Apuntes sobre la música académica en Saltillo (2)

Opinión
/ 24 julio 2024

Del parrense Teodoro Cayuso (1819-1901) Esteban L. Portillo se refiere con delicados adjetivos: “...talento musical, empeño, constancia y dedicación...” Cultivó el clarinete, la guitarra, la flauta, aunque fue en el violín con el que destacó. Formó parte de la orquesta del Teatro Nacional de México desde 1854 hasta 1861, fecha que regresó a Parras donde abrió su academia de piano y canto y hasta donde llegaron los parrenses Pedro Valdés Fraga, Margarita Prince Rojo y el saltillense Arturo Aguirre.

De Pedro Valdés Fraga (1864-1943) se sabe que de Parras marchó directo a la capital donde fue discípulo del gran operista Melesio Morales (1838-1908) en el Conservatorio Nacional. Como violinista fue concertino de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio, y de la Sinfónica Nacional, bajo la dirección de Manuel M. Ponce. Integró el Cuarteto Clásico del Conservatorio junto al capitalino Ezequiel Sierra, y el barcelonés José Rocabruna, quienes, chisme aparte, fueron los únicos tres solistas varones de la Orquesta Mexicana de Señoritas Haydn-Beethoven (1923-1926) fundada y dirigida por el poblano Luis G. Saloma.

Hay una historia aparentemente doble de Margarita Prince Rojo (c. 1865-1965). Una versión afirma que es hija de Mr. Prince, fundador de La Hibernia, y que casó con un violinista italiano llamado Enrico Zanardi, y en un segundo matrimonio con el boticario Eduardo Máynez, padres del violinista Eduardo Máynez Prince. Otra afirma que es hija de Cosme Prince y casó con José María Morales; en una fallece en Saltillo al frente de la Academia, y en la otra muere en Parras, al frente de una tienda de música. En ambas se consigna la fundación de la academia de música Santa Cecilia en Saltillo. En cualquier caso, una Margarita Prince Rojo fue alumna de Teodoro Cayuso y maestra del poeta y rector de la UdeC Felipe Sánchez de la Fuente, del director de orquesta Lorenzo Hernández, y de la inmortal Carmen Harlan Laroche (1909-1984).

Además de fina pintora de la vida cotidiana Carmen Harlan fue pianista y maestra de generaciones. Durante muchos años las familias locales buscaban inscribir a la descendencia en la academia de ballet de Carmen Guerra de Weber o en la de música de Carmen Harlan. La academia de ésta última se convirtió en un centro cultural que recibió como maestros invitados a músicos como Luis Sandi — fundador del Coro de Madrigalistas, hoy Coro de Madrigalistas de Bellas Artes—, o Lauro David Uranga —vertiginoso letrista capaz de componer y estrenar hasta diez canciones por semana en el teatro Principal de la capital; autor de Alborada (De las flores de tu jardín / Llenas de tristeza y de dolor...)

Muy posiblemente Carmen Harlan también fue discípula del violinista, pianista, compositor y director de orquesta Félix Ruano Micó (Madrid, 1884-Saltillo1959). Habiendo estudiado en el Real Conservatorio de Música de Madrid, llegó a nuestro Continente en 1907. Fundó en San Antonio, Tx, el Bach Conservatory of Music, y en México destacó como director de orquesta de opereta y zarzuela. Se desconoce cómo y por qué llegó a Saltillo en 1925, sólo se sabe que fue profesor de la Escuela Normal de Coahuila y que fundó la Academia Mozart, a la que quizá acudió la joven Carmen Harlan. Lo singular de Félix Ruano fue que en 1942 fundó la Orquesta Sinfónica de Coahuila que funcionó durante tres años consecutivos. Escribió, además, en Saltillo dos obras sinfónicas El fuego nuevo (1932), y su romance La sunamita,

Sin ánimo de confundir, el diccionario biográfico de Arturo Berrueto menciona que Jesús Flores García (1898-1968) fundó y dirigió la primera Orquesta Sinfónica del Estado en 1947. Sin embargo, en la entrada CASTILLO MOLINA, Julián, dice: “...incursionó con notable éxito en las agrupaciones musicales más importantes que existieron en la capital del Estado (...) Por su trascendencia destacan la Orquesta Sinfónica de Saltillo que, a iniciativa del licenciado Jesús Flores García, se fundó en 1949. Posteriormente se incorporó a la Orquesta Sinfónica de Coahuila, alcanzando notable prestigio en las propias ciudades de Coahuila (...) Extintas estas agrupaciones y retirado ya del ejercicio profesional en dichas organizaciones, fue violinista en la Catedral de Saltillo (1951) ...” Se abre una interesante puerta a la investigación histórica musical en nuestra ciudad, ya que existe otra Orquesta Sinfónica de Saltillo constituida en 1950 y dirigida por Jesús Reyes (Saltillo 1898-CdMx ¿197?), miembro fundador de la Orquesta Sinfónica de México (1928).

...seguiremos informando. Cambio y fuera.

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