‘Es un insulto al legado’, afirma familia sobre ‘House of Gucci’ ¿qué tiene que decir Lady Gaga?
Miembros de la conocida dinastía de la moda, expresaron su descontento con la nueva película del director británico Ridley Scott, sin embargo, Lady Gaga está feliz con su trabajo interpretando a Patrizia Reggiani, la exesposa y supuesta asesina de Maurizio Gucci
“House of Gucci” superó las expectativas en taquilla, recaudando 22 millones de dólares durante su primer fin de semana en Estados Unidos, lo que lo convirtió en el estreno más exitoso de drama en los últimos dos años (la última cinta con este título fue ‘Mujercitas’ en 2019). Sin embargo, no todos parecen estar contentos con este triunfo, en un comunicado emitido este lunes por los herederos de Aldo Gucci, quien dirigió la casa de moda durante 33 años hasta mediados de la década de 1980, dijeron sentirse ‘agraviados’ por no haber sido consultados por el director Ridley Scott ni los protagonistas Lady Gaga y Adam Driver.
“La producción de la película no se molestó en consultar a los herederos antes de calificar a Aldo Gucci y a los miembros de la familia Gucci como delincuentes, ignorantes e insensibles al mundo que los rodea, dando a los protagonistas y hechos un tono y una actitud que nunca les perteneció”, señala el comunicado. La familia no solo denunció a la producción, sino también las declaraciones de los miembros del elenco que, según afirma el comunicado, parecen defender a Reggiani.
A pesar de la supuesta narrativa en donde se defiende a Patrizia Reggiani, ella misma ha expresado malestar porque los involucrados en la producción no intentaron consultarla. “Estoy bastante molesta por el hecho de que Lady Gaga me esté interpretando en la nueva película de Ridley Scott sin haber tenido la consideración y la sensibilidad para venir a conocerme”, señaló a la agencia de noticias italiana ANSA en marzo. Pero, ¿qué tiene que decir Lady Gaga respecto a su interpretación?
Al visitar el nuevo edificio de Netflix en pleno Sunset Boulevard de Hollywood, sorprende una de las paredes adornadas con una lluvia de premios Emmy. Solo falta un lugar para el Oscar, porque a pesar de haber recibido 54 nominaciones solo ganó ocho estatuillas que ni siquiera se quedaron para el estudio, porque nunca ganó como Mejor Película... por ahora. La gran apuesta de este año es justamente la verdadera historia de la familia Gucci, protagonizada por grandes estrellas como Adam Driver, Al Pacino, Jared Leto, Salma Hayek, Jeremy Irons y nuestra entrevistada, Lady Gaga.
-¿Conocías la verdadera historia de Gucci antes de leer el guión?- “En realidad yo no sabía nada sobre Gucci antes de leer el guión. Incluso me enteré del caso por esta producción, pero después leí todo sobre Patrizia Reggiani. Sin embargo, decidí no leer el libro porque me di cuenta que podía llegar a influir en mi forma de pensar con tantas opiniones, y no quise que nadie me dijera quién era ella”.
-Según IMDB, Penélope Cruz, Angelina Jolie, Anne Hathaway, Marion Cotillard, Margot Robbie y Natalie Portman habían sido consideradas para tu rol de Patrizia Reggiani, hasta que te contrataron. ¿En algún momento dudaste en aceptar?- “Siempre creí en la visión de Ridley Scott y me encantaba la idea de trabajar con el resto de los actores. Siempre fui una gran admiradora de cada uno de ellos pero también soy una tremenda admiradora del trabajo como actor de Adam Driver, y pensé que los dos juntos podíamos llegar a lograr algo mágico”.
Como la gran protagonista de “House of Gucci”, Lady Gaga interpreta a la verdadera Patricia Reggiani desde el momento que conoció a su exesposo Mauricio Gucci (Adam Driver) hasta los diferentes problemas familiares que hubo con la marca Gucci. Al final, la justicia dictaminó que ella mandando a matar a su exesposo, sin embargo, lo curioso es que la producción contrató a la verdadera ‘Señora Gucci’, Salma Hayek (casada con el actual dueño de la marca) en el rol de la astróloga que ayudó a planear el asesinato, aunque en la vida real Patrizia Reggiani insiste que es inocente y solo pagó porque la astróloga la había amenazado.
