Se puede decir... Que se ha abusado del sexo “débil”.

Pero no se pude decir... Que con eso se ha ido muy “lejos”. Tan es así que hoy por hoy las asesinan con saña que ya no es posible que esos feminicidios sigan dando la nota roja en todos los medios, porque los agresores no las respetan y les quitan la vida, olvidando que, a la mujer, no se le debe de tocar ni con el pétalo de una rosa, pues esas son sólo palabras y más palabras, lo que significa que los criminales son personas “enfermas” mentales.