Muestra incapacidad módulo para canje de placas de Saltillo
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Cientos de personas esperan por más de tres horas para ser atendidas.
Larga espera, falta de sillas, caída constante del sistema y una evidente falta de organización es lo que deben soportar los contribuyentes que acuden al megamódulo del libramiento Óscar Flores Tapia por sus placas y/o a pagar sus derechos vehiculares.
Su capacidad ha sido rebasada de manera sorprendente. Pese a las constantes quejas ciudadanas que exhiben la falta de organización en el sistema de cambio de placas, el trámite continúa siendo tedioso y se convierte en una odisea para quien acude.
El megamodulo que se abrió con la intención de darle agilidad al trámite, se ha visto rebasado, pues incluso, la gente termina sentándose en el suelo, ante la falta de sillas en la sala de espera improvisada.
Alfonso González Ramírez, contribuyente cumplido que aprovechó el descuento anunciado durante el mes de diciembre, consideró que el trato para los ciudadanos debe mejorar, pues afirmó que su espera era ya de más de tres horas, y aún no concluia el proceso.
“El beneficio que deberíamos obtener además de un descuento, es un buen servicio, tenemos aquí un promedio de tres horas y media, hay varios incidentes que son resultado de la no planeación”, se quejó el entrevistado.
Este viernes, se pudieron observar acciones improvisadas del personal, que cinco horas después de abrir el modulo, trataba de echar a andar las computadoras, hecho que debía ser considerado antes de inicio de actividades.
Ante la tardía respuesta, la molestia de la gente no se hizo esperar, y la sacaron a flote mediante chiflidos y gritos de desesperación, pues muchos de ellos llevan menores de edad que también deben vivir la odisea.
“Es un problema de servicio, de falta de planeación y comunicación con los usuarios, si ya tienen tres días dando el servicio ya deben tener consideradas las capacidades que se ofrecen”, añadió González Ramírez.
Otro de los problemas que se presentó durante la espera de Alfonso, fue la falta de papel para impresión de los documentos, hecho que retrasó aún más el trámite de placas.