Un ejercicio reflexivo sobre la justicia electoral

Opinión
/ 26 junio 2022
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El proceso electoral 2021 constituyó uno de los ejercicios democráticos más importantes y complejos en la historia del estado mexicano moderno, al celebrarse elecciones concurrentes entre los Estados y la Federación. Por mencionar algunos datos, se renovaron 21 mil 300 cargos de elección popular (ayuntamientos, gubernaturas, juntas municipales, sindicaturas, regidurías y diputaciones locales y federales).

La complejidad del proceso trajo como consecuencia que las autoridades electorales, tanto administrativas como jurisdiccionales, se enfrentaran a diversos retos, entre ellos la interpretación sobre el alcance de la reforma “Paridad en Todo”; la posible declaración de nulidad de elecciones por violencia política en razón de género, los efectos del crimen organizado o las violaciones al principio de equidad en la contienda, así como la influencia de las redes sociales en las campañas políticas.

Con el fin de hacer un ejercicio académico de alto debate reflexivo, a partir de la discusión de las decisiones que los tribunales electorales resolvieron a la luz de dicho proceso electoral, la Academia Interamericana de Derechos Humanos y la Escuela Judicial Electoral del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, en conjunto, organizaron el “Observatorio Judicial Electoral: Sentencias relevantes del TEPJF en el proceso electoral 2021”, de forma híbrida (presencial y online).

Este Observatorio se llevó a cabo los días 23 y 24 de junio en las instalaciones de la Academia IDH, ubicadas en la Ciudad Universitaria, campus Arteaga de la Universidad Autónoma de Coahuila. En este evento, abierto y plural, participaron expertos y expertas internacionales y nacionales, investigadoras e investigadores de la Escuela Judicial Electoral y de la Academia IDH, así como autoridades electorales de nivel federal y local.

Las actividades incluyeron un diálogo inaugural a cargo del consejero presidente del Instituto Nacional Electoral, Lorenzo Córdova Vianello, quien habló sobre la importancia de los Observatorios Judiciales para los sistemas democráticos. Dentro de las cualidades, el consejero resaltó que este tipo de ejercicios académicos enriquecen el espacio de debate y las reflexiones abonan a la perspectiva crítica sobre el contenido y alcance de los derechos humanos, en particular de los políticos. Posteriormente se desarrollaron diez mesas temáticas.

La selección de casos no fue aleatoria. Por un lado se identificaron las sentencias más relevantes del proceso electoral 2021, las cuales permitieron construir o consolidar líneas jurisprudenciales y marcan precedentes importantes para los siguientes ejercicios democráticos en el País. Por otro lado, se tomó en consideración el contexto de emergencia sanitaria provocado por el COVID-19.

A mi consideración, los temas abordados en las distintas mesas se pueden dividir en tres grandes rubros:

En el primero se hizo referencia a la discusión sobre la importancia de la equidad en la contienda y la tensión con otros derechos y principios como la libertad de expresión, el acceso a la información pública, la libertad de culto y la neutralidad en el uso de programas sociales. Además, se analizaron conflictos en los que se utilizaron recursos públicos e intervinieron diversos agentes (por ejemplo, la Iglesia).

En segundo lugar, se habló de acciones afirmativas y protección de grupos vulnerables, visibilizando la desigualdad histórica, estructural y social que impiden o dificultan el libre ejercicio de los derechos político-electorales a favor de mujeres, personas afrodescendientes, indígenas, migrantes, entre otros. En estas mesas se llegó a la conclusión que resulta fundamental la implementación de políticas públicas y reformas pensando en un sistema electoral del futuro que represente la pluralidad social en México.

Finalmente, el tercer rubro abordó aspectos procedimentales, incluyendo reflexiones sobre el alcance del principio constitucional de representación proporcional, los elementos para anular una elección y el control de actos parlamentarios.

Es importante resaltar que las sentencias, en su conjunto, describen y resuelven, desde el plano judicial, la realidad electoral mexicana. Además, permiten materializar los derechos políticos que, debemos de recordar, son derechos humanos, por lo que coadyuvan a la reivindicación de dichas prerrogativas (como el votar y ser votado); fortalecen el puente institucional y se avanza en la consolidación de la democracia.

Cabe destacar que de acuerdo con el modelo de educación jurídica por el que se han inclinado la Academia IDH y la Escuela Judicial Electoral, la realización de observatorios judiciales como metodología para la enseñanza del derecho permite analizar el quehacer jurisdiccional desde una perspectiva imparcial e incluyente que, al mismo tiempo, sirve para socializar, evaluar y discutir líneas jurisprudenciales y sentencias importantes, en este caso por parte del TEPJF, lo que revalora el lugar del derecho electoral en México, y abona en la transparencia y la rendición de cuentas bajo la perspectiva de la justicia abierta.

La autora es investigadora
del Centro de Derechos Civiles
y Políticos de la Academia
Interamericana
de Derechos Humanos

Este texto es parte
del proyecto de Derechos Humanos de VANGUARDIA
y la Academia IDH

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