Hablemos de Dios 133: El Presidente sigue desviando la atención
COMPARTIR
TEMAS
¿Cuándo se hizo usted estas preguntas señor lector? Todos, creo que todos los humanos nos hemos hecho las siguientes preguntas que nos taladran la razón e inteligencia en las noches más altas. Ojo, no dije corazón y alma, no. Dije razón e inteligencia. Dios tiene que ver poco con la inteligencia y la razón y casi todo son los sentimientos y corazón.
De hecho, este es uno de los principales señalamientos que me enderezan varios lectores en esta saga de columnas y ensayos: ando buscando a Dios con la razón y las letras, no con la fe. No tengo otra manera de buscar a Dios. A mí, lo he dicho antes, Dios no me habla, ni me dice “ve y haz...”. Nada. Una amiga mía encendía una veladora cada vez que tenía un grave problema. Se la encendía a los santos de su devoción. Un día le recomendé que lo dejara de hacer. Una veladora lo único que puede atraer es un voraz incendio. Mi amiga me regañó y me dejó de hablar por un tiempo. Puf.
TE PUEDE INTERESAR: Violencia: Chilpancingo, más cerca de Ucrania
En fin, yo busco a Dios con la razón e inteligencia porque es la única manera que tengo de hacerlo. Si voy a rezar 43 Padres nuestros, la verdad, no siento nada. Si voy el domingo a una reunión con hermanos cristianos y me pongo a bailar y a gritar y a proclamar la llegada de su reino, pues ni llega el mentado reino y tampoco siento nada. Y por lo general, esa gente que va a misa católica o al templo cristiano el domingo, ponen cara de monjes y santos y dan la impresión de no romper un plato en su casa; pero el lunes lo más probable (no todos) le escamotean el sueldo a sus empleados, no les pagan el Seguro Social, aceptan los latrocinios de sus jefes mayores, no los denuncian, maltratan a su esposa y en fin, son lobos que los domingos tienen piel de cordero. Por esto ya no voy a ningún templo.
Me estoy desviando. Decía de las siguientes preguntas las cuales nos taladran en las noches altas: ¿Quién es Dios, para que me quiere aquí?, ¿quién soy?, ¿qué hago aquí?, ¿qué es lo importante en la vida?, ¿qué es hacer lo correcto?, ¿creer en Dios ayuda a hacer lo correcto? Sí, son las eternas preguntas de todo el tiempo y de todo lugar.
Dice uno de los evangelistas, Mateo, “Pidan y se les dará; busquen y hallarán; llamen y se les abrirá la puerta”. (Mateo 7.7) Y aquí vienen los reparos, ¿cuántas veces usted ha tocado la puerta, ha implorado ayuda, ha buscado y no, no pasa nada? Imagino, muchas ocasiones. Cientos de veces. ¿Usted se ha portado bien toda su vida, ha puesto la basura en su lugar, no ha mentido, no ha insultado a sus padres, paga a tiempo sus deudas, no roba en el pago a sus empleados, no maltrata a sus hijos?, ¿es usted de ellos?, ¿y qué ha pasado cuando usted ha tenido un problema y no, Dios no escucha? Dígalo honestamente lector, dan ganas de mandar todo por un caño. Caray, es válido. No somos divinos, sino humanos.
Eso de poner la otra mejilla nada más el maestro Jesucristo, el de Nazaret lo pudo hacer. Pero nosotros, simples y tristes mortales, tenemos pasiones, sentimientos, ira, euforia; es decir, nos corre linfa por las venas. Estamos vivos, no muertos. Pero, ¿a poco usted no reacciona ante lo siguiente? En el ajedrez político mexicano no obstante que el país arde, es literal, el Presidente de lengua de trapo, Andrés Manuel López Obrador, sigue desviando la opinión de casi todo mundo mediante su juego de la silla presidencial. E incluso, ya hasta puso a la contrincante a modo de Claudia Sheinbaum, la ahora panista Xóchitl Gálvez.
ESQUINA-BAJAN
Mientras asistimos impasibles y nos dejamos guiar por este teatro guiñol de poca monta, el país arde en todos los sentidos. Y claro, en política todo es viable con miras a obtener el voto de la ciudadanía. Fue el caso en días pasados de la morenista Claudia Sheinbaum, quien lució una prenda de vestir con la imagen de la Virgen de Guadalupe. Sin duda, una mercadotecnia a la cual quiere llegar a la población, al segmento de la población católica mexicana. Pero es eso, mera aerotecnia, sin sustento ni bagaje. Vaya e incluso me atrevo, sin fe alguna.
Y Claudia Sheinbaum, como su padrino López Obrador, sabe que el voto es afectivo no razonado. Se vota con la víscera del corazón, no con la inteligencia de la razón. Por eso de utilizar el icono de la Virgen de Guadalupe para conectar con un gran estrato de la sociedad mexicana. Los hermanos cristianos nos critican agriamente por lo anterior, por este tipo de alabanzas y adoración desmedida que le tenemos a la Virgen. Nos critican no sin cierta razón, que anteponemos muchas veces a la Virgen María o de Guadalupe en lugar de pedir favores y orar directamente con el maestro Jesucristo o con Dios.
Pero, ¿qué figura femenina es más grande a María, es que hay mujer más poderosa en el mundo. La hubo luego de ella. La hay hoy? Absolutamente no. Mi mamá siempre me decía: “Mira hijo, la Virgen María es intercesora, es la vía más rápida para que Dios te escuche. A ella nadie le niega nada”. Caray, palabras sabias que atesoro al día de hoy. Tal vez por este tipo de consejos y palabras me “logré”. Lo poco que hago en mi vida, tal vez por este tipo de educación y enseñanzas hoy estoy aquí escribiendo estas líneas en honor a la Virgen de Guadalupe y en crítica a la posición facilona de la política de cuarta llamada Claudia Sheinbaum.
LETRAS MINÚSCULAS
Pero, los hermanos musulmanes la aman más que nosotros, al parecer. Es la única mujer, sí, María, que tiene su propio Sura (capítulo) en el Corán.
Encuesta Vanguardia
https://vanguardia.com.mx/binrepository/1152x768/0c0/1152d648/down-right/11604/RPGF/jesu-s-r-cedillo_1-6026729_20230604171623.png