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Cae presupuesto de ciencia y tecnología en Coahuila; asociaciones mantienen esperanza para niños y niñas
Ante los conflictos del presupuesto público, profesionistas de Coahuila se unen para simplificar el lenguaje científico y llevarlo a estudiantes. Tienen la convicción de que, cuando se quiere promover algo en la sociedad, se debe ir directamente con la infancia, cuya mente abierta la hace receptiva al conocimiento
- 17 octubre 2022
Vivimos en una sociedad profundamente dependiente de la ciencia y tecnología y en la que nadie sabe nada de estos temas. Ello constituye una fórmula para el desastre, fueron las palabras de Carl Sagan, científico estadounidense que revolucionó la televisión pública con el programa Cosmos, dedicado a explicar la ciencia y las complejidades del universo.
El programa registró millones de espectadores en la década de los 80, años en los que aún existía resistencia a estos temas por la dificultad de los términos, procesos y acceso a la información.
Sin embargo, Sagan logró transmitir de manera sencilla temas complejos. La serie llegó a los hogares, inspiró y creó vocaciones científicas.
Actualmente en Coahuila, la historia se repite: grupos de profesionistas se unen para simplificar el lenguaje científico y llevarlo a los niños a través de juegos.
Ejemplo de este trabajo es la Asociación Murciélagos y la Red de Divulgación Científica del Norte de México conformada por profesionistas de todo el estado.
Una de las razones por las que nacieron fue la necesidad de más programas de divulgación y presupuesto.
“Lo que hicimos fue decir: no nos vamos a detener, y organizamos las fiestas de traje: ‘Tú traes la sede, tú traes materiales, tú, el coffee break, el público’, y así es como le hacemos y está mucho mejor porque incluso hemos tenido más público”, platica la directora de la Red de Divulgación Científica, Martha Ramírez de la Fuente.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía reporta que Coahuila tiene 877 mil 124 niños, que representan el 28 % de la población.
De acuerdo con los presupuestos de Egresos del Estado, de 2018 a 2022 el recurso para programas de Ciencia y Tecnología bajó 26%. Para este año es de 10 millones de pesos.
Dentro de los programas financiados con recursos públicos para fomentar la ciencia están las aulas lego y fomento de vocaciones del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología (Coecyt).
A nivel federal el acceso a recursos públicos se encuentra en conflicto. Se realizaron cambios al Reglamento del Sistema Nacional de Investigadores en donde el requisito para obtener financiamiento es ser parte de una institución pública de educación superior o del sector público. Esto afectó a mil 600 personas que laboran en universidades privadas.
La lucha para que se dé marcha atrás se llevó al plano legal a través de juicios de amparo.
Ante este panorama complicado para la ciencia y tecnología es que se realizan nuevas formas colaboraciones. Ya sea con recursos públicos o con autofinanciamientos, la labor de divulgación no para. El objetivo es que los niños conozcan el entorno donde viven y aprendan a cuidarlo para que la calidad de vida de todos mejore.
En estos talleres nadie se queda fuera. Se observan alumnos desde los dos años y también están adaptados para niños con capacidades diferentes.
¿QUÉ ES LA CIENCIA?
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, la ciencia es una herramienta que nos ayuda a comprender el mundo y a enfrentar desafíos, hallar soluciones a problemas, entre ellos de salud, medioambientales o sociales.
Gracias a la ciencia podemos vivir más, aliviar dolores, enfrentar pandemias y problemas de disminución del agua o aumento de temperaturas.
Sin embargo, el arraigo a supersticiones y prejuicios complica el acercamiento a la ciencia.
La presidenta de la Red de Divulgación Científica del Norte considera que en México es muy pobre el interés por la ciencia.
“Hubo una publicación que es preocupante, porque dice que la mayoría de los mexicanos sentían miedo al ver un científico”, dice Martha Ramírez.
Atribuye este miedo a la falta de criterio científico que se logra a través de la divulgación.
Fue en 2011 que la encuesta sobre la Percepción de la Ciencia y Tecnología en México reveló que el 86% los ciudadanos encuestados confiaban más en su fe que en la ciencia. Y ante enfermedades optaban por no acudir al doctor. Para tratar la enfermedad se realizaban “limpias”.
Martha Ramírez lamenta esta percepción y confía que el trabajo de divulgación se amplíe y cambie la percepción.
En la encuesta más reciente publicada en 2017, ya se consideró a los científicos dentro de las cinco profesiones con más respeto. El primer lugar lo obtuvieron los bomberos.
