Aunque sobre el papel Turquía tiene normas de construcción que cumplen los estándares actuales de ingeniería contra terremotos, estos protocolos no suelen aplicarse, lo que explica por qué miles de edificios se derrumbaron hacia un lado o de arriba abajo
“Hay muchas imágenes estremecedoras de policías y civiles golpeando y maltratando a quienes supuestamente habían saqueado las ruinas tras el terremoto”, declaró la delegada para Turquía de Human Rights Watch (HRW)