La reapertura económica de China y su impacto en México
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El pasado 8 de enero, China volvió a abrirse literalmente al mundo, después de haber cerrado sus fronteras desde marzo de 2020 debido a la pandemia del COVID-19. Este es un tema importante para todo el mundo, y especial para México por las implicaciones que se tendrán en el ámbito económico que es tema central de esta columna. Por ello es necesario analizar algunos de los aspectos de mayor impacto.
Para empezar la reapertura de China generará un incremento marcado en los precios del petróleo y el gas, que por cierto al momento de escribir está aportación ya ha empezado a ocurrir. Dado su tamaño en producción y en habitantes, es de esperar que, al volver a abrir sus empresas, que estuvieron cerradas por más de dos años, las necesidades de energía para el arranque serán muy grandes. Además, las nuevas contribuciones de productos chinos al mercado mundial dependerán ampliamente del consumo de petróleo y gas en su fabricación y transportación. Nuevamente veremos a toda la flota de cargueros chinos trabajando al 100 por ciento, ya que hasta antes de la apertura no operaba más allá del 40 por ciento. Esto se ha traducido en rezagos en las exportaciones, pero ya esta misma semana podrán darse por descontados algunos montos e incrementar la oferta mundial de bienes. No hay que olvidar que China representa el 19 por ciento de las importaciones norteamericanas, estando a más de 11 mil kilómetros de distancia, mientras que México representa solamente el 14 por ciento estando literalmente a un lado. Se espera que con esta reapertura, China pueda alcanzar más del 22 por ciento de las importaciones totales norteamericanas. En consecuencia, volverá a ser un competidor colosal.
Dado que el coloso asiático volverá con todo su poder a la competencia mundial, es de esperar que la demanda mundial de productos se incremente abruptamente como está sucediendo esta misma semana. En consecuencia, la inflación, en el mejor de los casos, se mantendrá y para algunos analistas hasta se incrementará porque China peleará por las materias primas a nivel internacional que en este momento siguen siendo escasas por la confrontación entre Rusia y Ucrania y las complicaciones económicas en diversas partes del mundo. Sin embargo, los aumentos de precios estarán presentes por esta causa al menos hasta que este año acabe y realmente todos los mercados se estabilicen cuando menos un poco. Ya las primeras señales de esta posibilidad están dándose para esta primera quincena de enero. En México ya la inflación cerró 2022 con un 7.82 por ciento, totalmente dentro de lo pronosticado y la tendencia será a cerrar 2023 con rangos entre 5.5 y 6 por ciento. Para los Estados Unidos, el indicador estará entre el 4 y el 4.5 por ciento. Europa con su mosaico de países podría mantenerse con promedios superiores al 6 por ciento para el cierre de este año.
Otro efecto esperado principalmente sobre México es el del “nearshoring”, pues es seguro que China hará algo para evitar la salida de capitales internacionales de su territorio. También se “rumora” que podría haber una baja de salarios por decreto para motivar a las empresas a quedarse, lo que desde luego, tendría un efecto directo sobre las potenciales inversiones programadas para este año en nuestro país. La revista inglesa “The Economist” plantea la eventualidad de que las inversiones que están saliendo de China se canalicen a países de América del Sur como Brasil o Colombia, que aunque no están cerca de los Estados Unidos, tienen mejores condiciones para la inversión, empezando por mayor abundancia de mano de obra, salarios competitivos (más bajos que México) que compensan los costos de transportación y logística. Por ello, nuestro país deberá crear mejores condiciones para la inversión internacional como por ejemplo construir espacios industriales en los estados fronterizos, capacitar a los trabajadores en las nuevas tecnologías de la información, mejorar la infraestructura carretera y sobre todo, respetar el marco jurídico para que las empresas sientan la confianza de realizar inversiones de largo plazo.
Por otro lado, ahora que la apertura de China se acelera, el turismo internacional ha acrecentado su capacidad de manera notable, tanto para los viajeros que llegan a ese país, como los que salen de allí. Para México es una buena noticia porque podríamos esperar cuando menos un millón de visitantes chinos este año que en este momento tienen dinero en cantidades importantes, derivado de la imposibilidad de gastar por el encierro al que fueron sometidos. Destinos como Cancún y Puerto Vallarta podrían verse favorecidos con la llegada de miles de visitantes chinos ávidos de climas calurosos. Se espera que el gasto promedio por turista suba un 20 por ciento debido a lo mencionado anteriormente y eso representará más ingresos para el país en dólares, situación que favorece una expectativa de un dólar cercano a los 19 pesos para el primer semestre del año. Habrá un importante flujo de turistas para México que vienen bien en una época en que se espera que otros sectores tengan un desempeño reducido por la recesión potencial norteamericana.
Dado el gran volumen de mercancías y una población muy grande, el efecto chino sobre la economía mundial obligará a los bancos centrales del mundo a mantener por más tiempo las políticas restrictivas antiinflacionarias para reducir el efecto económico de los asuntos planteados anteriormente. Para el Banco de México, el primer reto será en 4 semanas cuando se dé la primera reunión del comité de política monetaria. Se necesitará actuar con mucho cuidado, haciendo un análisis muy profundo de la situación en ese momento. Si se da un aumento nuevamente de la tasa de interés, que no era necesaria, podría reducir aún más ya las bajas expectativas de crecimiento económico y hundir al país en una crisis económica, no en una recesión. Si el Banxico se muestra muy laxo, podría nuevamente destapar una burbuja inflacionaria de corto plazo con las indeseables consecuencias.
Todo esto por culpa de la reapertura China, así de importante es su tamaño e influencia mundial como lo demuestran los otros datos.