400 años de la segunda parte de El Quijote
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Esta gran obra cumbre de la literatura española, escrita por Miguel de Cervantes, cumplirá en abril de 2016, cuatro centenarios y millones de lectores
Diez años después de publicada su primera parte, en 1615 vio la luz la segunda parte de El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, obra cumbre de la literatura española y aun universal, escrita por Miguel de Cervantes. Por lo tanto, en el año que corre se cumplen 400 de su publicación. Y en abril de 2016, se llegará a los 400 del fallecimiento de este genial autor.
Por ambos motivos, cada semana aparecerá en este espacio un breve comentario en torno a la sin par novela cervantina.
El propósito: animar al lector a que se acerque sin temor alguno a este libro, sin duda el que más se ha impreso y leído en toda la historia del género humano. Si se excluye, desde luego, a la Biblia. Bastará que uno solo de los lectores atienda esta convocatoria, para que quede debidamente cumplido el objeto de esta columna.
La primera parte, según ya se dijo, vio la luz en el año de 1605. Algunos estudiosos del tema afirman con buenas razones que su impresión debió haberse efectuado entre finales de octubre y principios de diciembre de 1604.
En consecuencia, la portada debió haber llevado este año como el de su publicación. Pero el librero Juan de la Cuesta ordenó que se anotara 1605, para que el libro durara más como novedad. Increíble, pero así pensó el editor.
En la época de Cervantes todos los libros debían contar con la autorización real para poder ser impresos. Y en su primera página aparecer visible la tasa, que era la referencia acerca del precio al que deberían venderse al público.
Para la primera parte de El Quijote su precio aprobado, sin encuadernar, fue de 290 maravedíes y medio. Este importe resultó de multiplicar los 83 pliegos en que estuvo contenido su texto, por tres maravedíes y medio por pliego.
Diez años después, la segunda parte tuvo como precio al público 292 maravedíes. Este importe corresponde a 73 pliegos, a razón de 4 maravedíes por cada pliego. En próxima entrega se explicará en qué consistía esta unidad monetaria, así como cuál era entonces el poder adquisitivo de 290-292 maravedíes.
Por lo pronto resulta interesante apuntar que en la década que va de 1605 a 1615, el costo del pliego de papel impreso pasó de 3.5 a 4 maravedíes. Lo cual significa un alza de escasamente 14% en 10 años.
Pues bien, de la segunda parte de El Quijote, sólo se conoce en la actualidad la existencia de 7 ejemplares de su edición original, también conocida como edición Príncipe.
La última vez que ambos tomos fueron objeto de compra-venta, a través de la casa de subastas Sothebys de NY el 9 de noviembre de 1989, se vendieron en 1 millón 800 mil dólares. Se supone que la segunda parte debe tener mayor valor, porque de la primera se conocen en la actualidad entre 17 y 18 ejemplares. Continuaremos.
jagarciav@yahoo.com.mx