Las erratas políticas de febrero loco
COMPARTIR
TEMAS
Dicen los españoles que si malo es enero, peor es febrero, lo cual, también es cierto para nosotros que sufrimos los embates de la "cuesta de enero" y luego las locuras climáticas de febrero, a las que hay que agregar los disparates de la clase política que actualmente gobierna este país, peor a la que en 1980, ya describía Manuel Marcué Pardiñas cuando decía: "Hay muchos tontos en el gabinete presidencial, ocupando puestos muy importantes en el Gobierno. El equipo político del Primer Mandatario no es lo que deberíamos de tener, es un equipo político menor...".
¿Acaso no es vigente lo dicho por Marcué Pardiñas hace más de 30 años? ¿Acaso el gabinete presidencial no está compuesto por un equipo político menor?
Porque Ernesto Cordero, Secretario de Hacienda, le acaba de dar la razón a Marcué, con esa ocurrencia que ha causado hilaridad y preocupación por venir del titular del crédito público; los 6 mil pesos de la "Bartola", burla que se agrava cuando nos enteramos que Hacienda está pagando los servicios de cinco empresas de relaciones públicas para mejorar la imagen de Cordero, el Secretario que hoy aspira a la Presidencia de la República.
Y si de entrevistas se trata, bien define Anne Rice en su "Entrevista con el Vampiro", cuando en boca del chupasangre Louis de Pointe, le dice al entrevistador: "Qué patético resulta tratar de explicar cosas que no tienen explicación". Como inexplicable es lo dicho por Felipe Calderón en su entrevista con Roberto Rock, para El Universal, que, ante la pregunta referente al momento más difícil de su gobierno, don Felipe contestó acongojado que el día más negro de su gestión ha sido cuando murió Juan Camilo Mouriño, asunto inadmisible porque el madrileño no puede estar por encima de los 49 bebés muertos por descuido del propio gobierno, ni tampoco sobre los inocentes masacrados por la delincuencia o los federales al mando del propio Calderón.
Tampoco tiene explicación la declaración presidencial del miércoles pasado cuando en Sinaloa, Calderón expresó que no podía omitir su profundo pesar, indignación y tristeza, por las muertes en Libia, asunto que nos extraña porque aquí hay una masacre permanente cuyo encono no cesa y por la cual, casi nunca se le ve contrito a don Felipe Calderón.
Otro afectado de febrero loco es, sin duda, Sócrates Rizzo (quien hace un año vino a Parras a dar una conferencia invitado por un tal Federico Madero y su personero, Alfredo Ortiz Sánchez), el mismo Sócrates que acaba de regresar a Saltillo, la tierra de Humberto Moreira, presidente electo del PRI, para señalar a los gobiernos priístas de haber pactado con el narco. Y dado que las casualidades en política no existen, de inmediato el presidente del PAN, Gustavo Madero, primo de Federico, salió a decir que las declaraciones de Rizzo, "evidencian el cinismo, la simulación y el engaño a la que los gobiernos priístas sometían a la sociedad mexicana".
Embates en contra del PRI que coinciden con lasdeclaraciones al diario El País, hechas por Lorenzo Zambrano, otro primo de Gustavo y Federico Madero que, aunadas a las de otro regio notable, Luis Donaldo Colosio Riojas, se parecen a esa trama de la novela de Ian Fleming, pasaje en el que Bond se refiere a las intrigas recurrentes de Goldfinger y de plano especula: "Una vez es casualidad, dos veces es coincidencia, la tercera vez es ya una conspiración enemiga".
Y respecto a Gustavito Madero y su parentela de derechas, no hay que olvidar aquel proverbio que dice: "Maderos hay muy buenos, maderos hay que no; de unos hacen santos, y de los otros puro carbón".