Ya está planeada la reparación de vitrales del Palacio de Gobierno de Monterrey

Nacional
/ 13 enero 2017

Luego de la reunión de un Comité se determinó que la empresa Casa Montaño se hiciera cargo de los trabajos.

Monterrey, Nuevo León.- Será en las próximas semanas cuando el Instituto Nacional de Bellas Artes entregue el resultado del dictamen en el que trabaja para la restauración de los vitrales de Palacio de Gobierno.

Las obras fueron dañadas durante la protesta contra el gasolinazo, ocurrida el pasado 5 de enero.

El Gobierno del estado en conjunto con las autoridades federales trabaja de manera conjunta para el rescate y restauración de las piezas.

Además personal de la Coordinación de Exposiciones de 3 Museos, junto con personal del Palacio de Gobierno y del Instituto de Criminalística y Servicios Periciales, trabajaron desde el día de los hechos en la recolección y clasificación del patrimonio dañado.

Luego de la reunión de un Comité se determinó que la empresa Casa Montaño se hiciera cargo de los trabajos.

Dicha casa con sede en Torreón, Coahuila tiene más de 100 años de experiencia en México.

Cabe señalar que ellos se hicieron cargo del desmontaje de los vitrales y de su depósito temporal en un sitio seguro.

De acuerdo con especialistas, la destrucción de los vitrales implica la pérdida de una parte de la historia de Nuevo León.

Aparte de que significa también la pérdida de valiosos ejemplares que representan la majestuosidad del arte suntuario floreciente en los últimos años del siglo XIX y principios del XX.

Las piezas fueron realizadas por la casa Pellandini y decoradas por el pintor catalán Víctor Marco y Urrutia.

Marco Urrutia se integró a la empresa Pellandini en 1901 y desarrolló sus diseños con la firma hasta 1906 para seguir con su trabajo de manera independiente.

En los vitrales de Palacio de Gobierno se hallaba estampada la forma de C Pellandini y en algunos de ellos y el año 1906 aunque es incierta la fecha de su colocación ya que en 1907 durante la inauguración del monumento a Juárez, los ventanales todavía no tenían los vitrales.

Hasta el 5 de enero del año en curso no se tenía noticias de que hubieran sufrido deterioro ni siquiera durante el movimiento revolucionario en 1910.

Solamente, en 1985, durante un mitin político uno sufrió un deterioro y fue restaurado por la misma casa Montaño.

COMENTARIOS

Selección de los editores