Pros y contras de los bebés "reborn"

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Los denominados reborn son muñecos hiperrealistas que causan sensación.
Madrid, España.- Su pelo ralo y sedoso es lana de mohair; la calidez de su piel se ha forjado tras varias capas de pintura sobre un cuerpo de vinilo; y los pequeños arañazos, rojeces y venitas, han sido añadidos por el artista para dotar a su creación de mayor verosimilitud.
Para que tengan esa apariencia tan real, me pongo como referencia fotos de bebés reales. Intento conseguir los tonos y los diferentes contrastes de la piel. Dedicando muchas horas, fijándote en un buen modelo y haciendo un trabajo minucioso se consigue este resultado, indica Beatriz Clemente, creadora de muñecos reborn.
Para hacer cada muñeco, Beatriz explica que compra un kit donde vienen la cabeza y las extremidades en color blanco. Los ojos están huecos y, si el bebé tiene los ojitos abiertos, los tenemos que añadir. Son ojos de cristal, parecidos a las prótesis, pero hechos especialmente para los bebés, comenta.
Además, la artista afirma que hay que insertar el pelo con una aguja y se hace uno a uno, lo que resulta muy laborioso.
Beatriz, que expone sus creaciones en la web http://www.mibebe-reborn.com/, dice tardar unas tres semanas en elaborar cada uno de los muñecos.
Prefiero dar una buena calidad aunque tenga que tardar un poquito más y no recibir tantos encargos, apunta.
LA ATRACCIÓN DE LAS MUÑECAS
No obstante, afirma que tiene una larga lista de espera y algunos de sus clientes aguardan durante ocho o nueve meses, e incluso un año entero, para obtener uno de sus reborn.
Respecto al precio, esta artista comenta que el coste mínimo de uno de sus muñecos es de unos 650 dólares. Esta es mi tarifa si el kit necesario para elaborarlo es sencillo, los materiales no son muy caros y el muñeco no tiene mucho pelo injertado, precisa.
Pero puede incrementarse en función del tamaño del reborn (si en lugar de ser como un recién nacido mide lo que un bebé de varios meses). También se encarece si el cuerpo entero es de vinilo en lugar de ser de tela o si la piel está arrugada, pues esto requiere hacer una capa final con un barniz especial, explica Beatriz. Con estos extras, el precio puede rondar los 1.400 dólares, según detalla.
Sin embargo, los precios pueden variar mucho en función de los artistas. En algunos casos, el coste de estos bebés tan especiales puede llegar a superar incluso los 4.000 dólares.
Quienes se interesan por estos muñecos hiperrealistas son, sobre todo, mujeres. De hecho, Beatriz solo recuerda haber recibido dos encargos de hombres. Uno era un chico joven que coleccionaba muñecas y estaba interesado en un prematuro, que era una edición muy especial de una escultora. El otro era el marido de la destinataria final. Ella estaba muy encaprichada con uno de los bebés y él se lo regaló por sorpresa, relata.
La artista afirma que, aunque prácticamente todas sus clientas son mujeres, no hay un perfil concreto en lo referente a la edad, a la personalidad y ni si quiera a la nacionalidad. Recibo encargos desde Colombia, Estados Unidos, México y España, señala.
Las interesadas son mujeres de todas las edades, desde señoras de 50 años hasta chicas de 30 o bien madres que quieren regalarle un reborn a su hija por su primera comunión. Son personas a quienes les gustan las muñecas y, en su gran mayoría, coleccionistas, destaca.
Efectivamente muchas mujeres sienten una gran predilección por las muñecas. En este sentido, la psicóloga Julieta París explica que las muñecas se convierten en un ancla al pasado, al tiempo de la infancia, donde no había responsabilidades, donde uno se siente seguro y las preocupaciones todavía no han llegado a nuestra vida.
