FMI: ‘LO PEOR ESTÁ POR VENIR’... LA PAZ NO ES ESTRATEGIA
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Es urgente para Estados Unidos sostener su supuesto “control” económico, político y militar global y añora su mundo unipolar. El pasado 12 de octubre el presidente Joe Biden presentó la “Estrategia de Seguridad Nacional”, porque su país debe “liderar con fuerza y propósito... la batalla por la democracia y la autocracia” ¿habló de posibles acuerdos para la Paz?... nada.
De ahí la necesidad de echar abajo la colaboración económica y militar construida por el mandarín Xi Jinping y el nuevo zar Vladimir Putin, y la cercanía de estos con otros países de Euroasia, Asia y América Latina con gobiernos de centro-izquierda, pero sobre todo con países africanos con acuerdos de cooperación económica.
Las provocaciones para que iniciara la guerra eslava actual fueron maniobras del imperio norteamericano para imponer sanciones a la economía rusa para su colapso y provocar la caída de Putin e imponer un gobierno títere, con esto destruir la alianza chino-rusa de la “nueva ruta de la seda”; como sucedió con el golpe de Estado en 2014 en Ucrania, cuando posteriormente “ganó las elecciones” el cómico de televisión Volodímir Zelenski.
“Lo peor está por venir y para muchas personas 2023 se sentirá como recesión... se acumulan nubes de tormenta” (11-11-22), no extraña esta advertencia de Pierre-Oliver Gourinchas, economista en jefe del Fondo Monetario Internacional, quien proyecta el crecimiento económico global en 3.2 por ciento en este año y para el siguiente en 2.7 por ciento; además, reconoce que la guerra ucranio-rusa “sigue desestabilizando poderosamente la economía mundial” y en Europa ha provocado una “crisis energética severa”, pero nunca se expresará que las sanciones económicas al país ex socialista son maquiavélicamente planeadas. Del FMI no ha salido una sola propuesta para detener el conflicto.
La debilidad de la economía china (3.2 por ciento de crecimiento en este año según FMI) es otro objetivo colateral -no explícito- de la estrategia gringa, que genera efectos negativos en muchas naciones con exportaciones al gigante asiático; en su decadencia, el imperio afecta el bienestar de cientos de millones de personas.
Aumentar tasas de interés por parte de los bancos centrales no ha tenido efecto significativo en contención de precios en sus respectivos países, ya que la causa del incremento inflacionario no es por demanda agregada, sino por distorsiones de oferta. La Reserva Federal estadounidense agudiza el problema, porque aumentar tasas a un rango de 3-3.5 por ciento aprecia el dólar, lo cual encarece sus exportaciones y presiona aún más el alza de precios en países importadores.
Peor aún, tasas altas encarecen los pagos de deudas acumuladas y la contratadas por países subdesarrollados para enfrentar la crisis sanitaria (el gobierno mexicano no contrajo deuda para tal efecto).
Positivamente en México: consumo privado se ha mantenido por remesas y amplia dispersión de recursos públicos en programas sociales, así no se observa descontento social como en muchos países desarrollados y subdesarrollados; el Programa Contra la Inflación y la Carestía da visos de contener el ritmo inflacionario; tipo de cambio se mantiene promedio en 20 pesos por dólar (por remesas, tasas de interés en 9.25 por ciento e inversión extranjera directa en ascenso); recaudación en aumento (ISR e IVA); y 1.9 por ciento de Producto Interno Bruto acumulado a junio pasado. Para nuestro país el FMI reduce la proyección del PIB en 2.1 por ciento para 2022 y 1.2 por ciento en 2023.
El multimillonario Elon Musk propuso una estrategia de pacificación, con referéndum organizado por la ONU en Donetsk, Lugansk, Saporiyia y Jerson (más de 80% rusoparlantes) para que la población decida si su futuro será con Ucrania o con Rusia. El gobierno ucraniano se opuso rotundamente a la “indignante propuesta” y sobresale la rabiosa respuesta del embajador ucranio en Alemania, Andrij Melnyk: “vete a la mierda, es mi respuesta muy diplomática para ti”. Esto lo explica todo.
Continuarán inflación global y elevadas tasas de interés hasta el próximo año o más y posible recesión económica mundial. Para el imperio y sus dóciles aliados la guerra es necesaria... la paz no es estrategia.
