James Bond seguirá con sus fallas, pero el público podrá juzgarlo: Daniel Craig
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En el marco del estreno de su última participación como el agente 007, el actor británico habló sobre algunos momentos importantes de su trayectoria
Es como si Daniel Craig se resistiera a despedirse de James Bond. Se suponía que la quinta y última versión con ‘No Time To Die’ iba a estrenarse en Noviembre del 2019, con un anuncio oficial en el mismo lugar de Jamaica donde Ian Fleming había creado el famoso personaje del agente 007. Pero cuando cambiaron la fecha para Abril del 2020, se convirtió en la primera víctima del cine por la pandemia, cuando empezaron a cerrar las salas (70.000 solamente en China). Para ese entonces esperaban estrenar en Noviembre del 2020, pero los cines siguieron cerrados y recién en enero, decidieron fijar el estreno internacional definitivo, para el próximo 8 de Octubre. La despedida tampoco será corta. Con una duración de 174 minutos, exactamente dos horas y 53 minutos, ‘No Time To Die’ es la producción más larga en la historia de James Bond. Y con sus cinco superproducciones como el agente 007, Daniel Craig suma un total de 719 minutos, casi 12 horas de ‘time’ en cine.
¿Cómo se compara la época de la pandemia en que no pudimos salir de casa con la normalidad del actor que tiene que alejarse de la familia para el rodaje de una producción de cine?
“Bueno, es parte del trabajo. Al menos sé que mi familia lo acepta. Es lo que hago y es nuestra forma de ganarnos la vida, pero también nos hacemos tiempo para ver a nuestra gente. Es también la gran razón por la cual entré en este juego de la actuación en el cine”.
Los actores que interpretaron antes al Agente 007 quedaron encasillados como James Bond, pero en tu caso seguiste filmando otro estilo de cine ¿Fue algo natural o te lo propusiste desde el principio?
“Supongo que tuve suerte. Tuve suerte de contar con oportunidades diferentes, en el cine, porque siempre hubo bastante espacio entre las diferentes producciones de (James) Bond y yo solo quiero trabajar pero también me siento agradecido por lo bien que todo viene funcionando en mi carrera”.
¿Después de cinco versiones de James Bond, la preparación física para interpretarlo fue siempre la misma?
“Y... desde el principio de Bond, traté de estar en forma, al menos tres meses antes de empezar el rodaje. Después, incluso cuando todavía no tenía en la mano un guion, yo seguía procesando todo en mi cabeza, porque siempre necesitaba estar en buen estado físico, para las escenas de acción. Será por eso que tampoco pude ‘apagar’ nunca los entrenamientos. Es un proceso”.
¿Pero necesitas estar en buen estado físico cuando no filmas las producciones de James Bond?
“No, por suerte, no”.
¿Los otros estilos de cine no te exigen mucho más preparación que la actuación?
“No sé... cuando filmamos ‘Cowboys & Aliens’ tuve que cabalgar a caballo todos los días y en esa época iba al gimnasio cuatro veces por día. Pero con ‘The Girl with the Dragon Tatoo’ quise aumentar de peso desesperadamente, para no sugerir que soy así de verdad, porque si me veía como James Bond, la gente no iba a poder creer que yo era un periodista. Tenía que verme como un ser humano normal (Risas)”.
¿Te imaginas en un trabajo de verdad como periodista, con cierto estilo James Bond, escribiendo sobre temas peligrosos como en ‘The Girl with the Dragon Tattoo’?
“Sí, me imagino en algo así, totalmente. No sé si podría ser bueno, pero me puedo imaginar en un trabajo así”.
¿Aunque pongas en peligro a tu familia?
“Y sí, es el nivel más puro. Por ahí pasa el lado heroico. No me refiero a poner en peligro a mi familia, pero dar todo en un trabajo... todos sabemos muy bien que en el pasado, los gobiernos o ciertas organizaciones llegaron a asesinar periodistas. Y sabemos lo importante que es el estilo de periodismo de investigación”.
¿Cómo te llevas en la realidad con el otro estilo sensacionalista del periodismo y los paparazzi que te persiguen todo el tiempo?
“Mientras haya un lugar que los alimente, siempre van a cobrar fuerza. Yo tengo que aceptarlo en mi vida. Es parte de lo que yo hago. Pero también debería haber ciertos límites, para todos, en los temas personales. Debería hacerse algo con aquellos que invaden la vida privada. Pero yo también tengo buena relación con ustedes. Solo hay una parte, en especial en Gran Bretaña, que huele muy mal. Por eso, a nivel personal, mientras pueda tratar de mantener en privado mi vida privada, lo demás está todo bien”.
¿Y ahora que finalmente se estrena ‘No Time To Die’, se siente la presión de salir a promocionarla para superar el éxito de las anteriores versiones de James Bond?
“Digamos que viví muchos momentos así. Y sé que no puedo complacer a todo el mundo. Eso lo tengo muy claro. Es imposible complacer a todos. Ahora, la gente es quien decide si le gusta, si no le gusta, si quieren discutir si es buena. Es lo bueno del cine. Para eso está, para crear discusiones, para crear debates, esperando que hablen bastante en Internet”.
¿En la nueva versión de ‘No Time To Die’, James Bond se retira del mundo del espionaje desde la historia ‘Spectre’, como Daniel Craig se ‘jubila’ de este personaje?
“Y... sí, él vuelve a su hogar espiritual, en Jamaica, totalmente fuera de servicio. Pero Bond no es la clase de personaje que puede atarse de manos. Se mantiene ocupado, en forma. Es algo que tratamos de analizar bastante entre nosotros. Hay muchas coincidencias y es una buena forma de empezar cualquier historia en el cine, porque te permite salir a correr enseguida. De repente hay otro agente 00 y le piden como favor, sin trabajar oficialmente para la CIA, que salga a investigar... a Cuba”.
