Mujeres exigen alto a la violencia: ‘Y la culpa no era mía... el violador eres tú’
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Este año miles salieron a las calles a exigir que los gobiernos y la sociedad frenen la violencia de género en el mundo
Este 2019 las mujeres alzaron la voz para exigir un mayor compromiso de los gobiernos y la sociedad para poner un alto a la violencia de género y los feminicidios, que hasta septiembre había cobrado 2 mil 833 vidas.
Aunque el movimiento feminista no es nuevo, este año tuvo un protagonismo especial en los medios de comunicación y no pasó desapercibido por las masas.
De entre todas las manifestaciones realizadas por grupos feministas, la del 16 de agosto fue la que causó más polémica en México. Ese día, miles de mujeres salieron a las calles para exigir justicia por el abuso sexual que sufrió una joven, también exigían que se esclarecieran los feminicidios que continúan impunes en el País y que cada vez son más numerosos.
La movilización se desplazó por el paseo de la Reforma, llegó al Ángel de la Independencia, quizá el monumento más representativo para los mexicanos, y el contingente lo vandalizó.
Las imágenes del monumento lleno de pintas y consignas feministas le dieron la vuelta al mundo.
Sobresalían unas letras enormes: “México feminicida”.
Las opiniones se polarizaron, por un lado estaban los que denunciaban que esos hechos no solucionaban los crímenes contra las mujeres.
Por el otro estaban quienes criticaban que hubiera personas más indignadas por los monumentos rayados que por las mujeres violadas o asesinadas.
Las movilizaciones continuaron en los siguientes meses, pues los delitos contra las mujeres no cesaron. Mientras que los detractores del feminismo reclamaban manifestaciones pacíficas.
El 25 de noviembre, con motivo del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, el grupo “Lastesis” organizó el performance “Un violador en tu camino”, el cual se replicó en varios países del mundo, uniendo en una sola voz el reclamo de miles de mujeres: “Y la culpa no era mía, ni dónde estaba, ni lo que hacía; el violador eres tú”.