Ser Top Model a los 15; los sacrificios de Sofía
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Con sólo 15 años, Sofía Parás descubrió que quiere desfilar en las pasarelas y para ello su familia y ella se alistan
Ruth Landa lo repite una y otra vez: Dios puso a su hija Sofía, de apenas 16 años, en ese camino. La chica ha tenido que hacer sacrificios. dejar las fiestas con sus amigos y reuniones familiares. "Ella es bendecida y con lo que hace bendice a la gente", dice la mamá de la pequeña, quien hace apenas seis meses tiene una rutina rigurosa: toma mucha agua y ha eliminado los pasteles, papas y dulces en su dieta.
Dentro de su metro y 78 centímetros, Sofía Parás tiene un cuerpo que llega a la talla tres, donde las medidas de concursos de belleza de 90 (cm de busto), 60 (cm de cintura) 90 (cm de cadera), disminuyen. Estos sacrificios que parecen una penitencia, asoman en poco tiempo para la menor, recompensas.
"Si Dios quiere que me siga yendo bien en menos de cinco años me veo en las revistas y pasarelas más importantes del mundo, quiero lucir en Vogue", dice la joven originaria de Monterrey, quien el pasado 26 de abril se convirtió en la ganadora del casting de modelaje "Contempo Busca", que la hizo acreedora a un contrato con un valor equivalente a 100 mil pesos con la empresa Contempo International Model Management.
Por ser menor de edad, Sofía estuvo acompañada en todo el proceso por su mamá, quien, al igual que su padre, la ha apoyado "al 100 por ciento" en su ilusión. "Sofía iba con una serenidad sin decir tengo que ganar, tengo que ganar, aunque sí iba entusiasmada. Me dio mucho gusto, la verdad no tocamos puertas como otras niñas. Esto fue una bendición directa de Dios", dice Ruth.
¿Cuál es el servicio que Sofía le hace a Dios siendo modelo? "Como yo veo que a mi hija le agrada, ese es otro medio en la vida para ella. Ella se muestra para que otras personas opten por vestirse con la ropa que exhibe, pero además esto del modelaje es un negocio lucrativo donde se genera una dinámica de servicio, ellos te bendicen a ti con la elección y tu generas empleos y bendices a los demás", explica la madre de Sofía.
La joven agradece a la divinidad cada que puede, por haber alcanzado esto que para ella representa un éxito: "Todo el esfuerzo que he hecho para llegar a este lugar es gracias a Dios, nunca pensé que fuera tan rápido. Estoy muy contenta con el proceso, conocí chicas súper lindas y fue muy padre la experiencia".
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El inicio de la aventura
Y sí, el inicio de este sueño tiene apenas seis meses en los que Sofía se ha dedicado una buena parte de su tiempo al modelaje. De pequeña decía que quería ser "doctora-científica", nunca hubo un indicio por lucirse en las pasarelas. Fue hasta fechas cercanas al 26 de abril de 2009, justo durante una sesión de fotografías como recuerdo por sus 15 años, cuando la aventura dio inicio.
"Desde la sesión fotográfica de 15 años me sentí súper segura, no me tenían que decir que posición adoptar, sentí que era lo mío, que me podía interesar la carrera", dice Sofía, quien tenía claro su diseño de imagen para esta ocasión.
Antes que usar el vestido tradicional de hadas para sus fotos, como el de sus fiestas de niña, quería una vestimenta menos rebuscada pero estilizada llamada "de glamour". "Mi vestido era largo azul sencillo suelto, como de playa, yo fui la que casi, casi, dirigí las fotos", dice.
Esa vez, el fotógrafo no le tomó las 300 imágenes que conforman habitualmente el set en interiores y exteriores, sino 700, porque consideraba que Sofía modelaba muy bien. "En ese momento iba a fiestas de 15 años, compromisos de colegio y organizaba un crucero con amigas, andaba en otro rollo", recuerda la mamá.
El buen ojo del fotógrafo lo orilló a insistir y pidió permiso a sus padres para mostrar ese catálogo a Rafael Zuñiga, quien maneja una agencia de modelos en la capital regiomontana.
Entonces, las sugerencias para que entrara al mundo de la moda fueron constantes. De regaló de Navidad le pidió a su padre que le pagara un curso en la agencia de Zuñiga. " Mucha gente me decía ánda, inténtalo, no me llamaba la atención, pero conforme fui viendo desfiles y a mis modelos favoritas, me fui metiendo más a esta carrera y la verdad que me gusta mucho".
"Recuerdo un día que estaba viendo con mi hija un desfile de modas de Nueva York o de Milán, ella me dijo: `mami ahí me vas a ver a mí.' se me quedó muy grabado. Sólo le dije si mijita si. Ella insistió, `sí mami, de veras ahí me vas a ver'", dice Ruth, a quien toda esta diferente vivencia le ha caído de sorpresa.
