Si gana Adrián, pierde Monterrey
COMPARTIR
Si gana Mariana, pierde Nuevo León
Les platico por qué:
Adrián es la cabeza visible de una fuerza política que no se ha ido desde que el priyista Natividad González Parás le ganó la gubernatura al panista Mauricio Fernández en 2003.
Ese año se instauró un maximato que manda en NL fuera de los reflectores desde 2015.
Aunque nos hagan creer que quien mueve los hilos es Rodrigo Medina -su sucesor de 2009 a 2015- Nati es el macizo, como dicen en la maña.
Tan lo es, que la única persona a quien Samuel García escucha es Nati y antes hizo lo mismo El Bronco, Jaime Rodríguez, quien cuando asumió el poder metió al bote a Rodrigo y luego Samuel hizo lo mismo contra El Bronco.
Si las comparaciones son odiosas, las similitudes son tediosas.
El sistema político en México está diseñado para que las únicas posibilidades de gobernarlo y legislarlo se den por medio de los partidos políticos.
En NL, el camino “independiente” lo fundieron El Bronco y Miguel Treviño.
El primero como gobernador y el segundo siendo alcalde de San Pedro Garza García.
Si Adrián de la Garza gana las elecciones, pierde Monterrey, porque quien gobernará será Nati.
Y si Mariana lo vence, pierde NL, porque quien gobernará será Samuel.
Es justo eso para regios y nuevoleonenses?
Sí, porque por no salir a votar el 60% y más de los electores, viejos y nuevos políticos hacen de las suyas.
Colofón:
El abstencionismo hace rehenes a quienes votan.
El reloj se retrasa en México cada vez que en las elecciones gana el abstencionismo.
Cajón de sastre:
- Mañana, cambio completo de programa, sin faltar el Incomparable Iván; la Infame e Infumable Ramle y los desabridos gansitos rellenos de nada: la Ardiente, Ardorosa, Metiche, Culera, Sacatona y Collona Lady Rabietas Cochinilla -perdón- Cuachanilla- perdón- Cachanilla; el Estrógeno Jesús David, engendro unicelular de probeta y Lady; más la Sinsostenible Irene y la trepadora social, Martha Lozano, Tránsfuga sampetrina del Anafre, nuevas adquisiciones del clan de chaleros -perdón- chateros regios.