido tras una iniciativa de los propios bautistas es avance.
“La mayoría de los bautistas del sur se sintieron horrorizados al enterarse de que algunos de estos líderes se habían aprovechado de su poder para proteger la institución y protegerse a sí mismos, y pidieron una investigación inmediatamente”, explicó Greear a Efe.
Así también en el informe Guidepost revela cómo August Boto, exvicepresidente y consejero general del Comité, y el exvocero Roger Oldham tenía guardada su propia lista de sacerdotes abusivos.
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“Pese a recopilar esos reportes durante más de 10 años, no hay indicios de que (Oldham y Boto) o alguien más, tomasen medida alguna para garantizar que los sacerdotes acusados no seguían en posiciones de poder en las iglesias de la CBS”, indica el reporte.
Por su parte, si bien el Comité Ejecutivo no agregó nombres a la lista publicada, sus abogados decidieron censurar varios de los nombres e información identificativa de los sobrevivientes y de otras personas no relacionadas con los acusados, indicó el comunicado del jueves pasado.
Greear, que fue presidente de la Convención Bautista del Sur desde 2018 hasta 2021, siendo ese mismo año en que la gran mayoría de sus miembros votó a favor para establecer un comité con el propósito de evaluar la respuesta del grupo a las acusaciones de abuso sexual contra sus pastores.
“Proteger a los hijos de Dios es la misión de la Iglesia. Debemos enfrentarnos a esto de manera decisiva y definitiva”, aseveró en aquel entonces Greear.
En opinión el religioso, la Convención “no operaba de acuerdo a los principios de la Biblia”, sin embargo eso no es motivo para condenar a la institución entera. “Entonces no habría ningún tipo de responsabilidad”, defiende Greear.
En contraste Christa Brown no está totalmente convencida de que los casos sean diferentes. “Creo que la Convención Bautista del Sur ha hecho las cosas peor que los católicos”, comentó, ya que sus líderes tuvieron la oportunidad de aprender de la experiencia de la Iglesia católica, y “decidieron no hacerlo”.
Por otra parte, en el listado también hay sacerdotes bautistas no afiliados a la CBS.
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Siendo así que tanto los sobrevivientes como sus partidarios tenían mucho tiempo reclamando una base de datos de los agresores pública.
En este sentido, en respuesta a esta petición Guidepost recomienda la creación de un “sistema de información sobre delincuentes”.
Brown también recordó el caso de Thomas Doyle, un sacerdote católico que fue uno de los primeros en denunciar la cultura de abuso de menores en la Iglesia, y quién, en 2007 vaticinó que la Convención Bautista se encaminaba a una situación similar.
“Tuvieron la oportunidad de hacer las cosas de manera diferente, y en lugar de eso insistieron en su camino”, lamentó Brown.
Así mismo, la escritora tampoco desea restar importancia a la disculpa y el reconocimiento de los líderes bautistas, que en su piensa sirve para reparar “una parte muy pequeña” del gran dolor que la Convención provocó a cientos de supervivientes como ella durante años.
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Denunciantes como Brown de Texas o Jules Woodson de Tennesse y Tiffany Thigpen de Florida, son solo algunos de las cientos de supervivientes que durante décadas han denunciado los abusos de la Convención Bautista del Sur y para quienes la publicación de la lista de agresores es “un primer paso”.
“Veremos qué ocurre ahora”, expresó Brown.
“Nuestra investigación reveló que, durante muchos años, unos cuantos líderes de alto rango del Comité Ejecutivo, junto con asesoría legal externa, controlaron en gran medida la respuesta del Comité Ejecutivo a estos reportes de abuso... y se centraron en particular en evitar alguna responsabilidad de la CBS”, explica el informe de Guidepost Solutions.
“Para alcanzar este objetivo, los sobrevivientes y otros que denunciaron los abusos fueron ignorados, no se les creyó, o se enfrentaron con el argumento constante de que la CBS no podía actuar debido a su política respecto a la autonomía de la iglesia —incluso si eso significaba que agresores condenados continuaran en el ejercicio de su ministerio sin aviso o advertencia a su iglesia o congregación actual”, precisa el informe.
Por su parte, Ed Litton, actual presidente de la CBS, manifestó el domingo pasado en un comunicado que está “profundamente dolido” por las víctimas. Aí mismo, exhortó a los bautistas del sur a que se lamenten y se preparen para cambiar la cultura de la congregación y aplicar reformas.
“Rezo para los bautistas del sur comiencen a prepararse el día de hoy para tomar medidas concretas para abordar estos fracasos y trazar un nuevo rumbo cuando nos reunamos en Anaheim”, expresó Litton.
Por otra parte, entre las principales recomendaciones del informe de Guidepost Solutions están:
- Formar una comisión independiente y posteriormente establecer una entidad administrativa permanente para supervisar las reformas integrales a largo plazo respecto a los abusos sexuales y las conductas indebidas relacionadas al interior del SBC.
- Crear y mantener un Sistema de Información de Agresores para alertar a la comunidad sobre los agresores de los que se tenga conocimiento.
- Proporcionar un conjunto completo de recursos que incluya protocolos, capacitación, educación e información práctica.
- Restringir el uso de acuerdos de confidencialidad y acuerdos civiles que obligan a los sobrevivientes a la discreción en asuntos de abuso sexual, a menos que lo solicite el sobreviviente.
El escándalo de abusos sexuales se hizo público en 2019 como consecuencia de una investigación llevada a cabo por los periódicos Houston Chronicle y San Antonio Express-News, en la que consiguieron documentar cientos de cientos de casos en las iglesias bautistas del sur, a sí como a varios en los que los presuntos autores permanecieron en el clero.
Con información de las Agencias EFE y The Associated Press.
