Antes de ser asesinados, curas fueron a fiesta y tomaron: fiscal de Guerrero
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El fiscal de Guerrero, Xavier Olea, destacó que el presbítero Germaín Muñiz García fue fotografiado portando un arma de grueso calibre y en compañía de hombres armados
CIUDAD DE MÉXICO. El fiscal de Guerrero, Xavier Olea, informó que los presbíteros Germaín Muñiz García e Iván Añorve Jaimes, asistieron a una fiesta el 4 de febrero, en la que ingirieron bebidas alcohólicas y se les vio con armas de grueso calibre, antes de ser ejecutados en la carretera federal Iguala-Taxco.
En rueda de prensa, Olea Peláez, detalló que las “hoy víctimas salieron imprudentemente a las 19:00 horas, el 4 de febrero con dirección a Taxco, donde hicieron una parada en un hotel”.
Las hoy víctimas salieron de la población Mezcala, aproximadamente a las 19:00 horas el día 4 de febrero, con dirección a Taxco, donde hicieron una parada en el hotel “Argento”, solicitando dos habitaciones, donde dejaron sus maletas, para después dirigirse a la población de Juliantla, Municipio de Taxco de Alarcón, donde acudieron a un baile, donde hubo jaripeo y amenizó el grupo “Bronco”, al cual llegaron aproximadamente a las 22:30 horas”, precisó.
Destacó que el sacerdote Germaín Muñiz García fue fotografiado portando un arma de grueso calibre y en compañía de hombres fuertemente armados.
Se tiene conocimiento de que los sacerdotes acudieron a dicho baile, estuvieron ingiriendo bebidas alcohólicas, lo que implica para ellos una imprudencia”, dijo.
Destacó que de las investigaciones, así como de testimonios vertidos por personas que acudieron a dicho baile, "se tiene conocimiento que existió un conflicto durante el baile, de diversas personas con el grupo de personas que acompañaban a los sacerdotes Germain Muñiz García e Iván Añorve Jaimes. De lo que se desprende la existencia de un conflicto previo”.