“Los mexicanos piensan que los científicos van a causar daño y se nota la falta de familiaridad con el científico. Creen que estamos en un laboratorio haciendo cosas para dañar a la población y, al contrario, estamos buscando soluciones a problemas”.
LA DIFUSIÓN NO ES DIVULGACIÓN
Dar a conocer los temas científicos es una labor que requiere del dominio del tema, pero la disposición no es suficiente, pues hay que adaptar la información a un público ajeno a los términos.
La presidenta de la Red de Divulgación indicó que dentro del marco del sistema de investigadores piden que se realice divulgación.
A lo que están acostumbrados científicos, platica, es a realizar difusión, es decir, no se trasladan al mundo del público en general. Al público que no está inmerso en la ciencia.
Martha Ramírez explica que la difusión se refiere a esa comunicación entre pares. Los físicos hablan con los físicos, les comunican sus ideas en congresos o semilleros de investigación, pero estamos en un entorno de gente que habla el mismo lenguaje.
“En cambio, la divulgación, su objetivo es llegar a un público en particular como niños y hablar sobre bioquímica. Y la gente se puede preguntar, ¿cómo se le puede hablar a un niño de bioquímica? Pues sí se puede, pero se logra mediante una comunicación efectiva. Se va a diseñar una actividad dedicada al niño”, explica Martha Ramírez.
Cada grupo de divulgación tiene un público en particular, expone. El ejemplo más digno de divulgación es Carl Sagan, reconocido en todo el mundo por su serie de televisión llamada Cosmos. Programa en donde cualquier persona que lo veía entendía lo que platicaba.
“Porque es eso, les estamos platicando sobre descubrimientos, pero llevándolo a un idioma coloquial”.
FORMACIÓN DEL CRITERIO CIENTÍFICO
Cuando una persona accede al conocimiento entiende que no es un tema que solo interesa a quienes están en un laboratorio. Descubre que forma parte de su vida diaria, se forma el criterio científico y despierta la conciencia sobre su entorno y la importancia de preservarlo.
Rafael Carrillo Flores, quien es catedrático de la Universidad Autónoma de Chapingo y quien participó en la Mesa Redonda de divulgadores, el 28 de septiembre, explicó que lo primero que se requiere es vencer el ego del conocimiento y transmitir la información.
“El conocimiento es universal. No es de nosotros. Nosotros lo podemos generar, pero si yo me lo guardo no genero ningún beneficio... y que mejor que la sociedad se empodere de ese conocimiento y de los procesos”, expresa.
EL IMPACTO DEL CRITERIO CIENTÍFICO EN LA PANDEMIA
Para Martha Ramírez, la falta de cultura científica fue evidente en la pandemia por Covid 19.
“Aquellos que tenían cultura y criterio científico para tomar decisiones fueron los que se vacunaron. Fueron los que permitieron que esta pandemia impactara menos”, expone.
E indica que gracias a quienes se vacunaron se ha podido enfrentar a la pandemia en un tiempo récord de tres años.
“El criterio científico es la toma de decisiones con fundamentos bien certeros, consolidados”, dice.
Durante el inicio de la jornada de vacunación contra el Covid 19, la Secretaría de Salud dedicó ruedas de prensa a explicar los beneficios. Incluso el 20 de abril de 2021, el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador recibió la dosis de manera pública.
“No duele, ayuda mucho, nos protege a todos”, dijo para generar confianza en la población y accedieran a la aplicación.
LAS FIESTAS DE LA CIENCIA
“En mi trabajo soy divulgadora, pero mi hobbies también es ser divulgadora”, expresa Martha Ramírez.
La Red de Divulgación Científica del Norte de México nació el 6 noviembre del año pasado.
Aprovecharon la reunión de ExpoCiencia y ahí celebraron su primera reunión.
Los talleres se realizan desde febrero de este año. Cada mes participan entre 200 y 300 niños.
El camino no ha sido fácil pues explican que colegas presentan dificultades para pasar de un congreso a tomar una plastilina y explicar lo que es una célula. Pero estas dificultades se vencen a través de la capacitación y la colaboración.
En cada evento de talleres participan alrededor de doce profesionistas, pero la red se integra por poco más de 40 personas de Coahuila y de la región Laguna de Durango.
Al ser una red independiente ellos mismo financian sus actividades. Se apoyan con instituciones educativas para el uso de instalaciones y material.
LAS ACTIVIDADES QUE REALIZAN
La red de Divulgación tiene grupos de niños que van desde los 2 años. Les enseñan a lavarse las manos.
