Si no confrontamos a los que tienen el poder, no estamos haciendo periodismo: Jorge Ramos
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En su ponencia “Periodismo o cómo evitar ser un dinosaurio”, el periodista detalló tres momentos clave que todo reportero debe seguir para no desaparecer: comunicar la verdad, confrontar al poder y usar la tecnología
La principal responsabilidad social del periodismo es confrontar a quienes tienen el poder, aseguró el comunicador Jorge Ramos este lunes en la 75 Asamblea General de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en Miami, Florida.
“Nuestro trabajo es cuestionar a los que tienen el poder, para eso servimos, somos contrapoder y si no es contrapoder, no es periodismo… Si no confrontamos a los que tienen el poder, no estamos haciendo periodismo”, dijo el periodista de origen mexicano que trabaja en la cadena Univisión.
En su ponencia “Periodismo o cómo evitar ser un dinosaurio”, Jorge Ramos detalló tres momentos clave que todo reportero debe seguir para no desaparecer: comunicar la verdad, confrontar al poder y usar la tecnología.
Empezó con la premisa básica y más conocida: “reportear la realidad tal y como es y no como quisiéramos que fuera”, es decir, contar la verdad para tener credibilidad, pues si un reportero pierde credibilidad, pierde todo.
El siguiente tema fue más polémico porque va en contra de lo que enseñan las escuelas de periodismo, es decir, buscar la neutralidad, pero para Jorge Ramos el periodista tiene que tomar partido.
“Debemos tomar partido, ¿cuándo?, debemos tomar partido en casos de discriminación, en casos de racismo, en casos de corrupción, en casos de mentiras públicas, en casos de violación a los derechos humanos y en casos de dictaduras”, afirmó.
Citó dos ejemplos de su carrera: el primero fue cuando el entonces aspirante republicano a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, llamó a los mexicanos como violadores y criminales. Entonces Jorge Ramos, de origen mexicano, buscó a Trump en sus giras para preguntarle y confrontarlo por su política antiinmigración. Al reportero lo sacaron de un salón en Dubuque, Iowa.
Otro caso fue ante el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a quien cuestionó por su legitimidad y las condiciones del país, algo que al líder venezolano no le gustó y lo calificó de derecha, y decidió terminar la entrevista. Aquí las autoridades confiscaron el equipo de los periodistas.
“A veces creemos que solo con reportar la verdad estamos cumpliendo, yo creo que nos equivocamos; nos equivocamos cuando nuestra principal función realmente es confrontar a los que tienen el poder… Si no tomamos partido, no estamos haciendo nuestro trabajo”, dijo.
Al final recomendó utilizar la tecnología para no extinguirse como dinosaurios del periodismo; es decir, brincar a las diferentes plataformas de comunicación para informar, como a través de redes sociales.
“Imagínense pedirle a alguien que prenda el televisor a una hora específica, pero si es un minuto antes o treinta minutos después, no estoy ahí; esa es precisamente la definición de ser un dinosaurio. Y en esta época no se puede ser un dinosaurio”.
Puso de ejemplo su noticiero en Univisión: alcanza de 1 a 2 millones de audiencia, pero cuando ocurre un hecho relevante y lo transmite desde su celular vía Facebook, Twitter o Instagram alcanza 5 o 6 millones de usuarios.
“No pretendo competir en contra de Twitter, Facebook o Instagram. Lo que sí quiero hacer es utilizar toda esta tecnología para que me ayuden”, dijo y recomendó a todos los asistentes a la Asamblea General de la SIP hacerlo lo antes posible.