Diabetes e hipertensión, enfermedades más comunes en cárceles
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La Secretaría de Salud del DF informó que otros padecimientos que los reos presentan con mayor regularidad son infecciones respiratoria agudas, gastroenteritis infecciosa, gastritis, gingivitis e infecciones en vías urinarias
México.- En las cárceles del Distrito Federal hay dos enfermedades crónicas que los internos padecen con mayor frecuencia, las cuales también son consideradas como las principales causas de muerte en la ciudad de México: la diabetes y la hipertensión.
La Secretaría de Salud del DF informó, vía transparencia, que hay en total 532 casos de diabetes que fueron contabilizados en los Reclusorios Preventivos Varoniles Norte, Oriente y Sur; en el Centro Federal de Readaptación Social Santa Martha, en la Penitenciaría del DF, en el Centro de Readaptación Social Varonil Santa Martha, y en Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial.
En el caso de la hipertensión, la dependencia reportó 412 casos, por lo que la enfermedad es el segundo lugar en padecimientos crónicos al interior de las cárceles.
Sobre al resto de los padecimientos que los reos presentan con mayor regularidad son infecciones respiratoria agudas, gastroenteritis infecciosa, gastritis, gingivitis, infecciones en vías urinarias y las originadas por traumatismos.
Ante enfermedades, atención insuficiente: CDHDF
De acuerdo con el Informe Especial sobre el derecho a la salud de las personas privadas de la libertad en los centros de reclusión del DF, realizado por la Comisión de Derechos Humanos local, los presos que requieren de cualquier atención médica, deben de solicitar pases a las unidades médicas de los centros.
Los internos esperan en promedio alrededor de una hora para ser valorados; en el caso de los pacientes de hipertensión y diabetes, la unidad médica implementó un carnet y la posibilidad de programar citas para la atención.
Sin embargo, el informe de la CDHDF reveló que el personal de la unidad médica le reserva poca atención al seguimiento, por lo que los propios internos deben insistir y presionar al personal a fin de ser atendidos o referidos a otra institución.
Además, las unidades no cuentan con un mecanismo transparente de monitoreo y evaluación del estado y de la disponibilidad de infraestructura, equipamiento, mobiliario, instrumental y recursos humanos.