El PEF 2022 y la seguridad nacional: La historia de la cual el Presidente no quiere que hablemos
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La semana pasada se aprobó, sin cambiarle ni una coma, el Presupuesto de Egresos de la Federación, mejor conocido como el PEF. El PEF es la guía de la política pública, es mucho más que un papel con números y letras, representa las intenciones reales del gobierno federal para el año que entra, tal cual lo que planea hacer o no hacer; así sin más ni menos, sin discursos o palabras bonitas. Este PEF 2022 no hace un esfuerzo por resolver los reclamos sociales de los últimos años: medicinas para las niñas y niños con cáncer, estancias infantiles, remodelación del aeropuerto de la CDMX, escuelas de tiempo completo, CONEVAL, CONACYT, entre otros.
Sin ser suficiente un PEF a modo de la 4T, López Obrador publicó en el Diario Oficial de la Federación (DOF) que toda la infraestructura estratégica sea considerada como seguridad nacional: Tren Maya, Refinería de Dos Bocas, Aeropuerto de Santa Lucía, por mencionar algunos. Textual el decreto publicado en el DOF dice: “infraestructura de los sectores comunicaciones, telecomunicaciones, aduanero, fronterizo, hidráulico, hídrico, medio ambiente, turístico, salud, vías férreas, ferrocarriles en todas sus modalidades energético, puertos, aeropuertos y aquellos que, por su objeto, características, naturaleza, complejidad y magnitud, se consideren prioritarios y/o estratégicos para el desarrollo nacional”. En otras palabras, López Obrador, con este decreto (lo hizo él, lo publicó él, no pasó por ningún otro lado), puede hacer seguridad nacional cualquier cosa que considere que entra ahí.
Seguridad nacional, se utiliza en general para temas que tienen que ver con la integridad de ciertos funcionarios públicos claves o compras que la información que contienen podría vulnerar espacios estratégicos para el País. Por ejemplo, los tipos de armas, equipo de comunicación, software para análisis de bases de datos (pasaporte, delincuentes).
No olvidemos que ese dinero no es del Presidente, es de todas y todos como ciudadanos. Se supone que cómo se gasta el dinero depende de un gran esfuerzo de diagnóstico y análisis de las problemáticas políticas. Entonces, ¿por qué considerar como seguridad nacional o secreto los proyectos más importantes de la 4T, que además son totalmente públicos?, ¿Tren Maya?, ¿Dos Bocas?, ¿Aeropuerto de Santa Lucía? Todas y todos sabemos qué son, dónde están, lo único que ahora nos dirán cuánto costarán exactamente y a quién se lo pagarán.
Lamento informarle, señor Presidente, que los megaproyectos no son seguridad nacional, todo lo contrario, cuando se gastan esos montos de dinero público debe estar al escrutinio de todas y todos. ¿Será por eso por lo que le dio la administración y la implementación de esos proyectos al Ejército desde el principio? No se preocupe, aunque no nos quiera decir, lo seguiremos preguntando hasta que nos dé una respuesta. Es nuestro trabajo como Ciudadanos de Tiempo Completo.
Nota. Esta semana el Banco de México cambió sus expectativas de inflación y PIB para el 2021. La inflación esta semana cerró en 7.02 por ciento, la más alta en 20 años y el dólar cerró en 21.60 pesos en algunas instituciones financieras. El panorama económico no está bien, lo hemos visto en nuestros bolsillos haciendo la despensa. Prepárense para un arranque de año 2022 con menor capacidad de compra y por ende, menor flujo de efectivo. Preguntemos a las personas mayores de 60 años si eso no les recuerda a algo o alguien. Me suena a que esta historia ya la vivimos, ¿será que seremos capaces como país de no repetirla? Sin duda, el tema para el 2022 es el económico.