Banquetas de Saltillo, ‘trampas’ para débiles visuales; un peligro caminar en el Centro Histórico

Banquetas y zonas peatonales del primer cuadro de la ciudad representan un serio peligro para quien padece debilidad visual.

Pese a que en 2014 se realizó una rehabilitación del espacio público en el centro de Saltillo, actualmente presenta severos daños que podrían ocasionar un accidente con consecuencias fatales.

Un ejemplo son las líneas guía, a las que se le han desprendido mosaicos, además, numerosas alcantarillas y zonas de servicio de alumbrado, gas y agua potable sin tapa, de acuerdo con la Dirección de Inclusión de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Coahuila.

“Una persona con discapacidad se enfrenta a este tipo de obstáculos quienes no tienen libre acceso para poder desplazarse y llegar a los lugares de forma autónoma, evidentemente ésta es una responsabilidad del Gobierno que tiene la obligación de conservar y brindar este tipo de accesibilidad”, señala Erasmo Ramos, titular de la Dirección.

Sin embargo, esta situación no solo afecta a quienes viven con alguna discapacidad, sino que también representa un peligro para la población en general que transita por los lugares dañados, por ello, la CDHEC ha emitido algunas recomendaciones para que se ponga atención en esta problemática.

“Nosotros como Comisión de los Derechos Humanos hacemos diferentes observaciones y monitoreamos para que el Gobierno atienda estas necesidades o bien que esté consciente de que se tiene que hacer este tipo de adecuaciones”, apunta.

Al mismo tiempo advierte que es de urgencia que se brinde mantenimiento a las guías podotáctiles que son una herramienta para las personas con discapacidad visual, ya que facilitan el desplazamiento y les permite identificar ciertos puntos de relieve con un bastón con el que es posible avanzar.

“Yo, como persona débil visual, suelo caer en pozos pese a que manejo el bastón, ahora si no lo saben manejar bien pues es otro problema porque con él uno se da cuenta dónde hay pozos y nos evita caídas, pero de pronto si generan accidentes los registros abiertos, los pozos, una que otra banqueta quebrada”, menciona.

A esto se suman los obstáculos que se ponen en las calles y banquetas como letreros de negocios, autos mal estacionados, los señalamientos de “Exclusivo” que se ponen en los espacios de estacionamiento o incluso sillas y mesas que llegan a montarse afuera de los establecimientos.

“Todo esto forma parte de la cultura de los saltillenses y es un proceso el poder cambiar o eliminar todo esto, nosotros tratamos de exponer las necesidades que tenemos como personas débiles visuales y también los discapacitados, esperamos que este tipo de barreras se eliminen y se establezcan políticas públicas para que los trayectos sean inclusivos”, concluye Erasmo Ramos.