Demandan a centro comercial y marcas de Paraguay por usar nombre "Jesuitas"

Internacional
/ 23 diciembre 2015

El Shopping Jesuitas Plaza fue inaugurado en noviembre pasado en un acto al que asistió el presidente paraguayo, Horacio Cartes, en Ciudad del Este, ciudad fronteriza con Brasil.

ASUNCIÓN.- La Compañía de Jesús informó hoy de que solicitó por la vía judicial que un lujoso centro comercial, una marca de alimentos y otra de medicamentos de Paraguay dejen de usar el nombre de "Jesuita" o "Jesuitas".

"El propio Gobierno General de la Orden ha expresado desde Roma su preocupación por el uso irregular del nombre y ha dado instrucciones de defenderlo ante la Justicia, en resguardo de la imagen de la Compañía y a fin de evitar confusión en los fieles", dice un comunicado.

El Shopping Jesuitas Plaza fue inaugurado en noviembre pasado en un acto al que asistió el presidente paraguayo, Horacio Cartes, en Ciudad del Este, ciudad fronteriza con Brasil.

La demanda argumenta que el nombre Jesuitas Plaza "identifica falsamente a una orden religiosa de la Iglesia Católica con actividades comerciales. Esto significa inducir a engaño a los consumidores, pues se los impele a que crean que detrás del emprendimiento se encuentra la Compañía de Jesús".

El comunicado explica que los casi quinientos años de trayectoria de la orden, que tiene en su haber al actual papa Francisco o a Roque González de Santa Cruz, el único santo paraguayo, no debe de ser mezclado con los intereses comerciales de determinados grupos.

"En el caso particular del muy promocionado Shopping Jesuitas Plaza, este identifica una institución cuya misión es el servicio a la fe y a la evangelización con la venta de productos, servicios de comida y espectáculos", se lee.

"Es un aprovechamiento indebido de nuestro modesto esfuerzo varias veces centenario en defensa de la fe, la cultura y la educación", agrega.

Además, la Compañía resalta que la ubicación del complejo comercial en la triple frontera (argentino-paraguayo-brasileña), proyecta su nombre comercial a un nivel internacional, lo que "también afecta negativamente a los jesuitas del Brasil y de la Argentina".

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