-¿Qué opinión tienes de la verdadera Patrizia Reggiani que fue condenada por el asesinato de Maurizio Gucci?- “Yo no la veo como alguien que tiene genes de asesina. Nunca pensé que ella pudiera ser particularmente buena en algo así. Pero esta mujer volvió a la escena del crimen en su propio modo y levantó incluso las manos diciendo: ‘Yo lo hice’. Eso me parece muy interesante. ¿Por qué pasó algo así? ¿Quién era ella? Y yo estoy eternamente agradecida al director Ridley Scott por haberme ayudado a recrear su juventud y mostrarla como alguien joven con ojos dulces que en un 50% pudo haberse enamorado de alguien y en otro 50% pudo haberse enamorado de lo que el nombre de Gucci significa”.
-¿Habiendo vivido tanto tiempo como Patrizia Reggiani, te resultó fácil dejar los traumas adentro del estudio de cine, sin que afectaran tu vida real?- “En cierta forma siento que ella murió al final de la historia, porque había matado a alguien. Yo pienso que sí matas a alguien, te estás matando a ti mismo. Ella pertenecía a cierta clase social muy particular cuando conoció a Mauricio, pero también pienso que nunca se superó socialmente”.
-¿Y en el mundo de la música cuál dirías que fue tu más reciente ‘Momento de Película’?- “Cuando tuve que cantar el himno en la ceremonia inaugural de la Presidencia (de Joe Biden). El día anterior yo había ido a ver dónde tenía que pararme y fui con un chaleco antibalas porque estaba nerviosa de estar en el Capitolio. Alguien me había ofrecido incluso visitar el Capitolio por dentro y yo dije instantáneamente que no quería, solo porque quería entrar y salir. Recién después de ver dónde iba a tener que cantar, al salir me di cuenta que no había querido ver el Capitolio solo porque no quería ver donde había sido la insurrección (cuando Trump insistió en decir que las elecciones presidenciales habían sido un fraude). Así que volví y pedí disculpas, aceptando finalmente la visita. Caminé por todo el lugar como si fuera detective, buscando cierta evidencia que contará la verdad de lo que habíamos visto todos en las noticias. Y cuando encontré una ventana rota, fue como ver el odio de la raza blanca, porque aquel día para mí no tuvo nada que ver Donald Trump. Aquel día para mí fue sobre la supremacía blanca”.
-¿Te refieres a la época del movimiento ‘Black Lives Matter’ donde se destacó tanto la importancia de las vidas de los afroamericanos?- “Es que la vida afroamericana importa, la alegría afroamericana importa. Yo creo que las vidas de raza afroamericana representan lo mejor en nuestro país. Y siendo blanca me parece que tenemos la responsabilidad de aceptar la honesta verdad sobre la historia de nuestro país y admitir que la supremacía blanca no es saludable, para cambiar nuestro comportamiento en el mundo, dónde la libertad sea real para todos. Siendo blancos, tenemos que escribir nuestras equivocaciones sin vergüenza. Tenemos que cambiar nuestras acciones. Y tenemos que hacerlo por nosotros. Es uno de nuestros roles más importantes en nuestra comunidad”.
-¿Qué tan difícil es evitar la política en el mundo del espectáculo?- “Bueno... desde siempre se asumieron muchas cosas sobre mí y yo también creí siempre en la idea de luchar por la igualdad en el mundo. Es lo que yo noté en la comunidad gay donde tampoco hubiera tenido miedo a salir a gritar al Capitolio, al presidente, hablando sobre la igualdad en el matrimonio, ni preguntar sobre sexo en el servicio militar. Y después, con tantos eventos racistas en el país, me di cuenta que me estaba costando hablar. Cuando me preguntaban lo que pensaba al principio no quise equivocarme. Pero después me empecé a cuestionar qué me pasaba y por qué no podía plantear una conversación hasta que me di cuenta que tenía que trabajar sobre mis ideas para poder hablar realmente con honestidad y ver la forma de ser fuerte, buscando la raíz de amor y la verdad, pero comprometida con la gente”.
-¿Con ’House of Gucci’ aprendiste alguna lección social?- “Te diría que la mejor lección que aprendí es lo difícil que es interpretar a una asesina. Así como también aprendí que si prestamos demasiada atención al poder, el dinero y al privilegio, te vas a dar cuenta que el verdadero desastre no es que ella le haya puesto un precio a la vida del esposo. Al final del día no había ni un solo centavo para ella y eso la gente no lo sabe”.