Sociedad civil exige a G20 crecimiento inclusivo y más transparencia
COMPARTIR
TEMAS
"Si los beneficios sólo van al 5% de la población que más tiene, no es un auténtico crecimiento, sino que contribuye a cimentar la inequidad", añadió Costello
Brisbane, Australia.- El crecimiento económico debe ser inclusivo y servir para mejorar la vida de millones de personas, no sólo de una minoría, reclamaron hoy a los líderes del G20 los activistas del C20, la plataforma creada para el diálogo entre los dirigentes mundiales y las organizaciones de la sociedad civil.
"La sociedad civil ha perdido la paciencia" y no dejará de reclamar a los gobiernos de los principales países desarrollados y emergentes que reduzcan la desigualdad y combatan graves problemas como el de los paraísos fiscales, señaló hoy en Brisbane, Australia, Tim Costello, presidente del C20.
"El objetivo (fijado por la presidencia australiana) de lograr un dos por ciento de crecimiento extra por encima de lo previsto hasta 2018 tiene que beneficiar a los hogares más pobres en todos los países del G20", señaló a dpa Costello, que dirige la organización de ayuda a la infancia World Vision en Australia.
"Si los beneficios sólo van al cinco por ciento de la población que más tiene, no es un auténtico crecimiento, sino que contribuye a cimentar la inequidad", añadió Costello. "Entonces el G20 habrá fracasado", porque "la infraestructura social es tan importante como la infraestructura pura y dura".
"No nos engañemos: Un mayor crecimiento equivale a una mayor ganancia, no necesariamente a más empleos", subrayó Costello más tarde en la rueda de prensa de presentación de las propuesta del C20.
Por eso, es importante que el G20 se comprometa con políticas que fomenten el empleo, ante la realidad de los 600 millones de jóvenes que están sin trabajo en la actualidad. "Hay países del G20 donde uno de cada dos jóvenes no encuentra trabajo", subrayó la responsable de este tema en el C20, Sally Sinclair, en alusión a naciones como España.
Además, la sociedad civil reclamará que en la cumbre de mañana y el domingo se aprueben medidas para una mayor transparencia fiscal y para que se levante la opacidad que rodea a las empresas para conocer realmente quiénes son sus dueños y los que se benefician y combatir la evasión fiscal.
Hace falta un Plan de Acción que proteja a los informantes, revele quiénes son los dueños de las empresas y acabe con el secretismo y con los sobornos en el extranjero, señaló el responsable del tema en el C20, Greg Thompson.
La Coalición para la Transparencia Financiera (FTC) reclamó por su parte que se obligue a las multinacionales a revelar sus actividades en todos los países y que se haga un intercambio automático de datos fiscales.
Respecto del cambio climático, el C20 destacó el acuerdo sellado esta semana entre Estados Unidos y China para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Durante la cumbre Asia-Pacífico celebrada en Pekín, Washington prometió reducir sus emisiones en un 28 por ciento para 2025, y China a dejar de aumentarlas para 2030.
El tema del cambio climático no es sólo una cuestión social, sino fundamentalmente económica, porque de que se frene el problema depende la vida de millones de personas en los países en desarrollo pero también en los ricos, subrayaron los activistas. Sobre todo porque los países del G20 son responsables del 80 por ciento de las emisiones de gases de efecto invernadero.
"Incluir a la sociedad civil en el debate ha contribuido a la legitimidad del G20", sentenció a su vez Cassandra Goldie, vicepresidenta del C20.
Y Costello destacó que si no fuera por la sociedad civil que se manifestó en 2009 en Londres, el tema de la evasión fiscal no habría sido incluido en la agenda del bloque. "Se trata de las personas". Y estas se ven afectadas tanto por lo que se decide como por lo que no se decide en el G20, que concentra a la mitad de los pobres del mundo, añadió.