‘Licenciado Ancira tenga piedad de mi hija’; clama trabajadora de AHMSA por seguro médico y pensión

Una madre desesperada por mantener con vida a su hija, la cual es trabajadora de la planta siderúrgica 1 de Altos Hornos de México, clamó ayuda a Alonso Ancira Elizondo, principal accionista de esta empresa para que le regrese su seguro de gastos médicos mayores y así continuar atendiendo las enfermedades y malformaciones que su hija tuvo desde su nacimiento.

“Licenciado Alonso Ancira tenga piedad de mi hija”, expresó en medio del llanto Reyna Isabel Herrera Romo, quien reveló a VANGUARDIA el calvario por el que pasan ella y su hija, Belinda Guadalupe, desde el momento de su nacimiento.

Su hija al nacer registró malformaciones en cara, nariz, oído, en el recto, ano y vagina, además en la columna, en los riñones y en su corazón -por solo mencionar algunos-, por lo que tiene que estar medicada todo el tiempo y requiere de constantes cirugías.

Todo esto se derivó porque durante el embarazo de Reyna, quien tiene laborando 16 años en el Laboratorio Metalúrgico en planta siderúrgica 1, estuvo expuesta a sustancias químicas peligrosas por no contar con el equipo de seguridad adecuado en ese entonces, realizando jornadas de trabajo para cuatro personas en un solo turno y esto causo daños irreversibles en su pequeña cuando nació.

“El caso de mi hija es muy especial, ya que trabajé durante mi embarazo en condiciones, seguridad e higiene no adecuadas en el área de química del laboratorio metalúrgico, Siderúrgica 1, trabajaba sola en turno, demasiadas horas con sustancias químicas peligrosas por orden de mi jefa en ese entonces. No había equipo de seguridad necesario y así trabajamos succionando diferentes sustancias químicas peligrosas, no había perillas succión”, dijo

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Afirmó que en el área no había extractores para sacar los vapores químicos, no contaban con mascarillas y guantes para proteger sus manos, y aun así tenían que limpiar la campana de extracción con los derrames químicos.

Al nacer la pequeña, le declararon los médicos que las malformaciones era porque ella habría consumido drogas o inhalaba sustancias tóxicas y ahí informó la manera en que se encontró trabajando durante su embarazo.

Expuso que la problemática la corroboró el doctor Miguel Ángel Bonilla mediante una investigación, quien fungió como gerente general de Medicina de Trabajo en AHMSA y este, a su vez, informó a Alonso Ancira Elizondo, quienes reconocieron el daño a la salud de la trabajadora y su hija.

Desde ese entonces, el rey del acero apoyó con todos los gastos a la madre, “como un acuerdo entre empresa y trabajador”, sin embargo, nunca hubo un convenio firmado de forma oficial, todo fue verbal.

A través del doctor Bonilla, le brindaba recursos para medicamentos, consultas, pañales, gastos de traslados al Hospital Zambrano Hellion en San Pedro, Nuevo León, préstamos especiales de hasta 100 mil pesos, e incluso, compró en ocasiones aparatos que la niña necesitaba y costaban hasta 60 mil pesos.

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A la trabajadora le otorgaron permisos constantes con goce de sueldo para la atención debida de su hija.

Al ser una empleada de confianza con derecho a seguro de gastos médicos mayores, la madre de familia pudo costear las operaciones de su hija, no obstante, debido a la situación crítica de la empresa se les anunció desde el mes de febrero que se suspendió este beneficio para los empleados, y al no contar siquiera con el pago de su sueldo, la situación se ha complicado para Reyna y su hija Belinda.

“Me encuentro muy desesperada, mi hija necesita medicamentos, estudios, atención médica. El día de hoy no cuento con dinero para llevarla al hospital, también por el pago de la quincena”, expresó.

Belinda actualmente requiere medicamentos para desinflamar riñón y vejiga, otra de las malformaciones que tiene la pequeña es en el intestino, por lo que le hicieron una colostomía y dejó secuelas de peritonitis.

También registra malformación en el ano y ya fue operada, pero más adelante requerirá otra cirugía; tiene malformación en la columna y requiere otra cirugía luego de haber pasado por terapias para poder caminar; malformación en el corazón donde tuvo perforaciones y requirió tratamiento; malformación vaginal, ha requerido reconstrucción y quedan otras más pendientes; malformaciones en uretra, que origina infecciones constantes; tiene un riñón más pequeño y reflujo, requiere estudios para resolver el problema con cirugía; malformación en vejiga y en su hígado; malformación en su rostro, nariz y oído; malformación y descalcificación en todas sus piezas dentales, malformación en la vista, mantiene incontinencia urinaria y fecal, además registra crisis convulsivas.

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Reyna realizó una carta a Alonso Ancira Elizondo en el pasado mes de febrero, misma que no ha tenido respuesta. Ahí le expuso su necesidad por obtener de nueva cuenta el servicio de gastos médicos mayores para brindar atención a su pequeña.

La carta se entregó a Mónica Elizondo, directora de Recursos Humanos, para que le fuera entregada directamente al titular de la empresa y hasta el día de hoy no ha obtenido una respuesta, mientras que su hija requiere más cirugías y más atención médica.

Reyna ha intentado contratar un seguro de gastos médicos por su cuenta; sin embargo, no la aceptan porque la menor tiene muchas complicaciones en su salud.

Por ello y a través de VANGUARDIA, pidió al dueño de la empresa que le otorgue una pensión para su hija y seguro de gastos médicos mayores de por vida, toda vez que si se vende la empresa quedará desamparada.

“Yo he estado agradecida con el licenciado Alonso Ancira por el tiempo que le ha apoyado, pero se necesita más, no nos podemos quedar a medio camino.

“Me atrevo a decir a usted señor Alonso Ancira, tenga piedad en cuanto a la enfermedad de mi hija Belinda Guadalupe, ya que ha sufrido demasiado desde que ella nació y, al igual que yo como madre, me duele mucho ver a mi hija con muchas complicaciones de salud”, clamó.

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Reyna Isabel también llamó al presidente Andrés Manuel López Obrador a que interceda en su problemática para mantener con vida a su hija, que con anterioridad ha viajado a Ciudad de México para buscar ayuda en el área de Atención Ciudadana en Palacio Nacional.

“Al presidente: confío mucho en él, espero me pueda ayudar porque mi hija ha sufrido demasiado, lleva ya muchas cirugías, sinceramente no sé cuántas, han sido muchas. Ha tenido paros cardíacos, ha estado en riesgo muchas veces por esa malformación, que tuve yo contacto con sustancias químicas peligrosas en el área de laboratorio”, finalizó.