Ciudades y cambio climático

Círculo
/ 23 septiembre 2015

La sequía, las inundaciones y el aumento del nivel del mar son algunos de los principales desafíos para las áreas urbanas.

Madrid, España.- La Tierra recibe energía del sol y la devuelve al espacio. El cambio climático se produce porque la alta concentración de gases de efecto invernadero retienen una buena parte de esta energía en la atmósfera de manera permanente. "Al mantener este calor tan cerca de la superficie, la temperatura va subiendo", explica Héctor de Prado, técnico de cambio climático de la asociación ecologista Amigos de la Tierra.

Los gases de efecto invernadero "están presentes en la atmósfera de manera natural, proceden, por ejemplo, de los volcanes y de los océanos. El problema es que las actividades humanas acentúan su concentración", señala.

"Desde el inicio de la revolución industrial, los procesos que se han llevado a cabo para producir bienes y para transportarlos están emitiendo gases de efecto invernadero. El principal y el más conocido es el dióxido de carbono", afirma de Prado.

De hecho, "se ha observado que desde finales del siglo XIX hasta el día de hoy ha subido muchísimo la concentración de estos gases en la atmósfera debido a la acción humana", aclara.

"Con el aumento de la urbanización, entender los impactos del cambio climático sobre el medio urbano será un aspecto cada vez más importante. Las pruebas están dando a conocer que el cambio climático presenta desafíos únicos para las áreas urbanas y su creciente población", destaca el informe mundial sobre asentamientos humanos 2011, elaborado por Naciones Unidas y titulado "Las ciudades y el cambio climático: orientaciones para políticas".

Ciudades y cambio climático es también el lema del día mundial del hábitat, que se celebra el 3 de octubre. La edición de 2011 tiene como sede Aguascalientes, en México.

"Estamos comprometidos con un mejor futuro urbano y queremos que nuestras ciudades sean compactas, accesibles, densas en el uso del suelo, que privilegien el transporte público, prioricen los espacios para la convivencia, eviten zonas de riesgo, fomenten la gobernanza urbana y sigan lineamientos de sustentabilidad ecológica", señala Carlos Lozano de la Torre, gobernador constitucional del Estado de Aguascalientes.

FUENTES DE EMISIONES

"Las principales fuentes de las emisiones de gases de efecto invernadero están relacionadas con el consumo de combustibles fósiles para el suministro de energía, el transporte o la industria", reza el informe de Naciones Unidas.

Según el citado documento, el suministro de energía es responsable de en torno al 26 por ciento de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, el transporte de aproximadamente el 13 por ciento, se estima que los edificios generan el 8 por ciento, el 19 por ciento está relacionado con la industria y otro 3 por ciento procede de los residuos.

"La principal responsabilidad a la hora de implementar políticas para gestionar los efectos del cambio climático en las ciudades está en manos de los gobiernos locales, muchos de los cuales no han aceptado ni actuado según su responsabilidad. Esto ha provocado que muchas familias y comunidades se hayan visto forzadas a llevar a cabo medidas de adaptación al cambio climático por sí mismas", señala el informe.

"Por nosotros mismos podemos hacer algunas cosas pero necesitamos el compromiso de la administración, que debe poner en marcha medidas que mejoren las condiciones de salubridad de las ciudades", asegura Héctor de Prado.

El técnico de cambio climático de Amigos de la Tierra considera que las ciudades "están pensadas para los coches y no para los peatones ni para las bicicletas" y recomienda a la administración local a ofrecer a los ciudadanos alternativas al vehículo privado.

"En lugares como Londres, Estocolmo y Milán existe una tarifa para los coches que acceden al centro de la ciudad. Esto, acompañado de mejorar los transportes públicos y los aparcamientos de las afueras, hace que la gente se anime a dejar el coche en casa o en el extrarradio y a hacer el último tramo caminando, en bicicleta o en transporte público", sostiene.

"En Copenhague entre en 36 por ciento y el 38 por ciento de la población es ciclista, con lo que al cabo del año dejan de emitir entre 90,000 y 100,000 toneladas de dióxido de carbono", destaca.

