Lucía Loyo responde a nuestra petición de entrevista por videollamada el 27 de agosto. Son las 12:30 horas en Saltillo y estamos a mitad del turno laboral; ella ya está finalizando su jornada. Son las 20:30 en Alemania, su país de residencia.
Se ve tranquila. Detrás de ella hay una pared en tono claro que hace juego con su semblante.
Ha pasado una semana desde que se dio a conocer que ella forma parte de 200 mujeres líderes globales, la pregunta inmediata es ¿cómo le haces para coordinarte? Sin duda responde que es gracias a su pareja, y esta palabra la recalca, porque dice: es así como vivimos y trabajos, en pareja, a la par. No es que él me ayude con los niños, somos un equipo. No es que yo le ayude con mi salario, somos un equipo.
Lucía es una de las mejores asesoras en el mundo. ETS EMEA, donde trabaja, se encarga de preparar a los estudiantes y estar a la vanguardia dentro del rubro educativo.
Es egresada de la Facultad de Jurisprudencia de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC). Ahí fue donde se interesó por el derecho internacional.
Esa inquietud la hizo ir en búsqueda de especialización. Primero a través de un intercambio en Canadá, y posteriormente realizó una maestría en la Universidad de Altos Estudios Internacionales y del Desarrollo en Ginebra, Suiza.
Lucía recuerda que incluso en un modelo de movilidad entre el acceso a la información era limitado. La solicitud de intercambio la llenó en una máquina de escribir. Y para lograr ingresar a la maestría realizó tres intentos.
Para llevar a cabo su trabajo ha tenido que organizar su tiempo. No importa que a una actividad solo le puedas destinar una hora al día, lo importante es la continuidad.
Desde hace años, Lucía es un ejemplo de éxito, pero este año fue elegida para conformar la lista “Global 200 Women Power Leaders 2024”. Para ella, las variables imprescindibles en el éxito son el trabajo en equipo, disciplina. Por eso forma parte de los perfiles de A La Vanguardia.
Estudié en Liceo Alberto del Canto que era una escuela muy estricta y eso fue lo que me ayudó mucho para crearme una disciplina de estudio. Gracias a la directora, la profesora Nora Lagarda, que me otorgó una beca para cursar la preparatoria fue que pude terminar en esa escuela.
Yo vengo de una familia de abogados y aunque siempre tuve la inquietud de estudiar leyes, también veía algo más técnico, pero finalmente estudié leyes en la Facultad de Jurisprudencia en Saltillo.
Ahí fue donde descubrí el derecho internacional y me encantó y tuve muy claro, desde que yo creo desde segundo año que quería estudiar derecho internacional.
Gracias a que tenía un buen nivel de inglés y empecé a estudiar francés obtuve una beca para estudiar en Canadá, en Quebec.
¿Cuál es el factor determinante para lograr las metas?
La disciplina es clave. Me doy cuenta ahora que tengo más experiencia. Porque cuando era más joven, en la universidad o en la Maestría, era más cuestión de enfocarse en terminar un ensayo, pasar un examen, pero ahora tengo mucho menos tiempo para estudiar. Tengo que usar los pocos minutos que tengo para enfocarme y estudiar.
Sé lo importante que es la disciplina, porque tengo un trabajo de tiempo completo donde tengo mucha responsabilidad, tengo que manejar un equipo y tengo tres hijos, tengo que manejar la casa.
Entonces tengo que tener un horario en el que me levanto muy temprano y hago mi planeación. Todos los días estudio, excepto los domingos.
La disciplina es clave porque parece que una hora no es mucho, pero una hora todos los días al final de un mes, de 6 meses, de un año, suma muchos días.
¿Crees que hay una falta de disciplina en la sociedad?
Sí, pero es importante decir que todo esto no lo podría hacer si no tuviera una pareja. Mi marido ha sido clave en que yo pueda lograr todas esas cosas, Y quiero enfatizar en la palabra pareja, porque tienes que estar a la par.
¿Dirías que el trabajo en equipo es imprescindible?
Sí, justo esta parte de la pareja viene de ahí. Quieres estar a la par. No es que él me ayude con los niños, no es que tú le ayudes con tu salario, no. Es que los dos están construyendo juntos y los dos están al mismo nivel.
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¿Cuáles son las variables, que a tu juicio, determinan el éxito?
Lo importante es seguir aprendiendo. Todavía no lo vemos, pero en cinco o diez años todos estos estudios académicos universitarios van a ir cambiando.
Yo estoy trabajando para una organización educativa y vemos cómo los grados académicos están perdiendo importancia. Las personas tienen que seguirse educando, tienen que seguir aprendiendo.
El grado académico puede ser una base, pero no es lo único. Yo creo que en el futuro va a haber micro certificaciones o certificaciones constantes. No va a ser la carrera de 5 años, ni la maestría de dos o el doctorado. Lo importante es seguir aprendiendo. Tener la mentalidad de seguir aprendiendo seguir actualizándose.
No importa en qué ámbito estás, ahora sí que hay que estar a la vanguardia.
También tienes que estar en equipo. Puedes estar en equipo con tu pareja, con tu marido, con tus colegas, con tu familia, porque una persona sola no, no puede.
Entonces tienes que tener un soporte. El éxito puede tener muchas formas. El éxito no es solo académico o laboral también hay éxito con los emprendedores, en sus empresas pequeñas o medianas, o una ama de casa.
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¿Por qué crees que hay un alto grado de deserción en las universidades?
Creo que una de las razones principales por las que, sobre todo los jóvenes, no siguen una disciplina es porque la disciplina requiere de paciencia y dedicación, ya que sus frutos se cosechan a largo plazo.
La vida moderna y las redes sociales no han condicionado a buscar y recibir satisfacción de manera inmediata.
Por ejemplo, publico una foto y es cuestión de seguir, de obtener likes que me hacen sentir bien, válido.
Si tengo hambre, puedo pedir comida desde mi sofá sin necesidad de moverme, y en poco tiempo ya estoy disfrutando de mi platillo favorito.
...(Por lo tanto) tienes que tener muy claro un objetivo y no perderlo de vista porque eso es muy fácil. Cada día salen cosas nuevas. Cada día sale otro objeto brillante
