De mal en peor (parte II)
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PRIMERA MALA. Si en nuestra nación la seguridad pública se está deshaciendo entre las manos de un simulador, en Coahuila están parte de las raíces de este abandono a la suerte de los grupos delincuenciales de la actividad prioritaria del Gobierno de proveer el bien común.
Sabemos bien que el encargado de negocios no tiene ni la vocación ni el interés de que la ciudadanía coahuilense viva en paz, y ha dejado a un político a cargo que ha demostrado –a lo largo de su vida como funcionario– llegar a los límites de su incapacidad, primero como rector después como secretario de Educación, como diputado de mentiritas y hoy como secretario de Gobierno.
La labor de Chema como encargado de la seguridad pública es deficiente, pero lleva jiribilla porque así conviene al funcionario que recibe mieses por varias vías.
Según datos del Secretariado Nacional de seguridad, Coahuila sigue apareciendo con más criminalidad que otros estados como Sonora, Tamaulipas, Morelos, Michoacán, Zacatecas, Durango y Guerrero. Contabilizándose 5 mil 191 delitos en el último reporte al mes de agosto de este año, es decir, 167 por día.
Pero no solamente se tiene ese lamentable récord sino también un enorme déficit de policías por persona que se supone deben cuidar a la ciudadanía. Según el más reciente censo nacional en el que refiere: “Por cuanto al déficit, las cinco entidades que presentan el mayor rezago de policías por habitante son Tamaulipas (-76.79 por ciento), Veracruz (-64.75 por ciento), Coahuila (-59.86 por ciento), Estado de México (-59.79 por ciento) y Zacatecas (-58.95 por ciento).”.
De esa manera el gobierno, o mejor dicho la gerencia administrativa de RMV & Brotes INC, mantiene la psicosis necesaria para seguir continuando el control estatal a través del miedo y la impunidad. Mala suerte, Coahuila, escogiste a la madrastra de la cuenta y ahora pagas las consecuencias.
PRIMERA PEOR. Una papa caliente es el asunto de la violación de los niños en un kínder de la SEDU porque ante el lamentable hecho la Fiscalía del Estado, por su parte, ha demostrado su incapacidad manifiesta y, por otra parte, los encargados del manejo legal de la SEDU a través de su “flamante” directora jurídica pretenden dar una salida política al asunto acercándose con los padres de las víctimas, a fin de confundir a los menores en sus versiones en un hecho siniestro encabezado por la propia Diana Castillo, quien hace dote de sus dones de negociadora adquiridos no en la Facultad de Jurisprudencia, sino en su paso por el departamento de mañas y similares del PRI Estatal.
Aparte han llegado denuncias en el sentido de que la Lic. Castillo, al ser notaria, está ejerciendo a través de un tercero, a quien le manda incautos para certificar copias y registros en exclusiva. Después diremos el nombre de ese notario gordito y saleroso. Vaya clase de gente.
SEGUNDA MALA. Ya en el tema educativo y ante la falta de recursos, por la mañosa administración de la docena trágica y la ahora contabilidad china de Blasito Flores, al encargado de los business estatal (encargado de negocios, para los que fueron a la Anexa de Torreón) no le ha quedado otra más que patrocinar levantamiento de bardas, entrega de botes de pintura, latas de impermeabilizante, borradores y cuadernos, en sus visitas a las escuelas en actos que de verdad dan pena ajena.
Sin embargo, algo resulta sospechoso porque el Presupuesto de 2019 asignado a obra educativa fue anunciado en 800 millones de pesos y, según datos de los estados de resultados de la Secretaría de Finanzas, a la fecha en ese segmento no han invertido siquiera el 47 por ciento de la cantidad referida, por lo tanto la pregunta es en el sentido del destino de los dineros.
SEGUNDA PEOR. Que cómico es el príncipe Manolo, la primera y su última broma fue declarar que más de 4 mil personas habían acudido al llamado de sembrar arbolitos a las faldas de la sierra de Zapalinamé, cuando la realidad y su lado moridor refiere otros datos, como decir el Peje presidente.
La cuenta de convocados –en su mayoría funcionarios de la nómina municipal, incluyendo al DIF– no sumó más de 380 personas a las que les entregaron unos paupérrimos pinabetes de 15 centímetros que difícilmente sobrevivirán 10 días en las condiciones en las que fueron sembrados. La cuenta alegre fue de miles a fin de completar el millón. Sin embargo, resultaría más efectivo para frenar la contaminación y el cambio climático que se cancelaran las concesiones para las famosas pedreras de constructoras, digamos como JISA o Real del Bosque, que generan exposición de polvos en el ambiente Saltillense y enferman a la población. Esa sí sería una loable labor, su majestad.