Yo necesito tiempo para despertarme, cambiar de tema, cambiar de dirección, volver a la atención después de una distracción. ¿Es algo malo?

COMPARTIR
“Espera tantito, estoy dimorda aún”. Sí, así envié el mensaje. ¿Tú has tenido momentos así? Son los momentos cuando acabamos de despertar, o no tanto, los momentos en que nada tiene sentido aún, en los que aseguramos estar en camino al aeropuerto para un vuelo a Alemania que sale en cinco minutos. Nos falta el proceso de recordar dónde estamos, quiénes somos, qué día es, y tantas realidades más. No siempre estamos en un momento propicio para dar información o responder preguntas. Con frecuencia, yo hablo en el idioma que no corresponde a la persona con quien estoy en el momento. Incluso me ha pasado que despierto, después de una de las rarísimas siestas que llego a tomar, en un ataque de llanto.
Pasar de una actividad a otra, de un momento a otro, de un tema a otro, tiende a costar un poco de esfuerzo. O ¿será que eso es algo que me pasa a mí? Y algo similar pasa con las distracciones que surgen en el transcurso de cualquier día normal. Mi padre me decía, “A penny for your thoughts.” Significa que quería saber qué era lo que andaba pensando, contemplando. Siempre he pensado mucho. Me pierdo fácilmente en mundos de fantasía, en solucionar cualquier situación que me pesa, en inventar mundos alternos, en imaginar escenas imposibles, en soñar... No tiene nada de extraño supongo, pero a veces me viajo tanto que tardo en volver al mundo “real”. Y confieso que a veces preferiría no volver.
¿Cuáles son las situaciones de distracción que te suceden a ti? Y ¿cómo manejas esas situaciones? ¿Les debemos a otros una manera de manejar nuestras distracciones y desconexiones de una manera que no los destemple? ¿O podemos esperar que otros también se acomoden y comprendan cuando yo les escribo, “Estoy dimorda.”? Siempre he requerido un tiempo más que menos corto o largo para reubicarme. Es como ir caminando en una dirección y tener que dar la vuelta repentinamente, tal vez porque alguien me habló o porque se me olvidó algo. Me cuesta un cierto esfuerzo. ¿Cómo lo manejas contigo mismo y con otros?