10 formas de vivir la justicia

VANGUARDIA realizó una encuesta a estudiantes saltillenses. Algunas respuestas sorprenden. Lo que más me llamó la atención fueron las respuestas a dos preguntas.La primera: ¿Qué es lo que te molesta como ciudadano de Saltillo?". El 31 por ciento de los encuestados dijo que la corrupción, otro porcentaje casi igual dijo que la inseguridad y un 24 por ciento afirmó que la injusticia. 

Según un sociólogo, las tres respuestas tienen que ver con la corrupción. Sumando los porcentajes, al 85 por ciento le molesta la corrupción.

La segunda pregunta fue: "¿Qué debe tener un gobierno confiable?". Un 30 por ciento de los entrevistados dijo que transparencia, 23 por ciento dijo que el buen uso de los recursos públicos, y un 22 por ciento la impartición correcta de la justicia.

Estas respuestas están ligadas una con otra: Si hay transparencia, hay buen uso de los recursos, si hay buen uso de los recursos, no se cometen injusticias con quienes lo necesitan.

Da gusto saber que este tema es sensible -por fin- entre los jóvenes. Después de todas las corruptelas que reportan los medios uno llega a pensar que a nadie le importa y menos que a los jóvenes. Eso es lo que sorprende.

Es como ver una lucecita al final del túnel, los jóvenes dicen que, para contribuir a tener una mejor ciudad y país, lo que harían es: cumplir y fomentar los valores, estudiar y prepararse y ser un ejemplo siendo mejor cada día.

Sumados estos porcentajes, 35 por ciento de los jóvenes saben que la solución está en ellos, en ser mejores personas mediante la preparación, la práctica y fomento de los valores.

Los valores que los jóvenes saltillenses creen que más practican son la amistad y la solidaridad, el hecho de que así lo consideren nos pinta un panorama esperanzador y positivo.

Ver que los jóvenes rechacen la corrupción y la injusticia, saber que buscan la mejora de sí mismos, es alentador.

El 41 por ciento reconoce que falta el valor del respeto y el 14 por ciento indica que la responsabilidad es el valor que menos practican los jóvenes. Precisamente esos valores del respeto y responsabilidad, que tantos consideran que hace falta, están ligado a la justicia que también desean.

El autor David Isaacs recomienda que para vivir la justicia hay que:

1. Reconocer los derechos de las personas con quienes me relaciono. La justicia se basa en los derechos y obligaciones. Darle a cada quien lo que se le debe.

2. Intentar conocer cada situación con objetividad para actuar de la manera más justa en cada caso. Cada persona y circunstancia es diferente, no actuar siempre igual.

3. La caridad, cuando beneficia a otro, puede superar a lo que es justo de hacer. La vida en familia sería muy dura si siempre hubiera justicia total sin cariño.

4. Reconocer los derechos de mi cónyuge. Tales como recibir ayuda para mejorar.

5. Reconocer los derechos de los otros miembros de mi familia. Tales como la intimidad, a participar, a convivir con orden, y a recibir ayuda.

6. Reconocer y vivir los derechos de los demás en mi lugar de trabajo, ciudad y país.

7. Reconocer el compromiso que he adquirido con mis amigos: ayudarles a mejorar y aprender de ellos.

8. Informarse sobre cuáles son los derechos que debo respetar: nacer, comer, tener techo, trabajo y bienes.

9. Cumplir con mis promesas, con los pactos y con los acuerdos que establezco aunque sean de palabra.

10. Reconocer que oponerse, criticar por principio o censurar a otros es de por si una falta de justicia. Las personas tienen derecho a la verdad y al buen nombre.

Como podemos ver, vivir la justicia no es fácil, podemos creer que sólo es un derecho sin obligaciones. Seamos justos con los demás para poder exigir justicia.

jesus50@hotmail.com