¿La realidad del mundo siempre se ve reflejada en las historias de James Bond, como esta vez con Cuba o el tema del #MeToo con una nueva espía feminista?
“Es imposible evitarlo. Si te fijas en las diferentes versiones de Bond, la forma en que él se viste, muestra la época en que se filmó. Pero lo que pasa en el mundo también lo influencia. Tampoco hay que agregar demasiadas referencias actuales y es uno de los miedos que nosotros también tuvimos. Hubo muchos cuestionamientos del lado del #MeToo y no podemos resolverlo directamente con Bond, porque no se le puede cambiar la forma de pensar. Pero cuando pones en la historia a alguien como Lashana Lynch como un agente 00 y un personaje increíblemente fuerte llamándole la atención, para mi es la mejor forma de hacerlo. Tampoco significa que él vaya a cambiar, va a seguir siendo James Bond con todas sus fallas, pero al menos permitimos que el público lo juzgue. Y esta vez, tenemos a Ana de Armas y Naomi Harris como brillantes actrices, en roles bastante fuertes”.
¿Algún gadget nuevo que nos puedas contar?
“Es una de las partes que más me apasionan. Yo siempre pedí los ‘gadgets’. Y los volvemos a traer. En ‘Spectre’ tuvimos varios, pero ahora los duplicamos. Necesitábamos refrescarlos. No tenemos ametralladoras al frente del auto Aston Martin, pero tenemos revólveres en miniatura, por ejemplo”.
Con la gran despedida de Daniel Craig como James Bond, se celebran también nada menos que 25 producciones del agente 007, con algunos cambios que no se ven en la pantalla, como el título que originalmente iba a ser ‘Bond 25’. MGM también sigue conservando los derechos en Estados Unidos, pero Universal Pictures se apoderó de la distribución en el resto del mundo, después que venció el contrato de Sony, con ‘Spectre’, en una guerra de derechos que también perdieron Warner y Fox. En la dirección, Sam Mendes ya había dicho que no volvería después de ‘Spectre’ y se suponía que lo iba a reemplazar Danny Boyle, pero finalmente fue reemplazado por la visión más joven del mismísimo Cary Joji Fukunaga que había sido descubierto por Gael García Bernal y Diego Luna, en el rol de productores con la película ‘Sin Nombre’, aunque después Cary se hizo más famoso dirigiendo para HBO la serie ‘True Detective’ y ya lo habían considerado para dirigir ‘Spectre’, antes que Mendes. Daniel Craig ni siquiera iba a protagonizarla. Él mismo había dicho que prefería cortarse una mano, antes de volver como James Bond por las lesiones que había sufrido en las producciones anteriores (hasta la esposa Rachel Weisz le había pedido que no volviera), pero él terminó aceptando el gran final con la condición de evitar el rodaje de escenas peligrosas, además del ofrecimiento de 25 millones de dólares, diez veces más de lo que había cobrado en ‘Casino Royale’. Con 53 años, incluso tiene exactamente la misma edad que Sean Connery tenía cuando estrenó su última versión de ‘Never Say Never Again’ (Y será la primera vez que se estrene una producción de James Bond, desde el fallecimiento de Sean Connery, el 31 de Octubre del 2020). Entre las novedades, el nuevo auto elegido es un Aston Martin Valhalla, diseñado por el equipo de carreras de Red Bull. Y en la música, Billie Eilish se convirtió en la cantante más jovencita de la serie de James Bond que además tuvo su propia nominación a un Premio Grammy, por haber estrenado antes que el cine. Entre los nuevos actores elegidos, al ser también el productor, Daniel Craig en persona eligió a Ana de Armas, después de haber trabajado juntos en ‘Knives Out’, para convertirla en la primera chica Bond cubana, con el personaje de Paloma. Y como el infaltable villano, eligieron nada menos que a Freddy Mercury... Perdón, no, no, Rami Malek.
¿Qué opinas de Rami Malek como el nuevo villano?
“Rami estuvo estupendo. Tuvimos suerte de tener alguien como él. También fue uno de los primeros que habíamos mencionado desde un principio, cuestionando si aceptaría el desafío, mucho antes de saber la parte que le iba a tocar. Como idea era una genialidad. Y para cuando ya tuvimos un guion, salimos a buscarlo”.
¿Y qué pasó con Danny Boyle que fue reemplazado por Cary Fukunaga para dirigir ‘No Time To Die’?
“Pasamos por todo un proceso con Danny Boyle... es una de las cosas que pasan mucho en el cine, pero con el cine de James Bond llama más la atención. Todo fue muy adulto y amigable. El nuevo director Cary Fukunaga también ya había hablado antes sobre la posibilidad de filmar una de estas producciones. Y él también es un visionario, con un estilo visual muy fuerte. Tener a alguien que entendía muy bien el lenguaje del cine era muy importante, no solo para contar una historia, sino la forma que necesitaba sentirse y ver y la acción de James Bond. Cary también es muy joven y tiene toda la adrenalina. Siete meses después de empezar el rodaje, todavía conservaba la misma energía del principio. Tuvimos suerte de tenerlo, porque además es escritor y fue muy importante para nosotros, cuando llegamos a un punto donde nos pasábamos cambiando todo, constantemente”.
¿Es cierto que Rami Malek pidió una reunión para volver a filmar una de las escenas?
“Adentro del estudio siempre vas a tratar de cambiar cosas. Y es genial, pero también se necesita cierto fundamento. Y eso es lo que hicimos. Yo también me había lesionado y fue un buen momento para parar y verlo todo a la distancia. Se tomaron varias decisiones distintas. Tampoco había demasiado tiempo para morir (Risas)”.