McClung, el ‘desconocido’ que le demostró a las estrellas de la NBA cómo se clava el balón

Mac McClung fue considerado como una elección muy extraña para encabezar el Concurso de Clavadas de la NBA de este 2023. El escolta de 24 años ha jugado apenas dos partidos de la NBA y ni siquiera ha sido esta temporada.

Cuando se anunció su participación, los fanáticos incluso se burlaron de la liga por no haber logrado convencer a estrellas de alto calibre para el evento que alguna vez fue un orgullo en la pausa de media temporada.

Bueno, ahora todos se han tragado sus palabras. McClung se robó el show con una de las mejores actuaciones en la memoria reciente. Cuatro intentos. Cuatro clavadas. Tres puntuaciones perfectas. Un trofeo. En una noche, un jugador del que muchos espectadores nunca habían oído hablar logró unirse a las filas de Kobe Bryant, Vince Carter y Michael Jordan en los libros de historia de los concursos de clavadas.

Puede que McClung no haya demostrado su valía como jugador de la NBA, de hecho, actualmente juega en la G-League, pero desde hace tiempo, nadie pone pretextos de su talento para clavar la pelota.

Comenzó a hacer clavadas mientras jugaba para la escuela secundaria Gate City en Virginia y, en el proceso, rápidamente se convirtió en una sensación en Internet. McClung ingresó al All-Star Weekend con 821 mil seguidores en Instagram, más del doble que otros tres competidores juntos, que sí juegan en la NBA y son “mucho más conocidos” (Trey Murphy III, Jericho Sims y Kenyon Martin Jr.).

Pero ni siquiera estuvo en el primer concurso de volcadas de McClung. En el 2018, participó en el Ball is Life All-American Dunk Contest. No te sorprenderá saber que se llevó el evento con estilo, venciendo al actual escolta de los Rockets de Houston, Kevin Porter Jr., así como a Shareef O’Neal, hijo de la leyenda de la NBA, Shaquille O’Neal, para ganar el trofeo.

A medida que se difundió la noticia de las hazañas de clavarla por parte de McClung, ganó un lugar para ser reclutado. Siempre fue más que un jugador que la clava espectacularmente, pero sus números de anotación explotaron en sus últimas dos temporadas en la escuela secundaria. Después de promediar 29 puntos por juego como junior y anotar 47 en el juego de campeonato estatal de Virginia como senior, se desvinculó de Rutgers y decidió jugar para Patrick Ewing en Georgetown.

Pero el andar de McClung en Georgetown tuvo resultados mixtos. Estadísticamente hablando, McClung tuvo un impacto inmediato al promediar más de 13 puntos por juego como estudiante de primer año. Si bien un récord de 19-14 apenas es de interés periodístico para los estándares de Georgetown, también parecía haber muchas promesas de pasar a su segunda temporada.

Pero luego tuvieron marca de 15-17 en la segunda temporada de McClung, anotando 16 puntos por partido. Se perdió 11 juegos y, después del hecho, quedó claro que las dos partes no estaban en sintonía. McClung se declaró para el Draft de la NBA de 2020 antes de sacar su nombre y anunciar una transferencia a Texas Tech. Según su agente, McClung estaba buscando un papel que Georgetown simplemente no le estaba dando.

“Los comentarios que recibió de los equipos (de la NBA) fueron que querían verlo destacando más”, dijo Daniel Hanzen al Washington Post en ese momento. “Siendo más un creador de juego. No estoy diciendo que no pudo haber obtenido eso en Georgetown, pero no lo demostró en Georgetown. Realmente no tuvo la oportunidad de demostrarlo. Fue jugar sin balón”.

Ewing reclutó una lista repleta de guardias en Georgetown que dejó a todos insatisfechos. Otro titular en el perímetro de Ewing, James Akinjo, también fue transferido después de la temporada 2019-20. Pero si McClung esperaba convertirse en un armador más tradicional en Texas Tech, probablemente se sintió decepcionado por los resultados. Su promedio de asistencias bajó de 2.4 a 2.1 por juego. Después de una temporada en Texas Tech, McClung puso su sombrero en el ring de la NBA una vez más.

Pero luego de tres temporadas universitarias grises obligaron a McClung a tomar el camino más largo hacia la NBA. Firmó un contrato de la Liga de Verano con los Lakers de Los Ángeles en 2021, los impresionó lo suficiente en Las Vegas para ganar un contrato de dos vías, pero finalmente se quedó en la G League. Promedió casi 20 puntos por juego en South Bay, pero solo fue convocado para un juego de la NBA con los Lakers en diciembre de 2021. En abril de 2022, firmó para un solo juego con los Bulls de Chicago. Ninguno de los dos equipos lo volvió a firmar y volvió a ser agente libre.

Apareció brevemente con los Warriors de Golden State en los juegos de pretemporada del equipo en Japón, en octubre pasado, pero tampoco pudo hacerse de un puesto.

Luego aterrizó en los 76ers de Filadelfia. O, mejor dicho, con su filial de la G League: los Delaware Blue Coats.

Su puntuación bajó, pero si necesitaba demostrar su valía como creador de juego, lo ha hecho en gran medida al nivel de la G League. Ha promediado 5.8 asistencias por juego en sus dos temporadas en la G League. Sus rebotes también aumentaron y, aparentemente, los 76ers quedaron lo suficientemente impresionados como para darle una mirada al nivel de la NBA. Apenas el martes pasado, lo firmaron en un acuerdo de dos vías que le permitirá vestirse para Filadelfia cuando sea necesario para el resto de la temporada regular.

Y ahora, luego de que pudo ponerse en medio de todos los grandes reflectores de la NBA, parece que el encanto va a terminar, pues en los próximos días viajará de regreso a Delaware, y estará a disposición de los 76ers para responder a las necesidades que tenga el equipo.

Esta temporada baja, será agente libre y probablemente busque un empleo más permanente con un equipo de la NBA . De no ser así, probablemente aceptará otro contrato bidireccional o de la G League.

Pero está claro que lo visto el sábado por la noche, no será lo último que se le vea a McClung. Apenas aceptó el trofeo, confirmó que aceptará la invitación si la NBA quiere que participe en el concurso de volcadas de la próxima temporada, y dijo que está listo para enfrentar a “quien quiera” competir con él.

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Dado el espectáculo que dio ante la multitud del sábado, es probable que enfrente una competencia más dura la próxima vez. Zion Williamson incluso mencionó que está considerando participar la próxima temporada, si es que no está lesionado.

No importa a quién se enfrente, McClung participará en el concurso de volcadas de 2024 como un hombre mucho más famoso de lo que era el sábado. Ya no es solo un jugador de la G League. El sábado nació una estrella, y es posible que no entregue su campeonato de volcadas en los años venideros, porque si algo demostró en la duela de Utah, fue que sabe cómo clavar la pelota.