Pocas mujeres republicanas, muchos demócratas universitarios y jóvenes indecisos, ¿por quién votará Estados Unidos?
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Durante los últimos 25 años, el papel del género, la etnicidad, la escolaridad y hasta la religión en Estados Unidos se ha convertido en la línea divisoria más importante en la política.
Este año las elecciones se perciben como únicas, de hecho, hay cosas sin precedentes que han sucedido con la pandemia y el juicio político al presidente, pero si analizamos las tendencias a largo plazo, las cifras demuestran que hay factores demográficos que han influido desde varios años en las decisiones que se tomarán en noviembre.
El Pew Research Center, una organización apartidista que colecta y presenta estadísticas sobre los problemas y actitudes que forman al mundo, ha recopilado las opiniones de los votantes de EU a través de encuestas telefónicas durante 25 años.
En cada encuesta primero se les preguntó a los participantes "¿con cuál partido se identifica?"
De acuerdo con Bradley Jones, politólogo y especialista en perspectiva de opinión pública sobre política estadounidense, el 90 por ciento de los encuestados solían asociarse como republicanos o demócratas, pero en los últimos 20 años cada vez más personas se pronuncian como independientes.
Según datos del mismo Centro, hasta el 2019 el porcentaje más grande (34 por ciento) no tiene afiliación política, el 33 por ciento se identificó como demócrata y el 29 por ciento como republicano.
La educación es posiblemente el factor más interesante del estudio, pues este revela características de la personalidad de tanto liberales como conservadores.
Las cifras más recientes demuestran que 47 por ciento de las personas que no tuvieron educación superior son republicanos, pero entre los que sí estudiaron la universidad solo el 37 por ciento se identifican con el mismo partido.
En cambio, los votantes con grados más altos de escolaridad tienden a inclinarse hacia representantes liberales. El 57 por ciento de los votantes profesionistas se identifica como demócrata.
Bradley Jones dijo a VANGUARDIA que, según la información, definitivamente los votantes más jóvenes son más inestables en sus preferencias políticas.
“Lo que no podemos determinar aún es, si el factor causal sea recibir la educación universitaria, o simplemente el tipo de personas que terminan yendo a la universidad son el tipo de personas que de todos modos serían demócratas”, apuntó.
Parece ser que hay algo decisivo en el entorno político en el que alguien alcanza la mayoría de edad que tiene este tipo de huella duradera.
Pues Jones adelantó que se está trabajando en un análisis que estudia el partidismo general de los votantes basado en quién era presidente cuando cumplieron 18 años.
“Hemos visto que las personas que estaban llegando (a la mayoría edad) en la administración de Nixon con los escándalos de su renuncia tienen más probabilidades de ser votantes demócratas”, explicó.
La etnicidad tiene otro de los papeles más protagónicos. Entre votantes caucásicos se puede observar la mayor estabilidad en la afiliación política; en 1994 el 51 por ciento de los votantes blancos se identificaba como republicano; en el 2019 la cifra aumentó a 53 por ciento.
Los votantes negros se han asociado históricamente con el partido democráta, el 81 por ciento lo hacía en los 90´s y el 83 por ciento continúa actualmente.
En cuanto a los hispanos, los afiliados al partido conservador eran el 29 por ciento en el ‘94 y en el 2019 igual; los liberales eran el 57 por ciento en el ‘94 y en el 2019 el 53 por ciento.
Los americanos asiáticos han demostrado una variación destacable, pues en 1994 el 53 por ciento se identificaban como demócratas y el 33 por ciento como republicanos; en el 2019 en cambio, el 72 por ciento cambió a liberal y solo el 17 por ciento a conservador.
Si analizamos las diferencias de género observamos que las mujeres son más propensas a identificarse como demócratas que los hombres, con solo 38 por ciento afiliadas al partido republicano en el 2019, en contraste con el 50 por ciento de hombres.
Además parece que esta brecha influye en las probabilidades de que hombres y mujeres de distintos partidos se toleren pues, de acuerdo a otro estudio del mismo Centro realizado en el 2019, siete de cada 10 demócratas buscando una relación ni siquiera consideran una cita con alguien que votará por Trump.
La religión es otro elemento importante en la división política de EU. Los protestantes evangélicos blancos se han convertido en el grupo religioso republicano más sólido, al igual que los católicos blancos y mormones pero los protestantes negros, judíos y católicos hispanos se han mantenido constantes como demócratas.