Su padre, Gerardo Parás, asegura que nunca imaginó ver a su hija de modelo. Lo cierto, dice, es que desde las primeras fotos que tienen de ella, saliendo del vientre, se revela su belleza. "Nació hermosísima la huerca, muchos nos decían que bonita niña. Amigos decían va para modelo, tiene la altura, el tipo, la personalidad y la constancia, porque se propone algo y lo cumple".
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La autoestima
Lo que a Sofía le apasiona de la pasarela es la actitud que se adopta al plantarse frente a la gente, como demuestras la ropa, cómo proyectas la imagen y la personalidad que se adopta en desfiles.
¿Si no fueras bonita, crees que podrías proyectar la misma seguridad?
"Para mí la actitud es súper importante y la seguridad, pero pues claro que también tiene que ver mucho la belleza, pero a la mejor y si podría, a lo mejor".
La idea de que belleza física está peleada con la sabiduría para Sofía es un mito. Asegura que mucha gente critica sin saber. "Este es un trabajo que se desconoce y no consiste simplemente en salir. Hay muchas modelos súper inteligentes y no porque estés guapa vas a estar tonta".
Su padre, identificado por su esposa como "el más emocionado durante el concurso", apoya esta creencia de su hija al decir que él sentiría el mismo orgullo que hoy experimenta, si Sofía hubiera ganado un concurso de matemáticas.
"Mientras sean positivos y por el buen camino, con cualquiera de los logros de sus hijos uno se siente muy bien, el orgullo que te generan los triunfos de los chicos es invaluable y no dependen de lo que alcancen en los ámbitos intelectuales o de imagen", expresa.
¿Crees que exponerte con cierto tipo de ropa incitas o provocas algunos pensamientos sexuales en hombres?
"Pues pienso que la verdad depende de la ropa, yo sigo con el pensamiento de que la gente te ve como quiere, no puedes influir en eso, si la gente la ve así o provocas eso en hombres yo siempre tengo marcada mi línea y no me siento un objeto sexual a pesar del tipo de prensa que pueda traer puesta".
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Cambio de vida
Los padres de Sofía aseguran que la felicidad de su hija es la propia. "Ella está aquí porque le gusta, cuando ella diga se acabó, se acabó, cuando diga quiero más apoyo, se le da más apoyo, mientras ella lo disfruta y nosotros también".
Pero uno de los pendientes familiares es que, a tan corta edad, Sofía decida no continuar con sus estudios para dedicarse por completo al modelaje. Tanto ella a como sus padres aseguran que eso no sucederá, pues existe el tiempo para alternar ambas actividades.
Por unos días, Sofía ya experimentó lo que representa dejar el colegio Anglia, ubicado en la localidad de San Pedro Garza García, donde estudia la secundaria. Con autorización de sus profesores pudo asistir a los castings, pero a su regreso, en medio de felicitaciones por parte de sus amigas y autoridades, tuvo que presentar los trabajos atrasados.
Pero el escenario que viene para Sofía, con sesiones de fotos en Nueva York, les ha hecho pensar que la chica podría realizar la preparatoria en el sistema abierto. "Voy a seguir estudiando porque la carrera de una modelo no es tan larga. me gustaría estudiar diseño... diseño. ¿cómo se llama? quiero hacer diseño de casas, tal vez ingeniera o arquitecto, pero no dejar la parte del modelaje.".
"No creo que tenga seguro qué estudiará. Lo que hoy tiene claro es que ganó esto y que las oportunidades son unas en la vida y que hay que aprovecharlas y si todo sale bien en paralelo sigue estudiando", indica Gerardo.
Ruth dice que la vida siempre te da sorpresas. "Puedes planear la vida, pero que al final Dios te mueve de manera tan sorprendente a otro lugar tal vez muy distinto, pero los estudios de Sofía son muy importantes para nosotros".
¿Cómo le gustaría ver a su hija en 5 años?
"Siento en mi corazón que tiene mucho potencial y le va a ir muy bien y todo depende de cada uno, mucho es primero de Dios y nosotros hacer lo posible y prepararnos para llegar a la meta que queramos, la veo como una mujer de éxito.
"Se siente bien padre el logro de esta muchachita a pesar de su corta edad, por lo que he leído y escuchado fueron muchas las criaturas las que concursaron, creo que 10 mil, un logro de este tamaño es mucho orgullo, siente uno bonito. Esto se ha venido solo, sin buscarlo, como una bola de nieve", dice el padre.
Mientras Sofía disfruta su triunfo, está a la espera de las giras. de su futuro en el que sin duda confía en la intervención divina. "Lo que más le gusta de la vida es aprovecharla al máximo como si fuera el último día de mi vida... si Dios quiere en menos de dos años estaré en las mejores pasarelas y revistas".