La especialista indica también que todo niño se vincula de manera especial a un juguete pero, según va creciendo, ese vínculo queda en la intimidad, en el lugar de lo que fue, y el pequeño se vincula de esa misma manera con otras personas, como amigos o compañeros, e incluso con alguna mascota.
Asimismo, París comenta que es normal que una mujer adulta sienta nostalgia por los recuerdos o que le gusta una muñeca en concreto para sus hijos porque ella tenía una parecida. No obstante, el hecho de que le gusten las muñecas de manera obsesiva representa una regresión a una parte de la infancia no resuelta, por ejemplo, la seguridad.
GUARDERÍAS Y ADOPCIONES
En la controvertida comunidad reborn, no solo los muñecos tienen un aspecto realista, el lenguaje empleado también emula al que se utiliza para referirse a niños de verdad. Así, en este particular mundo se habla de guardería, en lugar de tienda online; de madres, en vez de clientas; y los muñecos no se compran, se adoptan.
Beatriz comenta que estos términos responden al marketing. Ya que tienen una apariencia tan real, decir que están en adopción es una manera que tenemos algunos artistas de informar de que están en venta, afirma.
Estos muñecos hiperrealistas se han visto envueltos en la polémica pues, más allá de las coleccionistas y las amantes de las muñecas, algunas mujeres que han perdido a su hijo, han buscado consuelo adquiriendo uno.
Es algo que me llama muchísimo la atención, como artista y como madre. No sé quién podría sustituir la pérdida de un hijo con un muñeco, con una mascota o con cualquier otra cosa, subraya Beatriz, quien destaca que nunca ha recibido un encargo por este motivo.
Tras la pérdida de un bebé, el uso de este tipo de muñecos lo que va a hacer, en muchos casos, es encallar el duelo, precisa Julieta París.
La psicóloga expone que los duelos son procesos que requieren tiempo para que las cosas vayan volviendo a su lugar poco a poco, si bien nunca serán las mismas. En esas situaciones el muñeco reborn puede convertirse en un obstáculo. Quizás proporcione calma en los primeros días, pero después la identificación va a ser tan fuerte, y la transferencia con el muñeco-bebé será tan emocional, que no se va a poder resolver el duelo, manifiesta la especialista.
También se ha hablado mucho de la posible utilidad de estos muñecos para hacer terapia en casos de Alzheimer y autismo.
Creo que su uso por personas con Alzheimer podría ser interesante y positivo, porque supone tener que cuidar a alguien, en este caso al muñeco, y esto hace que el enfermo se sienta útil, explica París.
Sin embargo, el problema de las personas con autismo es precisamente la vinculación y considero que aprender a vincularse con un objeto inanimado es bastante negativo. No obstante, sería imprescindible conocer el grado y el tipo de autismo porque las diferencias que se pueden encontrar son muy grandes. En algunos casos podría ayudar, pero en otros no, asegura la psicóloga.
En cambio, París afirma que los muñecos hiperrealistas pueden resultar de muchísima utilidad en los cursos preparto, para enseñar a los futuros padres a sujetar al bebé, cambiar un pañal o maniobras de primeros auxilios. En definitiva, allí donde no se pueda construir un vínculo emocional con el muñeco que, al fin y al cabo, es un objeto inanimado, concluye.
DESTACADOS:
+++ En el mundo reborn se habla de guardería en lugar de tienda online, de madres en vez de clientas y los muñecos no se compran, se adoptan.
+++ Beatriz Clemente, artista reborn, afirma; Aunque prácticamente todas mis clientas son mujeres, no hay un perfil concreto en lo referente a la edad, a la personalidad y, ni si quiera, a la nacionalidad. Recibo encargos desde Colombia, Estados Unidos, México o España, señala.
+++ La psicóloga Julieta París explica que estos muñecos se convierten en un ancla al pasado, al tiempo de la infancia, donde no había responsabilidades, donde uno se siente seguro y las preocupaciones todavía no han llegado a nuestra vida.
Por Purificación León/EFE-Reportajes