Rafael Carrillo Flores explicó que no es solo enseñar el lavado de manos, como una actividad simple, sino lo que hay detrás de esta
práctica.
“Piensan que es solo sentir fresco, pero es enseñarles que en las manos hay gérmenes. ¿Y qué tal si el niño lo ve en un microscopio? Se le enseña que ese germen le puede hacer daño, pero que también hay otros que lo ayudan”, explica el catedrático.
Agrega: “Entonces no es ver a los gérmenes como algo malo, sino como parte de la naturaleza y que convivimos con ellos”.
CUIDAR DE NUESTRA CASA
En 1977, la Nasa lanzó la sonda espacial Voyager. Para 1990 se reportó un recorrido de 6 mil millones de kilómetros. En ese año decidieron voltear la cámara y se logró captar a la tierra. Un punto brilloso al que Carl Sagan llamó “un punto azul pálido”.
Esta fotografía inspiró reflexiones en el científico quien dijo: “Se ha dicho que la astronomía es una experiencia de humildad y formación de carácter. Quizás no haya mejor demostración de la locura de los conceptos humanos que esta imagen lejana de nuestro diminuto mundo. Para mí, subraya nuestra responsabilidad de tratarnos con más amabilidad y de preservar y cuidar el punto azul pálido, el único hogar que hemos conocido”.
Para Sagan el conocimiento de nuestro entorno despertaba la conciencia de preservar el lugar donde vivimos y han vivido todos los seres que queremos.
Una invitación a cuidar de nuestra casa. Los talleres impartidos en Coahuila no se alejan de esta reflexión. Se imparten talleres como el cuidado del agua, realización de bloqueador solar, producción de alimentos sanos, los microorganismos que pueden limpiar al mundo, y preservar los suelos sanos.
EDUCACIÓN AMBIENTAL
Los niños de la región lagunera participaron en los talleres de la semana de Educación Ambiental realizados en el mes de marzo.
La Sede fue el Centro de Estudios Tecnológico Industrial y de Servicios número 59, en donde se habló el problema del arsénico.
La conferencista Daniela Montserrat Sánchez Pérez, del Instituto Nacional de México, campus Torreón, explicó el impacto del arsénico en La Laguna ya que es un problema que se tiene en la región y causa enfermedades como cáncer de piel.
Además, expuso que en esa región hay una sobreexplotación de agua a causa de la agricultura, ya que es la principal actividad económica y genera que haya más concentración de arsénico.
“En pozos más profundos jalamos más metales pesados... estamos en un riesgo latente por concentración de arsénico”, les explicó la científica quien también les mostró que desde la ciencia se trabaja en una solución de fácil acceso, pues desarrollaron un polímero, con material de bajo costo para remover el arsénico.
En otras de las conferencias se les habló del impacto de las actividades humanos en el cambio climático.
La doctora Natalia Belén Ortiz, de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro, habló de una de las causas. Entre los ejemplos citó el desarrollo industrial ya que al incrementar el uso de energía generó residuos como el dióxido de carbono lo que a su vez es uno de tantos gases que inciden en el incremento de temperaturas.
Para evitar este problema les recomendó actividades como apagar la luz que no están ocupando y desconectar los electrodomésticos que no se utilizan.
Otros de las actividades que se realizaron en la primera semana de Educación Ambiental fueron los talleres de Huertos Familiares, Elaboración de Cosméticos Ecológicos, Luz de Estrellas y Tratamientos de Aguas Residuales.
LA CIENCIA ES PARA TODOS
Por complejos que parezcan las conferencias y talleres, todos se adaptan para niños con capacidades diferentes.
La Asociación Murciélagos tiene 9 años trabajando con niños con debilidad visual.
Desde pequeño, Gerardo Sotelo aprendió a convivir con personas sin discapacidad visual y la ha dedicado parte de su vida adulta a impartir talleres y a capacitar a colegas para llegar a nuevas comunidades.
Sotelo estudió una licenciatura en Psicología y es fundador del equipo de futbol Murciélagos de la Laguna.
Su interés por la ciencia surgió en su edad adulta, aunque relata que le hubiera encantado iniciar desde niño.
Es mentor Steam. En 2019 se integró a Desert Eagles, equipo de robótica. Al año siguiente se convirtió en mentor de inclusión donde imparte cursos para el trato de personas con discapacidad en el programa docentes extraordinarios para las áreas de ciencia, tecnología e ingeniería.
