Juez ordena investigar a funcionarios por tortura contra Francisco “N”, presunto asesino de Gabriela

A raíz de una solicitud de la defensoría pública de Francisco “N”, vinculado a proceso por los delitos de secuestro, feminicidio e inhumación ilícita contra Gabriela N, la juez del caso, solicitó a la Fiscalía del Estado iniciar una investigación por tortura y malos tratos que habrían cometido agentes de la policía investigadora durante la primera detención del imputado. 

Dicha solicitud, fue admitida por la jueza, dado que de acuerdo con la narrativa de los hechos desde que desapareció Gabriela el pasado 11 de agosto, Francisco Jordan “N” fue detenido dos veces, y en la primera de ellas ocurrieron una serie de irregularidades, que incluso la hicieron llamar al Mecanismo Nacional para Prevenir y Sancionar la Tortura de la CNDH.

En la detención que dio lugar a la apertura de la investigación, de acuerdo con su defensora, Francisco fue detenido luego de ponerse nervioso y lesionar a un policía mientras los acompañaba a realizar la diligencia del cuerpo de Gabriela; sin embargo, en ese momento no hubo una puesta a disposición a solicitud del ministerio público, sino que fueron los propios policías investigadores quienes lo llevaron a un sótano de la Fiscalía del Estado donde fue torturado para dar declaraciones sobre el caso.

De acuerdo con la versión, inicialmente esta detención se habría hecho por motivos de lesiones contra el policía; sin embargo, mientras permaneció en el sótano, fue cuestionado sobre el caso de Gabriela en específico, sin respetar sus derechos adheridos al sistema de justicia penal, donde se establece el derecho a un abogado. 

Tras presentadas dichas irregularidades, la juez tomó la determinación de que la Fiscalía Especializada en Delitos Cometidos por Funcionarios Públicos del Estado, debe iniciar una investigación contra tres elementos que pudieron haber empleado la tortura como un mecanismo para obtener información.

Esta detención, se realizó incluso antes de que la juez liberara una orden de aprehensión en su contra, como la que sí se emitió esta vez que le dictaron vinculación al proceso por los tres delitos, siendo el secuestro y la inhumación los más discutidos por la defensa y por el propio Francisco, quien dijo: “La puerta se abre por dentro”, haciendo referencia a que Gabriela estaba encerrada por voluntad propia. 

En Coahuila, el delito de feminicidio, según el artículo 188 se castiga con hasta 50 años de prisión, mientras que el secuestro con agravante, por vínculo de confianza, la pena máxima es de 7 años de cárcel.

La muerte de la joven se sumó a los 20 feminicidios registrados de enero a julio de este año, que ya superan a los 12 cometidos en el Estado en todo el 2018, según las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Sobre el crimen de ayer, se informó que el hallazgo de los restos movilizó a elementos e la Agencia de Investigación Criminal, de la Fiscalía General del Estado, a la colonia Valencia.

Aunque las autoridades han sido herméticas, se señaló que la víctima podría ser Gaby y que su pareja Joshua, de 26 años, ya está asegurado como sospechoso del homicidio.

El 24 de agosto la Fiscalía obtuvo datos de que el cuerpo había sido mutilado y que los restos fueron colocados en bolsas de basura, para luego ser sepultados en un baldío cerca de su domicilio.