Messi-Guardiola, el gran duelo comienza en la sala de prensa

Deportes
/ 28 septiembre 2015

Lionel Messi recordó la etapa de Guardiola como entrenador del Barcelona y aseguró que creció y aprendió "muchísimo" con el actual técnico del Bayern Múnich.

Barcelona, España.- Mirada al frente, semblante serio y sorbo de agua para recuperar la voz. Lionel Messi abandonó hoy la sala de prensa del Barcelona con cara de haber cumplido su misión.

Casi dos años después de su última comparecencia ante los medios de comunicación en la Ciudad Deportiva del club catalán, el crack argentino se colocó ante los micrófonos un día antes de que los azulgrana se enfrenten al Bayern de Múnich en las semifinales de la Liga de Campeones para hablar del momento del equipo, del suyo propio y, sobre todo, de su reencuentro con el técnico Josep Guardiola, ocupante el miércoles del banco rival.

Lo hizo Messi sin rehuir ninguna pregunta, con una sonrisa ante cada cuestión planteada y un discurso sereno y maduro, nada impostado.

A punto de cumplir 28 años, el astro argentino tuvo la entereza para hablar de Guardiola como un entrenador básico en su explosión como jugador y, al tiempo, reconocer que, desde que el entrenador español abandonó el Barcelona, su relación se cortó. 

"Desde que se fue nos cruzamos una vez en una gala de FIFA. Aparte de eso, no tuvimos más relación. Pero tuvimos una relación muy buena cuando estuvimos acá", aseguró hoy Messi, ante unos 200 periodistas.

Acaso por olvido, el crack del Barcelona no aludió a la presencia de Guardiola en el partido que enfrentó a Argentina con Nigeria en Porto Alegre durante el Mundial de Brasil 2014. Ni a la reciente visita del técnico del Bayern al Camp Nou, cuando los azulgrana enfrentaron al Manchester City en los octavos de la Champions.

"Ver a Messi es un lujo", dijo entonces Guardiola, que durante el encuentro no escondió su asombro ante las acciones de su ex pupilo.

No consta, sin embargo, que el técnico catalán y Messi se saludaran tras el partido. Como tampoco trascendió que lo hicieran en el Mundial de Brasil, y puede suceder mañana.

El astro argentino, en cualquier caso, es así: un hombre muy apegado a su círculo familiar, pero poco dado a cultivar y a extender sus relaciones con las personas que pasan por su vida más de lo estrictamente necesario. Ni lo hizo con sus amigos de su Rosario natal, ni con sus ex compañeros de equipo ni tampoco con el resto de entrenadores que alguna vez lo dirigieron.

"En la etapa que estuvo Guardiola, más allá de los títulos, yo crecí y aprendí muchísimo, y ahora sigo intentando agregar cosas a mi fútbol", afirmó hoy Messi, ante la enésima pregunta sobre su relación con su ex entrenador y después de esbozar una gran sonrisa.

No se apreció en el cuatro veces Balón Oro un sentimiento especial por chocar con el hombre que universalizó su fútbol.

"Tenemos ganas de enfrentar el partido por lo que significa, estar de nuevo en una final, ante un rival grandísimo", se limitó a decir el argentino, que tampoco manifestó especial ánimo de revancha contra el Bayern, por la eliminación ante los alemanes hace dos años por un global de 7-0.  

"Nos dolió cómo caímos en aquella semifinal, pero ya pasó mucho de eso. Ahora llegamos de forma diferente", aseveró Messi con una sonrisa..

La comparecencia del crack argentino no fue casual. Ningún otro jugador podría haber mantenido por parte azulgrana el pulso mediático con Guardiola, maestro ante los micrófonos y gran foco de atención en su primera visita al Camp Nou como entrenador rival.

"Era lo que había que hacer", reconocieron a dpa fuentes del club azulgrana sobre la comparecencia del astro argentino.

Convencerlo de que, 22 meses después de que lo hiciera por última vez, volviera a sentarse en la sala de prensa de la Ciudad Deportiva del Barcelona no fue del todo fácil. Pero, una vez logrado, tuvo los efectos esperados por el club: unos 200 periodistas de todo el mundo y más de 30 cámaras de televisión batieron el récord de asistencia en una sala nada acostumbrada a la presencia de la estrella azulgrana y que se convirtió en un horno.

No congregará a menos medios la rueda de prensa más tarde de Guardiola, "el mejor entrenador del mundo", según su amigo y rival el miércoles Luis Enrique.

"Para los jugadores, será bonito volver a ver a su entrenador, pero ellos anteponen la importancia de esta eliminatoria a cualquier otra cosa y siempre hay tiempo para saludarlo al acabar el partido", señaló el técnico del Barcelona sobre el regreso de su colega.

"Es normal que haya un homenaje (en el Camp Nou) por lo que dio Pep a este club, por lo que significó como entrenador y porque es de la casa. Pero una vez que empiece al partido la hinchada del Barcelona va a alentar a su equipo", abundó Messi.

