El rescate de la justicia

Durante los últimos días, en que la tragedia minera de Pasta de Conchos ha sido tema preponderante en la agenda nacional luego del anuncio del presidente Andrés Manuel López Obrador de que los cuerpos de los mineros fallecidos allí en febrero de 2006 serán rescatados, las preguntas no han parado de brotar (como sucede ante casi cualquier anuncio emitido desde la “cuarta transformación”). Y es que si bien se reconoce que se está atendiendo un justo y añejo reclamo, la primera interrogante que salta es: ¿se puede?

El empresario Germán Larrea, dueño de Grupo México y de la mina, respondió al Gobierno Federal que apoyaría la operación y proporcionaría los proyectos técnicos que en su momento se diseñaron para la búsqueda de los cuerpos, pero que no fue posible llevar a la práctica. Desde otra esquina, el obispo de Saltillo, Raúl Vera, señaló que si Andrés Manuel López Obrador de verdad quiere hacer justicia deberá enviar a juicio político a Grupo México y directivos de Pasta de Conchos. En el mismo sentido se expresó la activista Cristina Auerbach, con quien conversé el miércoles en el programa Contrapunto de Noticieros GREM, quien sostuvo que la única forma en que Grupo México podría apoyar el rescate es renunciando a la concesión de la mina.

La activista subrayó que el rescate de los cuerpos no supone en sí mismo una conclusión del caso, sino que apenas representa la primera y más elemental condición necesaria para llegar a una “solución amistosa”, pues la Corte Interamericana de Derechos Humanos está próxima a emitir su sentencia; en ese contexto, la disposición del gobierno de AMLO envía un mensaje de tranquilidad a las familias, quienes en lo que no están de acuerdo es en una eventual intervención del líder minero Napoleón Gómez Urrutia pues, a decir de Auerbach, el actual senador fue parte del problema, además de que sólo representaba a 25 de los 65 mineros fallecidos.

¿Qué cambios hubo en la situación de los trabajadores de minas a raíz de la tragedia? La integrante de la organización Familia Pasta de Conchos recordó que al interior de la Secretaría de Trabajo y Previsión Social fueron despedidos 14 inspectores y dos subdelegados, la oficina de Sabinas se convirtió en una subdelegación y ella fue habilitada por orden de la Organización Internacional del Trabajo para estar presente en las inspecciones. Y si bien continúa la corrupción, el coyotaje y la operación de minas clandestinas, Cristina Auerbach aseveró que un cambio significativo que se observa es que los trabajadores ya no están dispuestos a morir en las minas y han alzado la voz denunciando abusos y precariedades.

El año pasado, el informe “El carbón rojo de Coahuila: Aquí acaba el silencio”, elaborado por Familia Pasta de Conchos y la fundación alemana Heinrich Böll, reveló que desde 1900 a 2006 los mineros fallecidos en el estado sumaban 3 mil 103: el 43.6 por ciento murió en minas de carbón y del total sólo la mitad contaba con seguridad social.

Rescatar los restos de los 63 mineros que quedan en los túneles colapsados de Pasta de Conchos pudiera, efectivamente, significar un paso hacia la justifica; por lo menos ello permitiría a las familias de los trabajadores fallecidos cerrar una de las tantas heridas abiertas al poder despedirlos con dignidad. Sin embargo, una operación de tal naturaleza implica elevados riesgos y costos económicos. La postura más escéptica –y quizá insensible– ha sido la de algunos diputados de oposición que han cuestionado si vale la pena buscar e identificar restos que seguramente están pulverizados y que, por ende, implicarán años de trabajo. El presidente Andrés Manuel López Obrador está en Coahuila este fin de semana. Ojalá que, desde el mismo escenario de la catástrofe, pueda resolver algunas de las muchas inquietudes que hay sobre la promesa del rescate, pero también sobre el drama que se sigue viviendo, producto de negligencias y corrupción, en la Zona Carbonífera del estado. Ojalá que la intención de rescatar los restos de Pasta de Conchos signifique el rescate de la justicia en una de las mayores tragedias de la historia reciente de Coahuila.

@manuserrato