Tiempo de Navidad

La época decembrina es la más bonita del año, pero también la más complicada. Uno debe ir a visitar a todas las personas que no vio durante el año, comprar regalos para familias y amigos, hacer de comer (aunque no lo hagas en casa) y además comprar algo bonito de ropa para ponerte en navidad, y sí, claro, las fotos. No las olvidemos.

Ser mujer en diciembre se puede volver una tarea casi imposible, sobre todo si tienes a tu cargo niños chiquitos. Si bien es cierto que a través de los duendes y Santa Claus puedes lograr que tus hijos se comporten por un par de horas, también tienes que pensar un poco más de lo normal para hacer todas las historias alrededor de ellos. Aunado a que te toca, aunque no sea tu talento o gusto, ofrecerte a hacer algo para la cena, buscar los regalos de la familia (que a veces ni conoces bien) y tratar que todos saluden y den las gracias al llegar y sobre todo que sonrían para la foto.

Es esa época del año que no importa si estás de acuerdo o no con algún familiar, o si alguien durante el año hizo o no algo que debía que provocó algún malentendido. La idea sería llegar y cenar todos tranquilos como si no pasara nada.

No me malentiendan. Me encanta la época navideña. Solamente que considero que gastamos mucho tiempo y dinero en arreglar todo y al final nuestra cabeza está en todo y nada a la vez.

Tal vez sería mejor que invirtiéramos en abrir esa conversación con este tío, tía, amiga, amigo, primo o prima que hemos estado evitando por largo tiempo. Decirles eso que no nos gustó o nos hizo sentir mal que hicieron o dijeron. Tal vez sería más provechoso llevar a todas las niñas y niños de la familia a ver luces navideñas y contarles un cuento que estar corriendo por todas las tiendas buscando algo que creíamos que era lo que más querían. Tal vez esa cena, que fue demasiado, podríamos ir como familia a compartirla con quién le tocó trabajar (bomberos, policías, empleados de gasolineras o tiendas de conveniencia) o quien la está pasando mal (familiares en hospitales, orfanatorios, casas del migrante), tal vez sería una cena más cálida que la que siempre tenemos en casa.

Vivimos en una época que todo ocurre de una manera tan rápida que no nos da oportunidad de pensar en qué estamos haciendo y mucho menos por qué lo estamos haciendo.

Vivimos en una época que tenemos tantas cosas a nuestro alcance que no sabemos qué queremos realmente.

Vivimos en una época en donde la información nos manipula y consideramos que lo que dicen los otros es nuestra propia opinión.

Vivimos en una época que hablar de amor y magia suena como anticuado, cuando es el verdadero motivo de estas fechas.

Así que, estos días, haz una pausa y reflexiona, ¿qué podrías hacer diferente estas fechas?

@garciacecy_

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