En México, por su parte, la administración ha ofrecido una serie de ayudas a los taxistas para que cambien sus automóviles antiguos por modelos más eficientes, comenta.

Debido a la densidad de la población y al gran consumo de energía que se da en las ciudades, estas tienden a ser "islas térmicas", afirma de Prado. De hecho, en las ciudades suele haber entre medio grado y dos grados más que en las áreas circundantes, explica.

El aumento de las temperaturas representa un desafío para las áreas urbanas. "No sólo supone un impacto para la naturaleza, también lo es a nivel económico para sectores como el turismo", apunta Aída Vila, responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace España.

Las ciudades también se verán directamente afectadas por la subida del nivel del mar. "Por cada centímetro que aumente el nivel del mar, perdemos un metro de playa", asegura Vila.

"Los niveles promedio del mar han ido aumentando alrededor del mundo durante las últimas décadas pero con una llamativa variación regional. La expansión termal, el incremento del volumen del agua del océano al calentarse, se considera una causa fundamental del aumento del nivel del mar. Pero la desaparición de las placas de hielo puede llegar a adquirir más importancia en el futuro. Podría haber umbrales térmicos o puntos de inflexión que aceleren el deshielo hasta niveles que no se han observado en tiempos modernos", indica el informe de Naciones Unidas.

Asimismo, el documento constata que aunque las zonas costeras bajas sólo representan el 2 por ciento de la superficie terrestre, aproximadamente el 13 por ciento de la población urbana de todo el mundo vive en ellas.

Basándose en datos de Naciones Unidas, Aída Vila apunta que los llamados Estados isla del Pacífico serán uno de los territorios más vulnerables en los próximos años. "El aumento del nivel del mar los está dejando literalmente sin pueblos y sin ciudades", señala.

"Muchos de estos Estados han pedido asilo en los territorios continentales próximos porque, según las previsiones, aunque pongamos remedio al cambio climático, al ritmo que sube el nivel del mar probablemente tengan que recolocar a parte de sus ciudadanos", afirma.

Los países africanos también se verán muy afectados pero, en su caso, por la desertificación. "Esto impactará directamente en sus derechos humanos, tales como el derecho a la alimentación, a la salud, a disponer de agua potable, a la vivienda y a la vida", destaca.

"Actualmente se considera que un 1 por ciento del área terrestre se encuentra en condiciones de sequía extrema. En 2100, este dato podría aumentar hasta un 30 por ciento. Asimismo, es probable que se incremente el estrés hídrico como resultado de los cambios en las precipitaciones, la consiguiente disminución en el suministro y calidad del agua así como la mayor demanda de agua", advierte el informe "Las ciudades y el cambio climático: orientaciones para políticas".

Por otro lado, el informe señala que los episodios de precipitaciones de un día o varios días de duración han aumentado a lo largo del siglo XX y es muy probable que estas tendencias continúen en el siglo XXI. "Los eventos de fuertes precipitaciones de varios días de duración tendrán implicaciones económicas y sociales de gran alcance en el entorno urbano pues ocasionarán inundaciones y desprendimientos de tierra. De hecho, las inundaciones se consideran uno de los desastres más costosos y perjudiciales", apunta.

DESTACADOS:

* Bajo el lema "Ciudades y cambio climático", el 3 de octubre se celebra el día mundial del hábitat. La edición de 2011 tiene como sede Aguascalientes, en México.

* Algunos Estados isla del Pacífico "han pedido asilo en los territorios continentales próximos, porque al ritmo que sube el nivel del mar, probablemente tengan que recolocar a parte de sus ciudadanos", indica Aída Vila, responsable de la campaña de Cambio Climático de Greenpeace España.

* Debido a la densidad de la población y al gran consumo de energía que se da en las ciudades, estas tienden a ser "islas térmicas", afirma Héctor de Prado, técnico de cambio climático de la asociación ecologista Amigos de la Tierra. De hecho, en las ciudades suele haber entre medio grado y dos grados más que en las áreas circundantes, señala.

TEMAS

COMENTARIOS