Urgen legisladores de Coahuila a armar campaña preventiva contra los golpes de calor
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Del 19 de marzo al 22 de junio de este año murieron 112 personas por golpe de calor en México, un 166% más que las fallecidas por ese motivo en el mismo periodo del año pasado, cuando se reportaron 42 decesos, por lo que los diputados solicitaron a la Secretaría de Salud realizar una campaña de prevención y recomendaciones para el cuidado de la salud.
Asimismo, debe informar sobre los síntomas del golpe de calor y qué medidas deben tomarse para evitar consecuencias graves en las víctimas.
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Si se compara con el 2021, en que murieron 33 personas por golpe de calor en el país, el repunte fue del 239%, de manera que la cifra del 2023 es la más alta, por lo menos desde el 2020.
Del total de defunciones de este año, el 92.9% (104) estuvieron asociadas al golpe de calor y el 7.1% (8) fueron por deshidratación. El grupo de edad que registró el mayor número de decesos fue de 65 años y más, con 82 casos; entre los 45 y 64 años reportaron 18 muertes, y entre los 25 y 44 años registraron 9 fallecimientos.
En la tercera ola de calor, Nuevo León reportó 64 muertes, Tamaulipas 19 y Veracruz 15, para acumular el mayor número de decesos. Con corte al 28 de junio, Coahuila registraba ocho decesos en las regiones Centro, Norte y Carbonífera, con 77 casos de golpes de calor
La diputada Mayra Valdés González señaló que las altas temperaturas han prevalecido en Coahuila y en el resto del país, superando los 30 grados y la ola de calor es consecuencia del cambio climático; además, en las zonas urbanas la sensación térmica es de tres a cuatro grados más por el fenómeno conocido como “isla de calor”, porque los materiales de construcción absorben el calor durante el día y lo liberan durante la noche, manteniendo la temperatura más alta de lo normal.
”Según la Organización Meteorológica Mundial, la batalla contra las olas de calor está prácticamente perdida, incluso, si logramos reducir significativamente las emisiones contaminantes, se prevé que las olas de calor continúen siendo un problema importante al menos hasta el 2060.
”Significa que tendremos que lidiar con las consecuencias de las olas de calor, como el aumento de las muertes por golpe de calor, el deshielo acelerado del Ártico y los devastadores incendios forestales, sequías, huracanes que obtienen su energía destructiva del calor presente en los océanos”, apuntó.
La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica advierte que esta energía se manifestará de múltiples formas y debemos estar preparados para sorpresas climáticas.