Coco Chanel, ¿la primera feminista en la historia de la moda?

Gabrielle ‘Coco’ Chanel fue una de las diseñadoras de moda más influyentes del siglo XX. Sombrerera de formación, fue más allá de los sombreros para convertirse en una rebelde y una pionera del mundo de la moda, creando un nuevo estilo de sastrería que liberó a las mujeres de los corsé y los volandos de encaje, ofreciéndoles camisas y pantalones en su lugar.

“Nada es más hermoso que la libertad del cuerpo”, dijo una vez, y sus diseños reflejaban esas palabras: las siluetas de Chanel eran fluidas y andróginas, sus diseños sueltos y, en el caso de su icónico ‘pequeño vestido negro’, se ajustaba perfecto a cualquier cuerpo. Chanel quería que las mujeres se movieran y respiraran en su ropa, al igual que los hombres en la suya. Su trabajo fue, en muchos sentidos, una forma de emancipación femenina.

Este lunes se cumplen 51 años desde la muerte de Chanel a los 87 años, sin embargo, su legado perdura y sigue inspirando a la industria de la moda. Además de revolucionar la forma en que nos vestimos, la diseñadora ayudó a formar un nuevo ideal de lo que podría ser una marca de moda: una fuerza que lo abarca todo y que puede ocuparse de todos los aspectos de la vida de una mujer, desde la vestimenta formal hasta los guardarropas casuales.

Durante los últimos años, los mensajes feministas han ocupado un lugar especial durante las semanas de la moda, siempre recordando el mensaje que dejó Chanel: Hacer ropa que convierta a las mujeres en personas libres.

¡Adiós a los vestidos!

Chanel no inventó los pantalones de mujer, ya habían entrado en los armarios durante la Primera Guerra Mundial, cuando las mujeres comenzaron a aceptar trabajos tradicionalmente realizados por hombres. Pero sin duda, ella los popularizó como una prenda de moda. De hecho, a la diseñadora le gustaba usar pantalones (a menudo los tomaba prestados de sus novios), al principio parecía atrevido, sin embargo, con el tiempo se convirtió en una pieza básica para las mujeres.

‘The Little Black Dress’

En 1926, Vogue publicó un dibujo de un sencillo vestido negro hasta la pantorrilla confeccionado con crespón proveniente de China. Tenía mangas largas y estrechas y una cintura baja, y estaba adornado con un collar de perlas. La revista lo describió como el ‘Ford de Chanel’, refiriéndose al popular ‘Modelo T’ en ese momento. En otras palabras, era una prenda tan simple que podía ser accesible para cualquier comprador: “una especie de uniforme para todas las mujeres”, como lo expresó la publicación.

El traje sastre de Chanel

Ya lo demostró Marge Simpson en el capítulo “Scenes from the Class Struggle in Springfield”, el traje sastre de Chanel supuso un cambio radical, no solo para la moda, sino también para la liberación del vestuario femenino. Coco Chanel presentó su primer conjunto de dos piezas en 1920, inspirado en la moda masculina y deportiva, así como en los trajes de su entonces amante, el Duque de Westminster. Deseosa de liberar a las mujeres de los corsés restrictivos y las faldas largas, Chanel elaboró una falda delgada y una chaqueta sin cuello con una tela que entonces se consideraba muy poco glamorosa. Algunas de las mujeres más influyentes de todos los tiempos también usaron el traje de Chanel, desde Audrey Hepburn y Grace Kelly hasta Brigitte Bardot y la Princesa Diana.

Chanel Nº5

Chanel lanzó su perfume Nº 5 del mismo nombre en 1921. Un año antes, según cuenta la leyenda, había desafiado al perfumista franco-ruso Ernest Beaux a crear una fragancia que hiciera que su portador “oliera a mujer, y no a rosa”. El resultado fue una mezcla de 80 ingredientes naturales y sintéticos, que Beaux le presentó con una serie numerada de muestras de perfumes para elegir. Ella eligió el quinto y el resto es historia.