Historia de una mordida

Especial
/ 19 noviembre 2010

    El norteamericano Bill Dwyer planeó un viaje en moto desde Chicago hasta Argentina.

    Al pasar por Castaños, Coahuila, lo pararon por supuesto exceso de velocidad.

    En el video se escucha al policía diciendo: "No me traje el block de infracciones"; luego dice: "You speeding". Bill afirma que probablemente sí iba por encima del límite de velocidad, pero aclara que iba a la misma velocidad que el flujo del tráfico.

    El policía empieza diciéndole "ticket", multa. Bill pregunta: "How much?" (¿cuánto?). El policía responde: "You detenido"; luego le hace señas de que suba a la patrulla.

    Después, el oficial dice: "You mush?". Supongo que quería preguntar ¿cuánto traes? o ¿cuánto me das?, pero Bill no le entendía.

    El uniformado insistía: "You mush?"; luego se desesperó y le pidió una pluma al oficial que lo acompañaba.

    El ahora cesado -con el inglés más malo que su honestidad- le escribe la cantidad de 100 y dibuja un monito, lo señala y le dice: "You". Luego le señala el número 100 y le dice: "Mush".

    Después, el guardián del orden se pone el índice en el pecho dando a entender que se los diera a él. El poli dice: "No one hundred".

    Bill le pregunta: "¿Pesos?". El uniformado responde: "No, dólares".

    Le vuelve a decir a Bill: "No, one hundred dollar or you.", y le dibuja unos barrotes al monito, simulando una cárcel.

    Luego le dice: "Come on", y se dirige a la patrulla. Bill asume que ya se lo van a llevar a la cárcel. Así que Bill saca el dinero y se lo da al oficial.

    Mientras lo hizo, orientó la cámara de video de su casco y se alcanza a ver el logo de Coahuila en la patrulla. "You bye bye, take caution", dijo el policía.

    Bill dice que se retuerce cuando se ve a sí mismo todavía pidiéndole perdón al policía.

    Para ser corrupto las barreras del lenguaje no fueron obstáculo; el policía estaba practicando el comercio internacional, la entrada de divisas el país. Qué ejemplar, qué forma de dar la bienvenida al país. Y luego por qué la mala imagen de México en el extranjero.

    También por eso baja la inversión extranjera que necesita el país para mejorar la economía.

    Es una vergüenza lo que el video exhibe. Este tipo de acciones dañan la imagen del estado y afectan al turismo que pudiera animarse a visitarnos.

    Algunos malos policías, en lugar de hacer su trabajo, se dedican a extorsionar ciudadanos. Hasta que nos damos cuenta es cuando se reacciona despidiéndolos. Lo extraño es que entre los despedidos no se menciona el nombre del oficial Matías Romero, que aparece en el video presentándose como tal.

    Diputadas de Coahuila declaran: "Ya basta de corrupción policiaca". ¿Qué acaso no están en el poder? ¿No tienen ninguna autoridad? ¿O por qué reclaman en lugar de hacer algo que puede estar en sus manos?

    Qué bueno que propongan un punto de acuerdo para que los directores que permitan corrupción sean cesados. Pero por qué no lo hicieron antes y nohasta la coyuntura y la presión de un video que ha sido visto por más de 32 mil personas.

    Mientras tanto, esos polis siguen "trabajando", hasta que alguien como el norteamericano los exhibe.

    ¿Llegará el momento en que tendremos que andar todo el tiempo conectados, como Bill, a una microcámara para protegernos y exhibir la corrupción?

    Parece que con ese tipo de denuncia y exhibición es la única manera en que empiezan a cambiar las cosas.

    Columna: Ecos de la ciudad

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