APRENDER A CONVIVIR
Gerardo Sotelo tiene cuatro años en la divulgación de la ciencia y tecnología para personas con y sin discapacidad visual.
Fue en 2019 que se reunió con científicos para compartir su trabajo. Ahí nació el interés por los talleres. Le compartieron la forma en que trabajan con niños sin discapacidad.
“De ahí sale la espinita de cómo adaptar clases de robótica, de ciencia, y todas estas cosas para un niño con discapacidad visual y de ahí nace un vértice en Murciélagos para enfocarnos en enseñar las áreas de la ciencia, tecnología, artes, matemáticas adaptadas”, explica.
La respuesta no tardó. En los talleres asisten hasta 60 personas. Indica que en la región lagunera hay 33 mil personas con discapacidad visual.
“Es impresionante saber que muchos pequeños se quedan con sus estudios truncos por la falta de oportunidad y es lo que a nosotros nos llamó la atención y sentimos este llamado para que a través de la ciencia adaptada poder servir a la sociedad”, comenta.
EL PRIMER OBSTÁCULO
Al hablar de niños con discapacidad, Gerardo Sotelo comenta que los padres suelen sobreprotegerlos.
“Definitivamente hemos tenido que hacer una ardua labor de convencimiento porque el niño puede estar lo más interesado posible, pero si al papá no le llama la atención o piensa que no le va a servir, lo dejan de llevar”, relata.
Sotelo comenta que cuando se tiene un hijo con discapacidad el principal temor es la seguridad.
A lo largo de su carrera como tallerista se ha topado con frases como: “es que mi hijo no va a poder, no está preparado, no sabe, o incertidumbre por el acompañamiento dentro de las clases”.
El primer reto es mostrar a los padres la importancia de la ciencia en la vida diaria.
“Pueden pensar que no les va a servir esta parte de la ciencia, pero ya cuando llegan a la adolescencia y entran a la secundaria, a la preparatoria o que quieren llegar a una universidad es cuando se arrepienten. Nuestra labor es convencerlos para que desde pequeños los lleven”, dijo.
En la clase de robótica se cuenta con niños desde los seis años. A través de los legos se forman los robots y los niños sienten e imaginan.
Aunque un lego tiene un costo aproximado de 10 mil pesos, a través de los patrocinadores se hace la adquisición y la clase es gratuita.
INTEGRACIÓN PARA EL APRENDIZAJE
Gerardo Sotelo busca acercar a los niños con debilidad visual a la ciencia en un entorno incluyente donde puedan aprender con niños que no tienen esa debilidad.
Relata que este año concluyeron un taller que tuvo una duración de seis meses.
“Aprendieron de robótica juntos para fomentar el verdadero sentido de inclusión, porque muchas veces hablamos de inclusión educativa y nos topamos con que separan a los niños con discapacidad y lo que nosotros buscamos es que aprendan juntos”, comentó.
Al igual que los científicos de la Red de Divulgadores del Norte de México, la asociación Murciélagos coincide en que la difusión de la ciencia en niños es la mejor inversión que podemos hacer como sociedad.
“Son más abiertos y perceptivos. Son como una esponja”, dijo Sotelo por lo que resaltó que las alianzas entre colegas ha sido clave para realizar esta divulgación.
PRESUPUESTO LIMITADO
En Coahuila, se cuenta con presupuesto para programas de ciencia y tecnología, pero este pasó de 13 a 10 millones de pesos en los 5 años recientes.
Para la divulgación se cuenta con el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología. Dentro de las actividades hay programas dirigidos a niños. La más reciente se realizó en Torreón y fue la Ceremonia de Premiación de la Feria de Ciencias y Creatividad. Esta feria se realizó en cada región de la entidad.
En solicitud de información la Subsecretaría de Educación Básica no detalló programas, pero aseguró que dentro de la formación de los niños se promueve el desarrollo académico en actividades de ciencia y tecnología.
PEQUEÑAS ACCIONES
“...no hay ningún indicio que la ayuda vendrá de alguna parte para salvarnos de nosotros mismos”, dijo Carl Sagan al invitar a la población a cuidar el planeta en que vivimos.
Para Martha Ramírez la colaboración entre la comunidad científica y el gobierno es necesaria para llegar a mayor público y hacer posible la formación de una cultura científica.
Por su parte Gerardo Sotelo llama a la población a realizar acciones que faciliten la inclusión y el desarrollo.
“El panorama se puede tornar muy complicado, pero cambia cuando nos disponemos como personas a brindar lo mejor. Pequeñas acciones hacen la diferencia”, reflexiona.