Jorge Vilda dice que sí, pero no... Admite que habló con el hermano de Jenni Hermoso

MADRID.- La mañana de este martes, el exdirector técnico de la Selección Española de fútbol femenil, Jorge Vilda, compareció ante la Audiencia Nacional de España para brindar su declaración en torno a los hechos que lo señalan por participar en la coacción hacia la futbolista Jennifer Hermoso en el Caso Rubiales.

Cabe mencionar que Vilda llegó a la audiencia después de que se filtrara al 100% la declaración de la víctima a la prensa.

En su declaración, Hermoso había señalado a Vilda de acercarse a hablar con su hermano e intentar convencerlo de que la jugadora hiciera una declaración a los medios para calmar las aguas que se volvieron turbias por el beso que Luis Rubiales le dio la noche del 20 de agosto, cuando La Roja se proclamó campeona mundial en Sídney.

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Sin embargo, aunque Vilda reconoció que sí habló con el familiar de la española en el avión de vuelta a España, dijo que esa acción no tuvo nada que ver con un mandato del expresidente de la RFEF Luis Rubiales, sino que, lo hizo por “motu proprio” (iniciativa propia).

Lo anterior, justificando que quería “bajar el suflé” porque notó a Jenni “nerviosa y agobiada” razón por la que, además, no quiso acercarse a ella.

Con respecto al momento en que le dio Rubiales el beso a Jenni Hermoso, el exseleccionador ha sostenido que no lo vio, si bien ha reconocido que notó una diferencia entre el ambiente que había con las jugadoras en el estadio en el que se jugó la final y el que había luego en el avión de vuelta, que ha dicho, era más tenso, y fue en ese momento en el que vio que la del jersey número 10, estaba mal.

VILDA ESTUVO ‘MERODEANDO’ POR EL AVIÓN

Hermoso también había argumentado que el exDT estuvo dando vueltas alrededor del avión en múltiples ocasiones. Se especuló que esto fue porque Jorge estaba esperando que el hermano de la futbolista despertara y así poder hablar con él.

Al respecto, el hombre de 42 años dijo que al tratarse de un vuelo de 24 horas en el que también viajaba su hija -que se había puesto enferma- estuvo dirigiéndose varias veces a la zona del avión donde iban los familiares “para ver cómo se encontraba”.

Posteriormente, aclaró que durante el viaje estuvo sentado detrás de Rubiales y que presenció y escuchó reuniones en el avión, en las que se hablaba del beso pero que no intervino en ninguna.

Es importante recordar que en su declaración, Rubiales afirmó que Jorge Vilda se acercó con el hermano e incluso, citó las palabras que el mismo exseleccionador le dirigió:

“Yo no sabía ni que el hermano venía en el avión. Yo me enteré después porque Jorge Vilda, que venía sentado detrás mía me dijo: ‘Vengo de hablar con el hermano de Jenni, que es un tío razonable y tal, y va a hablar con ella (sic)”.

RUBÉN RIVERA TAMBIÉN SE INVOLUCRÓ

Otro de los investigados por las presuntas coacciones, el director de marketing de la Federación Española de Fútbol (RFEF), Rubén Rivera, también negó haber presionado a Hermoso afirmando que él solamente era un tipo de mensajero; un “corre, ve y dile” o un “recadero cualificado” de la federación.

Dijo que se limitó a transmitir a la jugadora que había ciertas personas que la estaban llamando y que quería hablar con ella, pero que no sabía ni para qué.

Rivera fue quien se encargó de organizar el viaje a Ibiza debido a que ese era su cometido, así como lo era conseguir lo que las jugadoras pidieran, como ropa, bikinis o entradas a alguna discoteca.

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Hermoso había dicho que Rubén llamó a una de sus amigas -que ya declaró como testigo- y le pidió que la convenciera de hablar con Albert Luque, el director de la Selección Masculina.

Según Rivera, la charla era para hablar de los detalles del viaje.

Negó haber recibido instrucciones de Rubiales o de Luque, quien está citado para comparecer el próximo 16 de octubre, y que se limitó a decirle que tenía su teléfono apagado, que la estaban llamando.

Vilda, Rivera y Luque debían comparecer en un primer momento como testigos, pero el juez cambió su condición procesal a la de investigados tras oír los testimonios del hermano y de una amiga de Jenni Hermoso, que confirmaron las presiones recibidas para justificar el beso que Rubiales le dio en la boca en la entrega de medallas tras conquistar el mundial.

Con información de EFE