Guardiola es, probablemente, el entrenador que mejor conoce al argentino. Pero, como recordó Luis Enrique, eso no significa que tenga la fórmula para parar al crack azulgrana.  

"Él nos conoce muy bien a nosotros, no sólo a mí, y nosotros sabemos lo que él le pide a su equipo. Es 50 y 50", apuntó Messi.

Su duelo con Guardiola comenzó a jugarse hoy en la sala de prensa. El verdadero se verá el miércoles sobre el césped del Camp Nou.

Messi: "Crecí y aprendí muchísimo con Guardiola

El futbolista argentino Lionel Messi recordó hoy la etapa de Josep Guardiola como entrenador del Barcelona y aseguró que creció y aprendió "muchísimo" con el actual técnico del Bayern Múnich.

Messi ofreció su primera rueda de prensa desde el 17 de julio de 2013. La semifinal de la Liga de Campeones de mañana ante el Bayern Múnich y el regreso de Guardiola a Barcelona propiciaron una puesta en escena especial del club español, con el argentino frente a los micrófonos.

"Es normal que haya un homenaje (en el Camp Nou) por lo que dio Pep a este club. Pero una vez que empiece al partido la hinchada del Barcelona va a alentar a su equipo", fue uno de sus mensajes.

La rueda de prensa se extendió durante 15 minutos y uno de los temas estelares fue la relación entre Guardiola y Messi. El astro del Barcelona reconoció que cuando el técnico salió, en 2012, la relación acabó.

"Desde que se fue nos cruzamos una vez en una gala de FIFA. Aparte de eso, no tuvimos más relación. Pero tuvimos una relación muy buena cuando estuvimos acá", aclaró Messi.

El futbolista argentino recordó el tiempo que pasaron juntos. "En la etapa que estuvo Guardiola, más allá de los títulos, yo crecí y aprendí muchísimo, y ahora sigo intentando agregar cosas a mi fútbol", comentó.

Messi descartó que la presencia de Guardiola suponga un aliciente extra. "Es una motivación el partido que es. El año pasado no pudimos llegar a esta instancia y estamos con ganas de jugar este partido y tener una final más", consideró.

El delantero azulgrana reconoció que no habrá secretos en el campo. "(Guardiola) Nos conoce bien a todos. Estuvo mucho tiempo con nosotros, vivimos muchas cosas importantes, tuvimos la suerte de conseguir muchos títulos. Es un entrenador que estudia todo", explicó.

Y añadió: "Él nos conoce muy bien a nosotros y nosotros sabemos lo que le pide a su equipo. Es 50 y 50. Nos conocemos todos muy bien".

Messi descartó que exista un ánimo de revancha después de lo ocurrido hace dos años, cuando el Bayern Múnich eliminó al Barcelona de la Liga de Campeones por un resultado global de 7-0.

"Tenemos ganas de enfrentar el partido por lo que significa, estar de nuevo en una final, ante un rival grandísimo. Nos dolió cómo caímos en aquella semifinal, pero ya pasó mucho de eso. Ahora llegamos de forma diferente", aseguró.

El Bayern llegará a Barcelona con bajas como las de David Alaba, Arjen Robben o Franck Ribery. "No es excusa para el Bayern. Ni para nosotros ni para ellos. Somos equipos demasiado grandes como para buscar esas excusas", manifestó Messi.

Para el argentino, "las sensaciones son muy buenas" por cómo se encuentra en equipo en cada encuentro. "Estamos con tranquilidad, yendo paso a paso, pensando en el siguiente partido sin ir más allá. Nos quedan partidos difíciles por jugar", declaró.

"Es un momento muy importante porque se acerca el final, porque se deciden todos los títulos, porque tenemos la suerte de luchar por todo", agregó Messi, quien insistió en descartar su interés por los premios individuales. "Siempre dije que lo importante para mí son los títulos a nivel de grupos. Eso lleva a los premios individuales", aclaró.

El argentino pidió ir "partido a partido", y no pensar todavía en la final: "Todavía quedan partidos importantes y mañana es uno de ellos. Va a ser durísimo por el rival que tenemos en la cabeza". 

"A estas alturas no hay favoritos. Son dos grandes equipos, con mucha historia ambos, y no hay favoritos en semifinales. Jugamos de local, tenemos la oportunidad de estar ante nuestra gente, y llegar con un buen resultado a la vuelta es muy importante", amplió.

Además, Messi evitó hablar de presión para los dos equipos. "Ninguno tiene presión, sí obligación. Por la grandeza de los clubes. Estamos obligados a conseguir todo por la grandeza de los clubes. No sé si lo llamaría presión. Más obligación", confesó.

Finalmente, el argentino se refirió a cómo cambió su rendimiento de una temporada a otra. "El año pasado fue difícil para mí por todo lo que me tocó vivir dentro y fuera de la cancha. Tuve lesiones, volví y no me sentí como yo quería. Fue un año complicado y cuando empecé este año fue diferente y me encontré muy bien todo el tiempo", resumió.

TEMAS

COMENTARIOS

Selección de los editores